img Mycalyna - La reina del Este  /  Capítulo 5 Soy una entrometida | 25.00%
Instalar App
Historia

Capítulo 5 Soy una entrometida

Palabras:1661    |    Actualizado en: 12/03/2025

hombre grandote, haciéndome

nción, además esa cantidad de aretes por su rostr

que es muy

de, me miró con cara dé; «era

pañero, tambié

y no resultó. Quise decirle,

á como quiere, ya todas las mujeres

par

mos en el cementerio. Cuando la conocí, prometió quedarse siempre a mi lado, además tiene una sutileza para manipula

como ahora tienes novio, ya no visitas.

mofles de caramelo. -Le sonreí-. El jueves sin

a clase. -dije con una des

olestándot

miga no siempre estará ahí para proteger

o nada más vuelva a pasar. Ese joven me hizo sentir más insignificante que nunca. En total compartía cuatro clases con el vecino, no cruzamos palabra después de lo ocurrido en la mañan

ado. La cena la había dejado en el horno por si se demoraba. -A veces me pregunto, ¿dónde se meterá dos veces por semana?- No comí, pr

Fue una tarea complicada al principio, pero una vez la dominas, tu cuerpo crea una armonía con el mismo entorno y te conv

relajado, me ordené volar, de forma automática floté, recorrí la habitación, solté mis piernas. El cuerpo se desplazaba de un lado al otro, lo había logrado por fin, sentí felicidad por ello. Abrí los ojos para confirmar si

aste muy

mis brazos para que los objetos se alzar

e demo

nrió, miró a su compañ

nte clase? -Se acercó con su acom

r reírme, bajé la mirada

La señora

rte que los humanos no tienen nuestras habilidades, si te ven realizando ciertas maniobras

ofendida-. Jamás hemos practicado... bueno, solo los

s no han ev

ciamos. -Me incluyo en el montón-. El tiempo para desarrollar la capacidad telepática, nos encontramos atrapados en el consumismo y no nos detenemos a pensar: ¿Q

auto, somos infelices, si no tenemos la casa grande jamás construiremos una verdadera familia, si no viajamos por el mundo c

rugué la frente, ¿Qué clase de n

ilnay. Yelena.

-Sus ojos brillaron-.

tarme. Cuando niña no le presté atención, solo cuando pasaron varios sucesos ilóg

a primera vez que la vi luchar, mató a ese hombre de manera tan frí

do, pero tenía el cuchillo listo para hacerme daño yo misma. Esa

ó la abuela mientras se

. Jamás había sentido esa clase de e

vel de nuestro rey. -¿De qué hablarán?- Es la misma energ

sabía de ti. Después de la última reunión de la él

bes el

escaleras. La seguimos, era un poco incóm

de en Alma, no he descuidado mis responsabi

bicarte. ¿Cu

ería bueno echarle un vistaz

ierra hasta la mayoría de edad terrícola. -Se miraron mientras

? -intervine agitando las

ún

untas. Milnay resultó ser la mano derecha de la abuela en la socie

e que eres la maga mayor. -Se mi

ó mucho sus ojo

erd

ser parte extraterrestre, era no hacer nada, con solo dese

a mi re

subía las escalera

ose ¿sin supervisión? -La miré, arqueé

que has depositado en mí. -Se m

na de hacer

entana, correspondió el gesto. Cerré las cortinas, al dirigirme a la otra ventana; la que quedaba frente a la habitación de Jerónimo para cerra

!, ¿quiere

anera brusca, sin embargo, no me import

buen lugar

queño balcón igual al mío, su h

ar?... No olía a ninguna hierba

o, sentí pena por él. Era el típico humano el cual esconde su dolor, sus temores, sus

mí, fue tan sucia la forma en como ella lo besaba. Suspiré, di la vuelta, no quiero ver un es

ona? -giré para quedar frente a

eas, jamás seré una mujer

o me d

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY