el auto, aquellos cuerpos que quedaron debajo de un autobús, los gritos, las manchas de sangre, las luces rojas y
e, el cual resaltaba ente el gentío. Esa mano inerte hizo que las lágrimas salieran
Su cabello de igual forma, pegado a su frente y cuello. Su pec
an las seis de la mañana con tres minutos. Apretó los ojos y se qui
de nuevo, la pesadil
a que este tenía mucho frizz y además, se le ondulaba. Tomó una coleta y su mochila para bajar a la cocina. Su
joven mientras tomaba as
. - La mujer son
etrás de ella y su tía dejaba su plato frente a ella. La muchacha
ersidad? - preguntó su tío Marco
o. Eso serí
e molestia. Jessica lo miró con los ojos entrecerrados. Era insoportable. Sabía que ap
miences la universidad,
e llevo el auto a la universidad o simplemen
a muchacha mientras tomaba u
sica me di
u padre y todos rieron en la
guntó la mujer mirando a Jessica. La chica term
terminar la carrera de trabajo social. Era una labor poco considerada, pero muy importante en diferentes ámbitos de la sociedad, además, de esa forma podía ayudar a mucha
dientes. Caín le dio un ligero empujón a la muchacha y ella le gritó por ser un grosero
muchacha se apresuró a guardar el cepillo y le metió el pi
lengua y corrió hacia abajo
emente le sacó el dedo del medio recibiendo un golpe en la nuca por parte de su t
ha tenía un par de trenzas que caían sobre sus hombros con dos me
H
levantó de la banca para pode
ntras? ¿No te s
ni. -La peli marrón comenzó a quejarse mientra
hombros. - Jessica se carcajeó y procedió a
la semana. Jessica se había encargado de ordenar to
char sus últimos días relajándose antes de que las cosas comenzaran a ponerse estresantes. Entonces su tía apareció
gera sonrisa mientras negaba lentamente. Jessica conocía esa m
estaba en ca
ía
forma metafórica, en verdad era especial. Ella podía ver algunos recuerdos de las personas si estos causaban una emoción fuerte y
to, no q
mujer la abrazó. -Sé
de casa? - Pregunt
retó los ojos y luego mi
fie
chicos que no eran buenos amigos para él. Jessica sabía la clase de muchachos que eran. De cierta forma comprendía l
la vieron se alejaron. Caín la miró y simplemente se acercó para que se fueran d
ó ella mientras colocaba sus d
e sé dón
su celular y se metió a una apli
no me di
forma... sabía que ella estaba preocupada por su hijo, pero esto atravesaba l
iré p
Qu
debes borrar esa aplicación de tu celular y de la de tu hijo y
or él, pero debes hacerlo,
iño. - Acarició el c
once
mente. Tenía a dos personas en men
ix que era muy concurrida por universitarios como Jessica y sus amigas. Se encontraba cas
estido más sexi. - El comentario de Danielle hizo que su
primo idiota. No ha
os la misión. - S
l estaba aquí? - preguntó
larga
Danielle, pero al ver el silencio de su ami
tonto. - Las tres mostraron sus identificaci
ca. Jessica se sintió ligeramente perturbada ya que estos lugares no e
s plataformas con tubos para quienes se animaban a bailar. La chica no logró alcanzar a ver nada. Entonces
le había dado tiempo de vestirse para la ocasión. Llevaba un pantalón de lona con mangas holgadas, u
é qu
o de su camisa pegándolo a la pared. -Me dirás dónde está mi primo o le diré a tu madre que te mantienes
aire. - La chica lo so
a debido al frío y dio vueltas buscando al adolescente. Decidió ir a ver al estacionamiento, tal vez podría
color gris que se mecía lentamente. Por un momento pensó que se trataba de un temblor, pero era el único auto que se movía s
se mostró mirando a Jessica con expresión excitada. Él recorrió con sus manos la espalda de la chica sobre los delgados tirantes de su indumentaria. Abrió sus ojos y
la cabeza y de inmedia
xo en un auto. Más específicamente, que había visto a Rainer Mcgra
saber que había añadido u