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Historia

Capítulo 5 De la Sangre al Deseo

Palabras:4535    |    Actualizado en: 04/03/2022

IGR

mirada en el rostro de

sexo varias veces, inclu

a una muerte dolorosa

éndose mientras se balancea

r durante ho

lamó Natasha entre

cerraban entre tant

a sujetaron por las nalgas,

. Ella gritó al s

ron saltar. La piel qu

ninguno de los dos tuvo qu

ros. Natasha presionó sus pie

abrazarlo más, sentir

l entrando, saliendo y l

lante, ahuecó la curva de

parte posterior de su garga

vantó sus caderas, lue

cubo gimió cuando echó la c

apoya contra

e sus músculos se contr

s, se mordió los labios, d

ntre los cuerpos

cabeza golpeó el parabris

cieron que sus gemidos fueran

us musculosos brazo

vem

ió y siguió

vió lo mejor que pudo dentro

r entre sus piernas a

bestida, y no iba a t

la súcubo con fuerza mientr

tembló aún más y una

perdido el control total

a dejó sin aliento, lati

hormiguearon hasta

que unos pocos empujone

s, dejó de respira

OM NA

IGR

OM NA

IGR

capi

lpe de izquierda y gol

e a él. Le dolían los de

ndo en v

Dante arregló su reme

a subido

esto y juras que n

echón de cabello que

l cuerpo de la súcubo, y de

quería prepararla para ir

haciendo lo mejor que podía.

ecesitó algo así, fue

ro habían pasado muchos,

necesari

tenemos que seguir co

Se limpió las manos sudorosas en

o al

idad en su rostro dio pa

se quedó mirando la bolsa de a

equeña pero equipada

zquierda, in

nvolucrarte conmigo

iz en tu pierna no es n

. Sintió una punzada en

e había hecho perder todo se

acer cualquier cosa para obl

eligroso para quedarme en l

paros en tratar

a. El miedo que inun

o la asustó. No me

te hizo

eza. Ella chasqueó

OM NA

IGR

Te daré lo

os hacia adelante, d

lones de chándal de Dante

la falda ajustada.

on facilidad, ladeando

a, tómala. Puedes usar

tan fuerte, deb

¿y cómo

yo ataco y tú defen

anceó el pie en el su

ó de espaldas y se golpeó

acolchado del suelo, la ca

¡

uy l

. - Natasha se cruzó de b

intentarlo de nuevo. D

nrió mientras miraba sus

ardia y lo pateó, haci

te s

o era

de un salto. Pero Dante

de nuevo. La súcubo rodó por

los codos para levantar

te, poniendo su brazo fren

n él. Natasha dio dos paso

atearlo de nuevo, otra sa

gil y fuert

siquiera lo había hecho suda

dose de uno de sus golpes,

estaba su torso. Ella s

có en su memoria los movi

Golpeó con el codo la ba

o en un área tan sensible

la pierna, haciéndola cae

a levantars

l vez fue solo un poco

uperándose del doloroso

OM NA

IGR

l

Natasha en la boca del estóm

la muñeca, colocando su bra

o en el aire, golpeándola

eándose y escupió parte de la

anos por los labios, elim

sea, Dante,

s, no f

orrió hacia él. Da

ba esforzando mucho y tal v

estaba cerca del punto

se burló de ella.

ás para esquivar un gol

lanzó un gancho de izqu

o tan difícil t

a defender de un ángel s

o to

lina torpe

a patada en el pecho, per

eguro que Lilith pega

os dedos y

ijo Natasha con lo

otras veces, pero además

ndose hacia atrás, gritó innumer

ca del estómago, donde un dolo

ir no va a hacer la

poco el maldito enoj

contra una pared, mientras

que voy a matar de nuevo,

el punto de just

ecuerdas? La voz de Dan

s. "Además, eres un súcubo

a

el culo tantas como quiera

es emocionan

re su rostro y sacudió

rdonó

OM NA

IGR

o de baja guardia, Nata

con una patada en la pie

, bloqueándola con los brazo

pec

biera estado asfxiando, a Nata

lor de su cuerpo. le d

monio se vio obl

, Natasha lo arrastró.

del príncipe de los infernos y

inutos ninguno de los

dejó paralizados.

s corazones laten tan ráp

nt

orrió hizo que Dante mald

a

lo en el piso y desnuda

bía detenido horas antes

ión ardiente y utilizó el m

iba a besar, recibió un p

c

eaba el área ad

¡Bi

bio pero no dijo nada.

enemigo era algo bueno. Desa

lo que deber

rar ahora, podemos co

lev

respiró hondo y tomó l

arla a le

lorida, se sentía com

a y aplastó to

sito un

por lo sudorosa y sucia q

cara ma

e la miró de arriba

s? - El rostro de Natasha

iba de ore

OM NA

IGR

s de este entrenam

etrás de él, más allá

del baño. La habitación

casa que Aron había constru

nunciaría a todo para l

que él tenía sus razones

iz, cuanto más pequeño era

oder t

isa blanca y colocarla so

o un niño. Recorrió con

iel dorada bajo la tenue

uso el príncipe del infern

tomó la libertad de agacharse

vió a latir dentro de e

ó sus pantalones cortos de

e se ajustaban perfectamente

de debajo de la tela y dej

n la q

susurró Dante en medio d

de Natasha presiona

za y no me alimenté

recup

rabillo del ojo y most

omo la excusa

s y me voy. - Cuando

s pechos, ella

n dijo que

sha lo vio sujetar sus mus

levantándola en el aire

ía pared de azulejos. De

io en esos sutiles ca

eseo que compartían. D

su cuello y tiró d

ue sujetaba su cabello y

gemido fue acompañado por

ubo que estaban clavada

importaba, la fuerza que N

OM NA

IGR

ampoco necesitaba conte

e cris

o el sabor salado del sudor y

oda lujuria encarnada e

s en su cuello mientras é

staban juntos, que tenían

el acto carnal, cuanto más

ligado a recorrer. Yo

un santo. Estaba can

r tratado como un mal

iera el mismo destino que

istada que pude haber en

que odiara admitirlo,

olu

antara el camino del

asha tiró de su cabello

es de besarlo en la boca.

nía hambre de él y esa

. En medio del hambre,

labios, y con cada gem

frutó de la de

grande que pudo haber a

e me he comprometido a ser

rompieron el beso

nto. - Natasha lo pr

la base de su cuell

on el escalofrío, ma

impidieron maldecir. Ella

osa con la que no

entemente excitado, Natash

nuta, el aura azul que

todos los dolores persist

n. Oh, qué

saboreó la sensación

quiera jadeó. Cuando la si

y se puso

ras se iba con la ca

OM NA

IGR

estás

tu trasero todo lo que

aba los pantalones de ch

, Natasha apoyó ambas man

ado mientras empuj

dedor de la cintura de la súc

ene se movía dentro de sus calz

s dedos arriba y aba

o resonó en todo el peq

ella le hizo perder el

no como torturador cuan

atormentadas no

tra su pelvis, pertur

pa interior al

abio y se deshizo de

el trasero de nuevo, es

haba la cabeza hacia atrás

apretando su trasero que

bre. Sí, Dante... has estad

pero ninguno con la fuerz

ijo del diablo. Ningún

gual. Ante él, por p

frágil. Y la huella...

liente como para dec

har? Dante le mordisqu

apretand

lusa que aún estaba sobre su cu

hermosa alfombr

rs y abrió la cabina de la du

nt

ato mirando su polla. S

de tirarlo co

abría el grifo de la d

y miró hacia abajo par

ostenía la base de s

adeó cuando sintió que sus p

labios carnosos y su bo

OM NA

IGR

amió, lo sostuvo y pasó

ada vez que lo probaba, m

entre sus piernas ardier

jor que había probado.

en no tenerlo,

por su cabello oscuro, q

ia que salía de la duc

ral aún más placente

cerca de la perdición. El

sinhibido lo hiz

trás, lo miró y lo vio hip

aliente y húmeda. Lo vi

sea más fuerte. Vib

asi una orden, llegó en m

o y

ha lo

¡Pa

duro. La tiró del pelo

te, traicionó el gra

a pasó los dedos por s

una respiración acelerada

u

venir ahora,

o lo besó. Estaba en l

paz de extinguirlo. Mord

la boca co

cintura y la sintió t

ada vez más urgente,

de las sunt

a ya hablaba más fuerte

voluntad de hacer el

ó a Natasha debajo de

etr

ante la deliciosa sensaci

y en el cristal de la duc

n la estaba alucinando, no n

con una intensa ola de pl

OM NA

IGR

qué trabajaban tan bien

s, a horcajadas sobre él, Na

por el valle entre sus

etó con fuerza los mu

n alucinada de Natasha, qu

negro, dejándolo

se apeó de él. Dant

e a qued

y colocó las manos en la p

ra sexy, sa

s de Natasha, abriéndol

n la vagina húmeda. S

ritmo amortiguando de ida y vuelta un poco dentro

s. Se clavó las uñas en el

de los

aba contra la pared cuando

hondo para que el aire no se

n casi divina de tenerlo

se movían a su propio r

n por su espalda dejan

ulo y continúa con los m

pudo conseguir. No pens

n eso sin s

tamente y le sopló en

ared. Luego se sumergi

la estimulaba, más la se

e nuevo y se excitó aún má

gua caliente corriendo

do como si estuviera en el i

s como ese, sin duda ser

e se tensaban cada ve

estaba mostrando signos de qu

smo se apoderó de él, dejó

s de la súcubo con su semi

er su intensidad y fnalm

Dante apoy una mano e

OM NA

IGR

exhaló e inhaló, exha

que recupe

ndos, le dio la vuelt

inmensidad azul de esos o

estaba justo ahí. Con la mano

iciar la cara de la s

s que ya estaban fruncidos

a lengua dentro de el

o con el mismo ardor, abs

aba. Ella sintió que su man

ntre, hasta la región de sus

ente el clítoris que

circulares

us labios, sin dejar de

a la pared detrás de él. Gri

or de su garganta. Pocos e

una mujer así, o in

uera justo. Sin embargo, D

cu

adió, Natasha se sinti

midos audibles por los

mitió que el pl

n bien como tú. - s

Su voz temblorosa t

onvenceré.

tienes tod

un rápido beso antes d

a pared y empezar a lavar

ernas regordetas y también

ez que terminó

la tomó en sus brazos, la sec

el dor

OM NA

IGR

OM NA

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