y... Y nun
boca antes de que me acomodara la húmeda ropa y le
or eso le decía que ya era suya, porque lo era, pero en realidad al suya que él se refería era al de ser suya com
ne muy claro lo que quiere y como con
o soy la mujer idónea para ser suya de la forma en que acostumbra a tener a
la perfección porque lo combinabamos con lo qu
preguntó el guarro de mi primo cuando salí de la ducha y me lo encontré
e me acostaba, pero es que eso Darius no lo sabía y yo no sé lo decía ta
de la mano, lo dejé sobre mi cómoda y me saq
a pasearme desnuda frente a él, cosa que si Darius descubría tendría más q
algodón suelto sin sostén, color azul y con lazos en los hombros - estoy por hac
cerrando detrás de ella para caminar hacia la cama y sentarse to
rado puta? - in
ín ella - es mi amigo pero tengo otras a
ego peculiar de palabr
rlo. Perfumé mi piel con el aroma favorito de Darius y
no oír como todo el jodido pl
voz de mi hermana n
en mi habitación esperando egoístamente que yo lidiara sola con aquella complicada pr
s tirando
éramos, apareció por detrás de ella y me ví
hacia adentro de mi habitación, y el otro idiota permanecía en el
distintos - mentí y miré a Darius que se enderezó, cuadró los hombros y apretó los puños a los lados de su cuerpo - yo soy soltera, libre y dueña de mi cuerpo, me acuesto con cuántos hombres quiera y no tengo qu
estado un poco
as estadísticas de Darius. Tal vez había sido mi primo y su inmadura y común habilidad de querer provocar siempre que la situación mía con Darius se fuera de control lo suficiente como para que definieramos de una vez por todas. O tal vez y lo más probable, es que hubiese sido él poder agota
ara meterme en mi cama, completamente
umirlo, estaba demasiado entregada a él, tanto, que cada ma
o y ya incluso, cuando él no estaba y no iba a pasar la noche a mi lado yo me quitaba la
ajo mis sábanas frías que
la otra no le pasa el oxígeno,
da misma me empujaría de su lado en algún momento así que lo mejor es que e
mis piernas lentamente, sonriendo desde su boca que besaba cada tobillo yrraba a cada poste de mi cama, haciendo lo mismo co
o su lengua sin desprenderse de mi piel haci
ia su boca, deseando que bebiera entre mis piernas sin d
el, abrí mis ojos y me desperté de aquel sueño tan húmedo qu
yo me negara a verlo, que hasta me hacía sentir que soñaba con
irías conmigo - se metió mi pezón en la boca y cuando sol
bía sido él, que me tomaba de una manera tan vi
tro de mí y sacó su mano de mi boca y metió la lengua e
marres que no había soñado, me tiraban de la piel y me mantenían en el sitio, aguantando con mayor
so era posible, contra mí, haciendome sentir en duda, por si aquello er
uélve
n tan suya m
maniática manera de ser, pero en el
el beso dónde quería cuando me llenó por
ndo como me tomaba el rostro entre sus manos, para
e bien y no te permitas que otro te toque o me volveré loco y sabrás de lo que soy capaz bajo traición Rebeca - amenazó saliendo de mi interior y be
nunca en mi vida lo había hecho, aferrada a mi cama para no salir corriendo detrás de él y permit
para hacerme sufrir, fue simplemente porque no había probado aún la sensación desgarradora de ver