pectativas y estereotipos ya marcados por la so
ían. Sin embargo, siempre me sentí completamente vacía, sin rumbo ni dirección.
disfrutaba mientras corría y brincaba en uno que otro charco. Al llegar, saludaba a todo el mundo c
mi trabajo, el cual no elegí por gusto o pasión, sino porque mi familia cons
pero ricos tampoco. Nuestra si
uación, no lo dudaron ni un instante, forzándome a estudiar y a trab
ices que eran, me sometía a cualquier orde
dar marcha atrás; no podía hacer
No había podido dejar de vivir en la casa de mis padres. No había podido
a casa, servicios básicos, comida, medicinas, etc. Mientras que apenas lograba resguarda
, las órdenes y quejas constantes de mis padres se repetían una y otra vez dentro
er lo mismo todos los días, llevaba a cabo mis labores casi en modo aut
da a estar plagada de miseria, sufr
hos sobre naturales que acontecieron una mañana que parecía so
ortes de cada área del último mes, sacar copias para la junta ejecutiva
dirigí al baño y, mirándome al espejo, m
día espero que sea mejo
ía en el espejo y lavaba mi rostro, noté que mi reflejo l
e movía de forma independiente y, apare
lo mismo; sin embargo, nu
aba respondiendo. No podía moverme; lo intentaba, pero mi cuerpo no r
? ¿No me reconoces? S
nervios y me permitió salir del
tiempo l
ñada, como si me estuviera
te pusiste frente al espejo. He escuchado cada quej
ocía en la vida. Eso podría ser algo muy bueno. Aunque, de
de hace tiempo, entonces sabría cuáles eran mis mayores sueños y también mis p
nito no era una de mis fortal
camente. Pero lo peor era que se suponía que lo hacía para que n
posible, pero se hacía tarde y no
rápido posible. Salí del baño y me puse
ando a que pasara un taxi, no dejaba
era mi imaginación jug
podía saberlo
y no llegar tarde; de lo contrario, mi jefe descontarí
taxi me dejó a unos metros de la empresa, tratando de llegar a ti
rita Valentina. Ll
sperándome frente a
eñor. ¿Nec
me escaneara, y con una expresi
gurarme de que l
nte alineada, aunque egocéntrica. Ordenaba demasiado y hacía poco; sus relaciones personales parecían ser más importantes que cumplir con su trabajo. Además, se volvía insoportable cuando n