Mi venganza sera tu final.

uando te encuentras en situaciones nuevas y no estás seguro

ás complicada, las dificultades surgen gradua

a influencia de nadie; sin embargo, a veces parece que eso no es suficiente. S

ontrar a alguien a quien amar

da, esa persona tan deseada no apare

ansablemente persiguiendo un balón. A mis ojos, él era la persona más atractiva que había conocido, o al menos eso creía en

ra admirada por todos; algunos incluso pretendían ser mis amigos para que les diera las respuestas en los exámenes. Sin

sesperanzada. Era deseo de desaparecer y sentirme completamente sumida en un a

l momento en que decidí confesarle mis sentimientos a Gabriel Ma

siempre te sorprende con un chocolate -decía mi amiga Mónica, quien confiaba

is exámenes para que pudiera estudiar, ya que estábamos en salones diferentes, lo que le permitía más

iene ningún tipo de sentimientos hacia mí? Serí

. No tienes de qué preocuparte. Escribe la carta y yo me encargaré de entregársela. Conozco a

No sabía si debía escribir esa carta o no. No tenía una idea clara de qué expresar en ella. Si esc

endo que estás temerosa, pero seguramente

ibir o no, pero finalmente opté por plasmar mis pensamientos desd

s buscaba las palabras precisas que expresaran con exactitud lo que sentía. Sin embar

que le entregaría a mi querido Gabriel

as para referirme a él como «Querido Gabriel». Nunca había usado esa expresión;

. Eso suena muc

rta mientras luchaba con los erro

ido G

a. Quería agradecerte por los ch

idades impresionantes, aunque pocos lo reconocen como yo. C

o, aunque creo que todas las chicas de la escuela lo saben. Quiero que sepas q

i no quieres, lo entenderé. Lamento mucho si esta carta no

do... A

mago al finalizarla. Tenía una sensación negativa; sabía que tal vez

e agrado? ¿Y si piensa que soy igual a las demás chicas que lo persiguen? No quería ni siquiera imaginarlo, no quería darl

a hubiera tenido acceso a esa carta, si nunca hubiera descubierto mis emocion

te, pero cada vez que lo recuerdo, experimento un dolor

do durante tres años. Aunque nunca antes le había revelado mi historia personal, ahora siento la necesidad d

todavía no puedo borrar de mi mente todo lo que ese despreciable Gabriel y sus com

revivir diariamente, cargo con el peso de todo el sufrimiento que experimenté durant

or hacia ese hombre, según mi percepció

siendo beneficioso para mí; aún no pu

rás, sino más bien aprender a superar

nder a continuar con la vida despué