DE E
ión y, desde entonces, no había sentido el calor de mi mate. Al principio, la espera no me había parecido interminable. Pero con los años, con cada luna llena que pasaba
ada por espesos bosques y colinas que protegían el territorio de la manada. Desde aquí, las luces de la ciudad apenas eran
-la voz profunda de Brath,
la, con la mirada
ola a la manada, y ahor
-Su tono era firme, convencido-. Ellos tendrán a su
Sin una Luna, un Alpha se desgasta con el tiempo. Lo había estado sintiendo en mi propio cuerpo. Aunque mantenía mi entrenamiento d
tienes razó
ar con Zack. Si iba a dejar la manada, aunque fuera por
, mi mano derecha, el único en quien confiaba ciegamente. Su cabello rubio oscuro caía deso
? -preguntó, cruz
ir a busca
pareció sorprendido, per
ero... -apoyó ambas manos en el escritorio
i garganta se cerró y una angustia que
r en eso. -Murmu
s que
ón del deber caer sobre mis hombros. Si fal
. Dime qué
no la encuentras, pond
is ojos brillaron con furia, y un gruñ
e te
retada-. Si no la encuentras, la manada te seguirá en tu caída. Con
arme a alguie
e la ames, Lucas. Solo q
me atravesaron como
mente-. Es la única forma de que nos dejen
cerré los ojos
ación de derrota en el alma-. Per
asi
enti
tomada. Partiría
.
DE E
s mapas humanos, se alzaba una fortaleza imponente. Un castillo antiguo, const
des, el horror rein
a, tengo hambre! -
endo una bandeja de plata con cinco copas de sangre. Las lágrimas
z no temblara. De la rabia o del miedo, sin impo
staban sentadas en la larga mesa de madera oscura, con miradas hambrientas y
eza baja. No debía mirarlos a los ojos
-murmuró, dand
alejarse, una mano fría y
sonrió, mostrando sus colmillos-. E
, trato de intentar luchar, pero algo en su interior se removía con v
por f
e pre
ar, él la atrajo con fuerza y h
cuchillo. Lágrimas de impot
-una voz femenina i
curos, sentada a su lado,
as a
iéndose los labios. La jove
hija... tomaría alg
stómago revuelto. Sa
jer se colocó frente a ella-.
su protectora, pero su visión
.
DE E
ro de
llegado. Me i
traba, todo
n
o ya esta
ejando la mansión
taba en al
ía lo imposible