o por mí después de todo lo que le dije? También lo eché de casa. Sin

r mi celular, puedo vender esta ca

, también podría alquilar un lugar paravivir. Pensé, abriendo la puerta

sonrió y noté que sus ojos azules brillaban más al verme, en el mismo

habitación. Se dio la vuelta y miró mi cuello. - ¿Quien te hizo esto? - preguntó en voz baja, sin embargo,

ejó sobre mis hombros. - ¿Quieres

mencé a hablar. - Esta mañana me despertaron unos golpes en la puert

no de ellos me agarró del cuello, me apretó fuerte, tirándome al suelo.

eo de la mesa auxiliar y se lo entr

casa con papeles para que los firmara, decía que eran negocio de la

Y frmé para no verlo irritado, ya que se irritaba fácilmente. Lo sé, fui

mitad del monto, ya que ayer fui tan

ra. Puedo vender la casa e intenta

u acuerdo? Si dijeron que quieren el importe total es porque no hay acuerdo, Lara. Hay que pensar en un

quitándole dinero a la empresa. Lo haremos así, pensaré en todo y vo

sobresalté. Tenía miedo de los rayos y los truenos y, además, cada vez que llovía la energía se iba. Sin

jos, como si estuviera pensando, y, finalmente, respondió. - Está bien,

ados estaba ordenada. Dijo que haría algunas llamadas. Mientras camin

e a la ventana, miraba el atard

ced de estos vagabundos, contrae deudas de juego en nombre de la mujer que juró proteger, amar y respe

zapatos y salí del cuarto, no me quité los pantalones, no me sentía cóm

la cocina, pensando en preparar el desayuno para los dos, abrí la puert

a mezclar la masa, puse agua en la cafetera y esperé a que estuviera

Los Ángeles, antes de ir al estudio

an mis favoritos, ese pequeño pensamiento me hacía suspirar fuerte,

ro. Llevaba un vestido suelto hasta la rodilla, su cabello mojado revela

ocándolo con los demás en el plato

eparar algo para desayunar, perdón si te desperté con mis ruidos, no sab

a se sentara, luego de agradecerle, ella se sentó. Podía oler tu champ

e conmocionado. - La miré, quien tenía ambas manos en su barbilla pensativa, aún era visible la marca

ué una a Lara, tomé una tortita, le agregué miel y la serví. Ella