narr
erta, pensan
s a mi alrededor me recordaban que aún estaba en un hospital. P
ba aprensiva, no solo por el desafío físico que tendría que enfrentar, sino también por la idea de interactuar con otra p
anera despreocupada sobre su frente. Su sonrisa era cálida, y sus ojos, de un tono profundo que parecía entender más de lo que estaba dispuesta a revelar. Había algo extraña
tendiendo la mano. Su voz era suave y alentadora, pero al mismo tiem
Agarré su mano, y la conexión fue instantánea, como si un hilo invisible nos uniera. Pero no
stás lista para comenzar? - Sonrió, y por un momento, vi un destello de esperanza. Pero
vía cada vez más evidente. La debilidad era abrumadora, y la frustración se acum
Asa. Un paso a la vez. - decía
miraba, como si viera no solo mi cuerpo, sino también mi alma, me dejaba confusa. No quería abrirme a él, no que
s yo intentaba mover la pierna. El sudor corría por
ras cerraba los ojos. Y, a pesar del miedo, sabía
e mi corazón. Un día a la vez, me decía a mí misma. Pero, mientras la sesión terminaba y Luke me ayudaba a levanta
.
y lucha. Despertar del coma fue como abrir los ojos a un mundo al que ya no pertenecía. Todo era diferente: las pared
ecuerdo destellos de luz, voces distantes y la
ncla en medio de la tormenta. En cada sesión de fisioterapia, me guiaba con paciencia y fir
un peso inimaginable. Pero Luke siempre estaba allí, animándome a no rendirme. "Un paso a la vez, Asa. Lo lograr
ismo tiempo, y Luke me sonrió con orgullo. En ese momento, me di cuenta de que empezaba a recuperar no solo la fuerza de mi cuer
las sesiones de fisioterapia en casa era al mismo tiempo reconfortante y aterradora. El hospital se había convertido en una especie de refugio, una burbuja se
i habitación, interrump
Estás feliz? - dijo ella, y mi
segura. Había tantas duda
. ¿Qué pasaría cuando dejara el hospital? ¿Y qué había de las sesiones de fisioterapia en
blemente, a Max. Desafortunadam
oma, la dificultad de reconocer mi propio cuerpo, la lucha para levantarme. Pero también pensé en Luke y en cómo había sido una
lizara. Enfrentaría cada desafío de frente, un día a la vez. Mañana sería un nuevo comienzo, y
a punto de salir del hospital, pero eso no significaba que estuviera sola. Hab
.
bertad. La luz del sol brillaba intensamente, y sentí cada rayo como una promesa de nuevos comienzos. Pero, a
nostalgia y miedo. Cuando pisé la puerta de casa con una muleta en una de las manos ayudándome a mantener el equilibrio, sentí a mi madre sostener mi mano
o entré, mi he
lamó, pero no pude responder. En lugar de eso, mi mirada s
i alrededor
a, allí estaba él, al lado de mi hermana, y un hijo de ellos estaba a punto de entrar en nuest
latía descontrolado. Llegué a mi habitación y cerré la puerta detrás de mí. El olor familiar trajo una oleada de nostalgia, pero
lma y Max, que estaban sentados en el sofá,
quí. - dije, mi voz temblan
sa! Estamos tan felices de tenerte de vuelta. - r
mí. - La frustración se acumulaba, y podía sentir las lágrimas formándose. - Me mudaré
olo ocho años. Dejó varias propiedades y dinero para mí y Alma. Yo heredé su ap
mirada pasando de so
ecesitas ahora? ¿No sería mejor que estuviér
. - La última frase salió como un susurro, pero tenía un peso colosal. Necesitaba un lu
teza en sus ojos. Pero no
o impedirlo. Pero Asa, aún eres parte de nues
o espacio. - Con eso, me di la vuelta y fui
te de mí deseaba que todo fuera diferente. Pero, por otro lado, sabía que necesitaba enfrenta
.
caminar hacia la ventana. El reflejo en el cristal mostraba una versión de mí que parecía extraña: un cuerpo que conocía, pero que no respondía como esperab
ía estar en sintonía con el cuerpo. Nunca pensé que rehabilitarme sería tan difícil, y lo que a
sta la puerta. Al abrirla, allí estaba Luke, con su habitual expresión animada y una bols
esafíos? - bromeó, entrando y
una sonrisa, pero había un peso
ento, tratando de alejar los pensamientos que me atormentaban. Pero Lu
ué está pasando? - preguntó, mi
ue amaba ahora estaba esperando un hijo con mi hermana? La idea de abrir mi corazón
tragando en seco. - No sabí
miró con
e importa. Pero sé que, además del cuerpo, la
erabilidad. Decidí que t
a tener un hijo. - La última palabra salió como un susurr
ento, y la expresión en s
ejar. ¿Cómo te sientes
nte, sintiendo que las lágr
confundida... con miedo
ió, comp
iencia traumática, y ahora, al intentar recuperart
o. Pero, al mismo tiempo, había cierto alivio en compartir mi dolo
seguir adelan
hombro. - Y recuerda: no necesitas pasar por esto s
la recuperación no era solo física.