ll
ndose el sudor de su frente con
tal t
uné huevos
oírlo, ¿Quié
stra, los colombiano
d? Es la tercera
aúl a pesar de la ropa usada que le da la comu
nobles, ellos no te juzgarán Saúl,
, ella está ayudándom
iera como uno más, aunque a veces me
legra
la señora Estela, me abrió una cuenta de banco a su nom
o que era inevitable co
o hice
cambió mi vida... uste
no porque las escuchará a menudo, era por el ton
oy un
de los Anderson, última
anci
hacerles la limpieza, ar
la c
nto te
00
e la im
y para no ofenderlos, empecé a pagar cursos de electricid
llevaba un overol azul oscuro, botas de tr
oportables hermanos no tarda
más tarde
su lado con una in
mae
ué me ll
gunta" me felic
la conocí, me dio
si no h
z de perdonar, curar y
ante el
ángel, dej
e saludó mientras me ale
.....
mandil y salí al encuentro de Tamara, mi h
ñándome su boleta, entró m
stó su barbilla en sus manos entrela
rmano, no hago un escándalo por mi
papá? – acaricio su cabeza
paban de su control, Tamara se lo toma con calma porque van y vienen, pero Thom se frustraba, sobre todo cuando su habilidad para
son hipócritas, ment
te y sentarse con enojo
humanos inmaduros,
puedo controlarlo y me gana la curiosidad, es como esta
Intervine y me lanzó
tes, a veces me cuesta mucho ignorar la
puestas – dice mamá entrando al
ó Tamara – De hecho sería div
omo una manzana del frutero y se
eguido
tarlo – mamá re
Por decir que es más inteligente que el prof
os X- men
do molestando
a? – mamá se cruza de brazos, papá s
ne que sacarles sus trapos sucios y eso los
so siga f
le gusta el apodo – Tomé una m
¿H
ué la mochila al ho
rampa en l
sentirme ofendi
ceja de "
uiero confirmar una respues
studiar está bien, pero no
zga por lo que soy, tiene la mente más pura de
Toc, ¿Hay al
la – Dijo m
soltó su mochila en el s
la B
la a
Ángela! – grito mamá ace
e las suyas – el padre de Ángela entro
y pataleando en su portabebé
s – señale y me pon
eviva esta noche, por lo cual tengo planeado una
? – le pregu
iremos a Rumb
uedo –
a, que se quedará con los niños, mien
ero
te la pasas encerrada aquí desde que
gela
na hora antes de irnos, a demás tenemos a nuestro soldado elite rondando por aq
la – i
e interr
de ba
ta y se colgó de mi cuello con ambas mano
iré solo porque me has a
cajea y se
sbiana serías m
onviene tonta – sonrió org
ternidad y clubes, no éramos un pueblo grande, pero si lo suficiente para albergar, escuelas, clubes, bares, un extenso bosque, tener turistas que les encante el senderis
ue nos tomáramos unas copas de vino, incluso nos rega
yendo! – grit
es me
e talló su rostro, señal
.....
altavoces, Angela, Carolina, Soledad y sus sectas de amigas ya estaban algo ac
grito Sol por encima d
algo ac
o veni
no han regres
ndo sorbitos así martini seco, quién era
sonrisita, hechand
acabo de ver – dijo si
s contarn
está con uno de ellos, los t
ofrío, pero son
liente – esa
naturaleza – revati y fui ignorada. – A de más a los
ice Angela – Nosotras a diferencia de
su bebida intentand
amos nuestra sexualidad,
ente interrupirla
iles por su inexperiencia, sin embargo nosotras lo tenemos todo, eso nos convierte en las candida
dando saltitos de alegría y
ra divertido ver flirtear a Ángela, era de es
s acercando, dejándonos guiar por el ritmo de la música, rosa se unió a nosotras con su vestido
do, aleje mis ojos de la pareja y comencé a bailar junto a Sol, yo casi nunca las frecuentaba, era Angela que in
quier ritmo, sin recordar cómo lo había aprendido
ose a cada movimiento, mis manos recorriendo mi cuerpo sin ser vul
mis manos, piernas y cada paso, tocando mi cuerpo sin señalar ninguno de mis atributos, acarici
grita Angela –
ué c
e acabas
pero no sé que
esta – aplaud
ás, curvas tu cuerpo a la izquierda y derecha haciend
ngo, lo
hacerl
hora creamos una core
tinguir a nadie. Mire a Carol que se cubría el rostro con un gesto de sorpresa, mire hacia donde ella observaba y
uestrado. –
mo un picor en la nuca, como si me tocaran con la mirada, algo revoloteo en mi vientre y choqué contra la espald
ecía escandalizada y
os oscuros, mis ojos recorrieron su rostro, su boca, su garganta, todo en descenso, el subir y bajar de su pecho, sus hombros fuertes, las venas de sus brazos, alto, torzo musculoso y bi
omo si algo
multitud y se paró u
y dio un paso adelante casi invadiendo mi espacio persona
ural del mundo, una de sus piernas se instaló
o tal osadía, al menos que yo recuerde,
voz era suave y olía rico. Mi corazón latía suavemente, casi tenía miedo
hipnotizada, tiro de mi mano pegándome así cuerpo, instintivamente rodee su cuello con mis manos, el al contrario, no se contuvo y acaricio mi rostro, mi cuello, mis hombros desnudos y
efrescarme –
da, pidió una botella de agua y abriéndo
firme, asintió y pidió su bebida al barman, me
mi, oli mi muñeca, y si, ahí estaba. Seque mi rostro, derrepente su cuerpo me acorraló contra el la
endo? – dije dete
n un baño de una discoteca, algo en mi lo rechazaba, no sabía porque, si, lo d
licción – Es solo que cre
o te l
ore
no voy a costarme cont
n un futuro – sonrió pícaro ante mi
e puse roja. Se apartó de mi y
re bien, l
a de varias mujeres, el muy ma