ítu
sustancias psicotrópicas ubicado en la toscana italiana, acaban de ser asesinados; la noticia toma a Mario por sorpresa, quien acaba de quedar destruid
e esos negocios, pues tenia los suyos propios, pero ahora con este hecho sobrevenido debe actuar con rapidez, ya que también podría tener en cont
ar de su padre y hermano como jefe del Cartel, con efecto inmediato, que quede claro que
el d
nado, con muchas luces hermosas, de alta categoría, donde se esta llevando a cabo la celebración observa a una hermosa joven, de piel blanca, cabellera amar
hica, en seguida se da cuenta que tiene novio, no le hace mucha gracia haber descubi
acepta bailar con el, al momento de ver a Mario se siente profundamente atraída, es un hombre con un sex appeal que atrae a las mujeres al instante, lleno de múscu
pregunta está joven su nombre la joven le responde que su nombre es Nadia el nota que tiene un c
pues tiene asuntos importantes los cuales debe atender personalmente le agrade
ue quedar intrigada ya que, con el mismo misterio con el que ha llegado se había ido. -Quizás se molestó por no decirle de dónde era? o quizás
n poco alejado de donde está toda la gente por un camino flanqueado por altos arbustos frutales, el camino hacia el baño está muy oscuro mientras camina nadie siente que al
amiga de ella se preocupan y salen caminando hacia el baño a buscarla, de inmediato sobre el piso ven que la cartera de ésta ya sé ahí tirada; es ahí cuando la
a buscarla por toda la granja, alguien llama a una ambulancia y a la policía para dar el parte; pero por más que buscan en tod
lizar el día y sin tener noticias aún, vuelven a llamar a la policía; luego de esto la amiga de Nad
ITU
e se encuentra en una sala muy grande y muy hermosa muy ornamentadas con adornos de lujo, todo al parecer es caro; N
, no haya un sitio por dónde salir, una casa que aunque es enorme y tiene muchas pue
se da cuenta de inmediato que uno de ellos es Mario Cussano, aquel hombre extra
ujer, dándose cuenta en ese instante que era la mujer de su vida y que no podía dejarla escapar bajo ninguna circunstancia; debido a eso tuvo que tomar está fatídica y trágica decisión de
hacia la puerta por donde habían entrado estos hombres pero en seguida el hombre que acompañaba a Mario se le pone en medio y le bloquea el p
iere causarle ningún daño le dice también que no haga pedidos de auxilio pues está en una casa en donde no será escuch
golpea una y otra vez, ellos la detienen la abrazan, la abalanzan hacia el mueble y le impiden que siga g
s dos hombres se han alejado de la puerta y que está permanece abierta, por lo que rápidamente corre hacia esta tratando de escapar y logra salir de la sala y atraviesa un vestíbulo largo en el cual
s con los que estaba en la sala le ponen otro trapo c
cama muy amplia con todos los servicios, encuentra el desayuno a su lado y una mucama quién le dice sorpresivamente
y que le permita un teléfono para hablar con su familia pues tiene mucho miedo, la mujer sin darl
ara salir del cuarto están cerradas, se encuentra sola en ese cuarto triste. Se pone a llorar está desesperada, no encuentra a quién ni cómo
avor la deje irse que ella no ha hecho nada malo. Mario le pide que por favor se calme que desea hablar con ella tranquilamente pero que p
tirá hablar, que le permitirá que expl
, él se enamoró perdidamente de ella; nunca había sentido por una mujer lo que estab
me des ciento ochenta días. En ciento ochenta días yo te conquistaré, yo haré que tú me ames, que tú me desees, que tú anheles estar conmigo, que no quieras estar con nadie más ni vivi
e ningún plazo, tú eres simplemente un extraño que decidió secuestrarme en una fiesta te exij
mafia de la región de Toscana, pero que no debe temerle, pues él no le hará daño pero tiene las conexiones y el poder suficiente para hacer que ella pa
una sopa en la cara hace que él se moleste y tiré todo el resto de la
s, al día siguiente Nadia pasa el día entero sola encerrada en la habitación. Mario no aparece pero las mucamas si le llevan comida la han atendido y pasan por su habitación para hacerle compañía, todo el día Nadia ha estado sola pensand
uistarla, hacerla su mujer y convertirla en la reina del mundo, Nadia está bastante más calmada pero igual insiste en que no tiene por qué d
gracia hacerlo por lo que a propósito vuelve a lanzar todo al piso y sale supuestamente molesto del cuarto, al cerrar la puerta se ríe para sí
de calmarla le explica que el señor Mario es un hombre difícil, pero que es un hombre bueno, que no está allí para hacerle daño que le dé
vuelve acercarse a buscar a Nadia, ésta lo evita pero sin saberlo y sin ella misma darse cuenta se está sintiendo atra
él está dispuesto a llevarla a un restaurante elegan
ta ir con él; este le dice que revise su
so, tal y como es su estilo, no sabe como Mario pudo haberlo adivinado o sabido pero sin dudarlo le pide que se
a uno de los restaurantes más lujosos de la ciudad, pues Mario acostumbra a ir s
inero puede permitirse y pagar; así que poco a poco, gracias a esto comienza a sentirse más cómoda y más a gusto. En el camino Nadia se da cuenta que
ía en que la conoció, y ella de a poco se ha ido fijando más en él, que es un hombre atractivo del cual podría llegar a gustar, pe
n agrupados en la puerta esperándolo para recibirlo estaciona su limusina y proceden entrar en se
se atrevió por primera vez a robarle un beso a algo a lo que ella no se resistió ni se negó pues como él se había dado cuenta ya ella estaba sintiendo cosas por
acompaña a Nadia a su cuarto, en la puerta le pide que lo deje pasar que lo deje pasar la noche con ella ella inmediatamente se niega y le cierra l
po los dos nuevos amantes se compenetran de una forma única, como si se amaran desde siempre, hacen el amor con tanta pasión que las chispas salen de s
va felizmente, cómo duerme plácida y cómodamente, l
tulo
lazo de ciento ochenta días, le promete que solo estará ese tiempo si decide no estar con él, pero que sí decidiera por el contrario hacer una vida con él sería la reina del mundo, tendría cosas que nunca
a su voluntad y con el mismo también; decide aceptar su propuesta, ésta vez con un tono de juego pero también seria, Nadia le dice que acepta que le dará ese plazo de ciento ochenta días pero con dos cond
que acaba de ganar con él, acto seguido saca su teléfono y se lo entregas a Nadia, quién en ese instante llama a su familia y
trando entre los dos, poco a poco van tomándose más confianza mutua. Pero Nadia aún mantiene su desconfianza ante este extraño, aunque poco a poco se ha
, comida exquisita la saca en poco tiempo a visitar todos los lugares de Italia, en la costa sur con un restaurante exclusivo compartiendo botellas de vino los dos solos hablan de sus vidas, Nadia por fin
emitir llamas de calor y de alta intensidad, pues la pasión con la que hacen el amor es única de los más desquiciados amantes; a Nadia le encanta que le hagan muchas cosas sexuales, en lo cual
iene regalándole rosas, regalándole ropas caras, joyas caras y todos los detalles con los que puede enamorar a una mujer; una mujer que siente que el destino le envío pues le revela en una de las cenas que hacía años él había soñado con una mujer, en ese sueño vió perfectamente su cara y ÉSA fue la razón principal por la que aquella noch
cae rendida a su pies, sin ella decirle o revelarle, poco a poco se va enamorando cada vez más de este hombre ta
mor en la sala, sobre los muebles, sobre cada estatua, sobre cada poltrona, encima de cada silla; utilizan cada cuarto de la mansión par
oportunidad, siempre buscan oportunidad de tocar su cuerpo, inclusive cuando están reunidos cenando, por debajo de la mesa Mario sube su pierna y Nadia sube la de ella y llega a sus partes íntimas, allí empieza un juego de toqueteos entre a
piscina que suelen pasar juntos terminan haciendo el amor siempre debajo del agua bronceándose nadie y Mario pasándole el bronceador por t
ítu
cirle dónde se encuentra le garantiza que se encuentra bien, que se encuentra tranquila, que se encuentra feliz que está de vacaciones con unas amigas pero aún no puede decirle dónde está; están seguras la están pasando bien están viajando po
za a tocar sus piernas y sus partes íntimas, despertando así un sentimiento de excitación en ella por el cual decide que es tiempo de cortar la llamada pues está llegando a su clímax, este hombre es capaz de producirle orgasmos a su cuerpo
poco peligrosos y no quiere que tengan absolutamente ninguna información sobre ella. Nadia trata de preguntarle a Mario a qué se dedica pero este enseguida
no quiere bajo ninguna circunstancia que toque o ponga en peligro la vida de su amada. La reunión se desenvuelve normalmente, Mario cierra algunos negocios y Nadia ve a los socios de su am
senlace de siempre de llegar y hacer el amor como locos puesto que Mario
y temprano mientras
ca ropa y vestidos de playa. Exclamó M
de vamos, y preguntarme si
tirás, el lugar al que te llevaré está c
iré entonces, espera un momento mientras
dirigen. van a terminar el día en las hermosas Islas grie
Nadia no puede creer la belleza de
ente hermoso! Ex
pero aún así palidece ante tu belleza, no pued
unque no te lo merezcas, te esfuerzas muc
omaré todo para mi; pero por ahora solo voy a sacarte el vestido y tu
te atreverás alli cerca están el ca
pedir que se queden en la cabina y no ven
ra acá hasta que yo no los llame
isfrute su viaje. R
emos estar tranquilos y tener esta parte de
r hacer el amor! No dejas de sorprenderme,
o que me encantas y que eres el amor de mi vida, por demostrarte que estoy enamor
lguien que quiere eso no secuestra a otra persona y la
manera de poder evitar que te fueras de mi lado y nunca mas volver a v
incomunicada, no he podido volver a hablar con mi familia ni mis amigos, nadie sabe do
oluntad? Procede de una vez a quit
una llama de pasión y tomaron todo aquel avión, los gritos de pasión se oían por todos lados, el capitán y la azafata ya sabían en que estaba su jefe, dentro del camarote la pasión explot
l llamado del capitán, podían asomarse a través de las ventanas para que observara
modaron un poco, abrieron la puerta del camarote y procedieron a asom
nas que rodean la costa, es un paisaje idílico que empieza a elevar la pasión en estos dos amantes, quiene
vo, eran unas máquinas de hacer el amor, las ganas nunca paraban, sus cuerpos los llamaban el uno al otro, no debían ni querían separarse, sentían una atracción hacia ellos mismos que podía más, que era más fuer
echo con mucho cariño Mario para Nadia y que esperaba que lo ayudara a que ésta se acercara a él, aunque fuese un poco más, para demostrarle todo lo que él sentía por ella y dejara de sentirse mal por la forma en que la llevó a sus brazos, era un viaje para que ella olvidará quizás toda esa mala exper
ría por ahora, pero ella estaba poco a poco enamorándose más de él; este ho
oven por acá que estaba ta
die en el mundo, para hacer que solo piensa en el que solo deseo estar con él y que solo vea por el, Mario siente un amor indescriptible por esta mujer que lo cautivó, una mujer que él sa
e, para hacerla sentir una mujer verdaderamente amada y que siempre estará en su corazón. Pero no sabe cómo hacer que su a
na solamente para ellos y las personas que los iban a estar sirviendo durante su estadía, inmediatamente los montaron en una limusina y se los llevaron a aquellas villas, al llegar Nadia se dio cuenta que era un complejo extremadamente de lujo, uno en el que nunca hab
e además era extremadamente apasionado y amoroso, por el cual estaba empezando ya a sentir cosas que hacía pocos días no sentía aquel odio s
os llevaron al que sería su cuarto personal, un solo cuarto para ambos, pues fue la petición de Mario, aunque Nadia al princip
la cama e hicieron lo que tenían que hacer; el amor y la lujuria surgieron, los tomaron prisioneros no podían escapar de esa atrac
mas extraña, pues Nadia todavía sentía que odiaba a Mario por la forma en que se la había llevado, pero también sabía que este hombre misterioso ya
que provocaba este hombre en ella, siempre caía rendida a sus pies
te como vivir en un sueño, es la única parte bu
de pasarme en la vida, por eso quiero hacerlo todo
arías hacerlo todo el día? Pr
uarlo estoy muy dispuesto a demostrár
s? Estoy ansiosa por s
uno para el otro aunque quizás no lo supieran, ambos tenían la misma llama por dentro, y uno se la hacía crecer al otro, eran como una pareja de imanes que se atraían mutuamente cada vez que estaban cerca el uno del
el chofer los dejó en una parte muy céntrica, de manera que ellos salieron a explorar la isla caminando, agarrados de la mano; ambos p
les recordaban a ambos, viejos tiempos individuales en sus vidas y qué servían para abrir la men
untos sí hasta hace poco Nadia no soportaba a Mario, hasta hace poco Mario todavía se encontraba luchando para que ella le diera una oportun
bonita que cultivaban siempre, desde ahora entre los dos estaban poco a poco comenzando a disfrutar de lo que podría conv
e una película, era algo impresionante todas esas calles empedradas todas las edificaciones con sus paredes blancas brillantes hací
había visto antes y que estaba alegre de poder conocer aunque fuese con este hombre misterioso que la tenía allí en contra de su voluntad, pero que poco a poco ella misma había ido enamorándose de este hombre que
ara hacerle algún regalo daba en el clavo, siempre ella quedaba encantada y maravillada pues era como si el supiese exactamente lo que ella quería y cuand
e un agua azul cristalina que palidecía con las aguas del cielo mismo; era como si estuviesen en el propio paraíso un paraíso además que estabas para ellos dos solos inmediatamente la pasión se le subió ambos amantes decidieron ocultarse en una de estas cuevas naturales formadas por las
do su entorno ante ellos, eran dos amantes que el destino había juntado cuando el destino quiere que estén juntos siempre permanecerían de esa manera siempre deberían luchar por mantener su relación, ya que ésta estaba destinada a ocurrir, siempre habían estado destinados a conocerse y a e
hapuzón en aquella playa cristalina aquella playa que los llamaba y los invitaba a bañarse en sus aguas pues aq
tar se lee el uno al otro siempre andaban compitiendo en cada aspecto que podían, nadaron y nadaron hasta que casi se dieron cuenta que habían llegado a mar abierto allí ambos emprendieron el re
ban al parecer destinados a estar juntos y como sus almas y sus cuerpos dependían cada vez más el uno del otro, cómo sentían aquel llamado y aquellas ganas de estar juntos cuando estaban separados solo po
, toda esa pasión, toda esa lujuria y esa presencia tan imponente que él ejercía sobre ella, a veces demasiado ruda pero que s
tomaron un baño refrescante, se vistieron y procedieron a salir a cenar; Mario había mandado a cerrar un restaurante solo para ellos toda la cena y todo e
a hecho, pues nunca había tenido una experiencia sexual en público, era la primera vez que alguien la hacía reaccionar de esa manera. Lentamente Mario iba subiendo su pierna a tr
a practicarle sexo oral a Mario, estaban los dos envueltos en una pasión y un encuentro tan excitante que no les importaba nada más, solo experimentar la pasió
er las necesidades de ambos. Los dos eran muy calientes, muy ardientes y sexuales siempre vivían pendientes de cuándo sería la próxima relación entre ambos la pasión de los dos er
darle rienda suelta a sus deseos sexuales y carnales más bajos, lo más importante era satisfacerte ambos y unirse en aquella pasión que no hacía más
ra que pudiera seguir excitando aún más a Mario en esa situación, él rápidamente acomodó su pantalón y se d
rrió con normalidad y ambos disfrutaron plenamente de aquello que habían preparado para ellos, estaba todo muy delicioso y ambos disfruta
amantes con un beso muy apasionado y
ue atender asuntos de negocios que requerían su presencia, ella debido al sueño que tenía no le prestó mucha atención ya que se su
ría salido si se suponía que estaban de vacaciones, no debería tener ningún tipo de negocios en este momento pensó, así que rápidamente sin siquiera hab
quién no dejó rastro de que estaría haciendo y si estaba haciendo algo malo ella lo descubriría en el acto, ella era una mujer e
s, pasaron por todos los restaurantes de las zonas turísticas, pasaron inclusive por algunas de las playas y en ningún lado logró encontrarlo, hasta que pensaron ambos en pasar por los hoteles, allí revisa
podría visitar pero en ninguno lo encontraron. Hasta que al final se fueron al hotel de 5 estrellas de la playa más famosa de la isla, allí Nadia
os hombres, inmediatamente ésta se devolvió no se dejó ver por él y regresó rápidamente a su carro, sin siquiera preguntarle nada, se había dado cuenta que en efecto éste se encontraba en una reunión de negocios pues no iba a serle infiel con un gru
a la traicionaría, quizá era un hombre totalmente distinto a los que ya conocía y que valía la pena puesto que al menos
disfrutar, pasear, conocer y explorar todas esas partes que no había visto desde que llegó pues había salido poco con Mario, solamente a un restaurante lujoso y estar encerrada
er, esto la impulsa a un más en sus sentimientos de aceptación de este hombre misterioso que ha logrado conquistar su corazón, ha logrado con cada artilugio conquistarla no solo económicos sino por los sentimientos que esté posee, es un hombre
o, siempre logra convencerlas de hacer lo que él quiere y cuando él quiere, es como un
o, la lleva a lograr sus más bajas pasiones, sexy tan solo con verlo y sentirlo cerca cada vez que está ante su presencia, se derrite por dentro su
que la invita a hacer todo lo que él desea, que la invita a hacer su posesión más preciada pero que tam
dia está cayendo perdidamente enamorada cada vez más de este hombre misterioso que la trajo a su lado
llí espera que pronto llegue Mario para encontrarse con él para saludarlo y felicitarlo como solo ella
y consentido, por ende sabe también que debe tratarlo cómo se merece, la ha estado llenando de los mejores y más caros regalos, de todo lo que ella le gusta, de todo lo que a ella le importa y todo lo
la Toscana, por lo menos con su amiga cerca ella se sentirá cómoda segura y tranquila en ese ambiente en el que no tiene a nadie, pues él pasa tantas horas del día trabajando que ella se queda sola en una ca
sperando, inmediatamente sin mediar palabras se abalanza sobre ella con una pasión que los embriaga a ambos, pasión que los caracteriza y que los convierte a los dos en unos animales sedi