udson, abriendo los ojos, solo para
gresado; en ese momento, despe
so dominante, que su esposa se vi
que la inquietud la inva
uctora voz del hombre, teñida de un encanto
, mientras en su interior se d
la decidió no arruinarle el ánimo. Por eso susp
lor a alcohol y la chica se sintió envuelta por esa fraga
s vio que su cónyuge cedía; de hecho, sus ac
jadeo salió de los labios de la chica; luego, suplicó con f
e momento sonó el celular del hombre, rompiendo la densa
de su celular. Acto seguido, se levantó y comenzó a vestirse, sin que sus
cla de confusión y preocupación, mientr
asual y distante, que insinuaba q
ro.
pués, se inclinó hacia delante y le plantó un beso en la fr
ar atrás, sali
, con el corazón apesadumbrado. Se convenció de que s
nsiva, pues si mostraba la mínima seña
da y el convertirse en su esposa era un sueño hecho r
no sobre su vientre. Con una sonrisa esperanzadora en el rostro, dijo: "Cariño, pa
ndo su celular vibró, por culpa de una ale
aeropuerto a altas horas de la noche, supuestamente p
to, vestido con un traje negro. Su postura era impecable e irradiaba una innegable autorida
a dura sensación estuvo a punto de robarle el aliento. Le costó un esfuerzo considerable recupe
a pantalla: Kyla Wade. La mujer a la que aparentem
a tristeza se instalaba en lo más profundo de su corazón. De hecho,
enzado su matrimonio era dema
ah planeaban su futuro juntos, ella de
ocida por su inquebrantable devoción hacia él y proveniente de una familia en decadencia, era la candidata ideal. De hecho, durante los últimos dos años, ella hab
cho añicos el día anterior, cuando
l mes pasado. Noah había llegado tambaleándose hasta su casa, apestando a alcohol
ía atormentada con la incertidumbre de cómo darle la notici
que ella no era la
pero la voz de Noah, proveniente del estudio, la sa
uso un abrigo sobre los homb
z de Alex Howe, un amigo de su esposo, llegó hasta su
la noche con ella', pensó la chic
n una voz vacía de cualqu
a para ti, ¿verdad?", preguntó Alex, suavizando su tono por la preocupación. "¿Si te das cuenta de que ella es rea
utiendo algo trivial. "Si estás enamorado de ella, tal vez debería ser yo quien intente emparej
a ella era culpa, las lágrimas brotaron de sus ojos. Acto seg
o, parecía que en lo más profundo de su corazón ella era solo una n
elación le provocó un es
irigió sin dudarlo al santuario del jardí
tro en sus rodillas, mientras sus lágrima
día que conoció a Noah, diez
egio; por supuesto, se había robado el corazón de todas las chicas en la escuela. En contraste, la fam
s palabras eran como escudos que o
entos, él había sido