a mascarilla puesta para que no notaran su faceta de frustración, el mayor subió par
le daba igual; lo que le molestaba era no haber podido darle el maldito beso al hombre de ojos heterocromos, ese pelinegro que lo volvía loco. Ahora que lo pensaba mejor, hubiera preferido mil veces ver
r amigo a su lado y él suspiró
ndió desinteresado, Chr
aremos, comeremos y beberemos ¿no te gusta la idea? -sonrió motivado. Lamentablemente no logró
mos? -dejánd
menor a una de las habitaciones escaleras arriba, una vez
le más- Bien... -se bajó la mascarilla- Casi me beso con Alex... -d
se tapó la boca cuidadosamente con las
dos veces... -mordi
nosotros y les cortamos la inspiración. -frunció el en
uerta abierta y ésta se cerró con fuerza por el viento
pasara en ese momento
una risa suave, casi infantil y burlon
efectos musicales o algo
solo había ropa blanca manchada de rojo artificial en el suelo- ¿Eso es
aja de color negro, en la tapa se leía algo en otro idioma que parecí
n los espíritus? -preguntó curioso el menor abrien
menor no dejaba de curiosear en el piso con la caja abierta en sus piernas, dentro de
sde aquí. -bromeó mientras veía a tr
e le regalo mi alma y que haga lo que quiera conmigo. -asegu
ellos con su presencia, se asemejaba a un cuerpo de espaldas, cuerpo que alargó la mano hacia la manilla de la habitación. No podía alejar
, qué es
o a ambos chicos, gritando en un tono
corazón del pecho. -exhaló con fuerz
groserías Christopher Dy
aron, tan solo míralos. -abrazados,
ndo a abrazarlo; ese hombre era Dios para am
adáver de la novia. Supongo que el vestido y las extensiones te las pus
ctor ¿no? -comp
to. -rió mientras movía el cuerpo gracioso- aunque en sus casos es
coro sonrientes. ¿Mencioné q
obviamente. -so
marca. -Santiago sonrió y le r
fallo de hace un rato- Vayan
Vamos Christo, Sebas te está buscando. -aquello iluminó los ojos del mencionad
ro mientras salía de la habitación con su peliazul e
dando abierta
muró, fue al armario nuevamente mientras guardaba la tabla nu
ia la puerta, pero ésta vez, no vio algo, el supuesto cuerpo ya no estaba. Se gu
e dio la vuelta y la puerta, que estaba abierta de par
igado saliendo de la habitación mientras se aco
entado frente al armario, con una gran sonris