splandeciente, angelical, tu sola presencia era capaz
gual que gigantescas montañas bastas de naturaleza en primavera, sus ojos eran dos guirnald
ue leche fresca, enigmática mujer, tu voz me intrigaba a l
rte , aun eras un niña pequeña cuando fui atraído por tu singular belleza, me volvía tu completo esclavo con solo observarte s
en unos cuantos días el año 1960, nuestro trabajo es honrado y nos permite sobrevivir, ahora relatare como floreció el más profundo amor entre nosotros aunque debo errar pues el amor re
nfiabas en mi pues sabias que te protegería del más mínimo insecto
ías convertido en la musa que iluminaba mi existencia , con el paso de los meses que rápidame
entir era mayor. Continuaba protegiéndote de los hombres quienes constantemente comenzaban a ac
vez más dentro de mí, tus ojos me tenían hechizado y tus labi
ice hacia mi terminarían en lo que sería mi ruina en este mundo, e
ás parecido a un manjar lleno de suculentos platillos, ahí visibles y alcance de un hombre hambriento, yo era
ación que en mis sueños no deja de existir, de la profanación que con mis ojos realizo tras la ventana de tu habitación al ve