alas, así de injusta es la vida, ya todos sabemos que es la cruda realidad a la cual todas las personas nos enfrentamos. Los políticos son una farsa, hacen promes
orfanato unas horas nacer, quien a los once años tuvo que escaparse con otra niña de
de respirar, la única persona a la que había amado, había sido apuñalada y se estaba desangrando en su regazo y las últimas palabras que le dijo antes de cerrar los ojos fueron. "Sobrevive y se feliz,
sesinar a el dueño de un burdel que trataba con tráfico de menores. Ymir al tener una belleza exótica llamo rápidamente
as, una mujer despechada por la infidelidad de su marido, un hombre que quería cobrar el seguro de la muerte de su padre, y de todos tipos, ella cum
orque era como el ángel de la muerte. Su nombre rápidamente se propago por
oloco su mano en la pistola semiautomática que se encontraba en el arnés que tenía en la pierna. Una de las puerta
Ángel." Ymir haciendo caso, se sub
sientos. El hombre sonrió mientras le extendió un papel a Ymir con una cifra, Y
bre de un poco más de cincuenta años, antiguo mercenario, al tene
voz sonaba sería, se estaba tom
mucho, supongo que tiene sentido sabiendo quien es el sujeto que tienes que matar." La voz de As también sonaba bastante seria, sabía que este era un en
su lengua por sus labios lentamente. 'No te qued
ante grande. No fal
guntó Ymir con una s
l encargo, Ymir nunca fallaba, nunca dejaba un encargo sin terminar. "Bien, ya bájate. Y llámame cuando termines de leer lo
ir hasta su casa para leer la información sobre Ka
el sobre dejando todos los papeles sobre la cama. En
ñado por varios guardaespaldas profesionales, es una persona realmente importante en la alta sociedad. 'Creo que este es el encargo más grande que he
a Kaiden, como información sobre alguna de las celebridades que sa
ima de su cama de un lado a otro mientras en su mente
"Me doy miedo yo misma." Río mientras sacaba móvil y llamaba a As. El cuá
le dio una calada. Eran las diez de la mañana, por lo que en el bar no había nadie más que ella, As y uno de sus hombr
cierta quien es Kaiden y lo gran protegido que está, después de todo es un hombre exitoso y
oder, le puedo dar el tr
ico mercenario a la altura de Ymir, ambos, eran enemigos declarados en su
ra, ¿no?" Aclaró As, Ymir asintió con fastidio, mientra
mientras bebía de la botella de cerveza que se
s, Ymir la miro con una sonrisa juguetona esperando que esta comenzará a hablar, Petra una
s a la cuidad X por trabajo... ¿Si te ir
ir mirando el rostro de Pe
r favor, Ángel." Murmuro con la cabeza baja avergonzada
do los labios de la morena, quien se sonrojo. "Creo que merezco un regalo de despedida." Ymir con su mano sujet
ozó sus labios con los de Petra haciéndola inclinarse hacia delante buscando
cepcionada por no recibir ni siquiera un beso de la sexi mujer se maldigo por decir que ahí no podían. "Como sea, supongo que
de ella. Petra gimió de sorpresa, entreabriendo sus labios. Ymir río mientras que mordía el labio inferior de la morena. Petra deseando más entreabrió sus labios dejando
lo di yo." Hablo Ymir mientras se separaba comp
y la respiración agitada después del beso. Ambas eran compañeras sexuales desde que Petra empezó a trabajar en el bar, hacía tres meses. Aunque
as más por mujeres. Aun así, desde la muerte de Trixy cuando tenía once años, no había podi
de equipaje, este la miro perplejo, ya que dentro de su maleta había esposas, látigos, pinzas de pezones, dildos y otras clases de juguetes sexuales. "Amm
negro, bajito, delgado, una tez blanca y unos ojos café. Ymir le sonrió tímidamente al chico mientras este le entregaba la maleta. Ya había b