/0/12913/coverbig.jpg?v=2ff7fcbafdcdd25bfbbbbf5ca8393f6d)
Blanca Soto es una chica joven que vive en un pueblo muy desactualizado en cuanto a lujos se trata; así que, ella está adaptada a hacer todo tipo de actividades campesinas, entre ellas siembra, ordeño, etc. Ella nunca había pisado un centro comercial, hasta que un día una familia adinerada llegó a su pueblo y le ofreció trabajo en su mansión, como ayudante de cocina; y por supuesto, ella no se negó, a semejante propuesta pues había quedado fascinada con el hijo de su futuro Jefe, pero no todo será color de Rosa, pues sufrirá acoso por por parte de muchas chicas que también tienen sus ojos puestos en Andrés Monterreal.
Desde muy temprano Blanca se despierta con el sonido de los gallos de su padre, pues es inevitable quedarse con las sábanas pegadas con semejante alboroto ¿no?; así que, no tarda en ponerse de pié, lavar su rostro y vestirse, pues la vaca la espera, si no la ordeña pronto los ladrones de leche la dejarán sin una gota.
Al salir de casa, Blanca nota algo extraño y es que sus vecinas están reunidas murmurando entre sí; así que, la curiosa Blanca no tarda en acercarse para ver de que trata la conversación, pero al acercarse todos hicieron silencio.
-¿Qué les sucede chicas? ¿a qué se debe esta reunión?- Preguntó Blanca con mucha curiosidad.
-Es que al parecer pronto vendrá la familia Monterreal para el pueblo.- dijo una de las chicas llamada Paty.
-¿Ah sí? ¿y quienes son esos?- Dijo Blanca mientras sacudía su vestido.
-Pues quienes más van a hacer, los familiares lejanos de Don Cheto (el quesero). Tú, por andar todo el día pendiente de tus vacas no conoces a medio pueblo Blanca, ni siquiera novio tienes.- Dijo otra de las chicas llamada Josefa en tono de burla y todas las demás chicas rieron.
Blanca un poco molesta la miró sonriendo para ocultar su desagrado.
-Pues sí, tienes razón, como yo me la paso trabajando no tengo tiempo de andar metida en el chisme al 100% como otras, con permiso.- Les dió la espalda y continuó su camino hacia la vaca de su padre.
-Yo no sé que se cree la tonta de Josefa, no todas somos como ella, chismosa y sin oficio, debería ponerse a trabajar.- murmuraba Blanca mientras ordeñaba la vaca.
Y de repente, sonó un extraño ruido entre los matorrales que estaban cerca del lugar.
-¿Y ahora qué sucede?- Dijo Blanca, mientras se ponía de pié para averiguar.
Apenas abrió el monte, salió un cerdo pequeño a toda velocidad y se avalanzó sobre ella llenándola de lodo por todas partes y no solo eso, sino que derramó toda la leche que había ordeñado.
-¿Qué? Esto no me puede estar pasando a mí. ¿Ahora que desayunaremos hoy? Debería hacer picadillo a ese cerdo de una vez, pues ya dejé la vaca seca - Dijo Blanca muy molesta agitando su mano con el puño cerrado.
No tardó en regresar a casa con las manos vacías y su padre por supuesto le preguntó por la leche para el desayuno y contándole todo lo ocurrido, le dijo a Blanca que no se preocupara, y metiendo su mano en el bolsillo sacó unas monedas y le pidió a su hija que fuera a comprar un poco de queso a que Don Cheto.
-Anda mija y no tardes, porque mis tripas ya no aguantan el hambre.- Dijo su padre Don Juan.
-Sí padre, no se preocupe, vuelvo pronto, mis tripas también están igual, no paran de sonar. - Decía Blanca en tanto caminaba a la quesera.
Cuando ella llegó a la quesera de Don Cheto, se llevó una sorpresa enorme pues no era él quien estaba atendiendo, sino una chica muy pretenciosa que la miraba de arriba hacia abajo burlándoase de su atuendo lleno de lodo, pero blanca solo ignoró su reacción e hizo su pedido.
-Por favor señorita, despácheme medio kilo de queso blanco.
La chica, al escuchar esto empezó a reir de forma muy grosera y tan escandalosa que Don Cheto pronto salió.
-¿Por qué te ríes así Paola?- Preguntó Don Cheto a la chica.
-Por nada Don cheto, es que las personas de este pueblo son tan divertidas, nada más mire la ropa de esta chica, parece que se divirtió mucho jugando con los cerdos.- Decía a carcajadas, mientras se retiraba.
Blanca la miraba conteniéndose de la rabia y Don cheto por supuesto no tardó en disculpar.
-Lo siento Blanca, ella es una chica de ciudad que está de visita y no está acostumbrada a ver este tipo de cosas.
-No se preocupe Don Cheto, yo solo vine por un pedazo de queso, y la verdad estoy un poco apurada.
Tomándo el trozo de queso, Blanca nota que la risa de la chica se aproxima nuevamente, pero esta vez, no viene sola, sino que trae de la mano a un chico muy guapo llamado Andrés Monterreal, cabello rubio y piel blanca, lucía tan radiante que se notaba que no trabajaba largas horas bajo el sol y él a diferencia de su hermana, no se burló ni se fijó en su ropa sino que se quedó mirándola fijamente a los ojos, y con una sonrisa que lentamente se dibujaba en su rostro.
Blanca al verlo, sintió verguenza de su apariencia, así que agachó su mirada y dió la vuelta para marcharse a casa, pero en el camino, no paraba de pensar en él.
-¡Que chico tan guapo! Seguro esa es la familia lejana de Don Cheto de la que tanto hablaban mis vecinas temprano. Tengo que verlo otra vez- Susurró y soltó un suspiro suave.
La felicidad era como un espejismo para Rocío Ouyang, cuando más se acercaba a la felicidad, más se alejaba. Ella acababa de casarse con Edward Mu, pero en su noche de boda todo se derrumbó. Dejando a Rocío embarazada, Edward la abandonó en su noche de boda. Pasados unos años, Rocío renació por completo, cambiando totalmente su personalidad, convertiéndose en la única coronel del ejército. En este momento Rocío comenzó a reflexionar varias preguntas que eran misterios para ella: ¿Por qué los padres de Edward estaban actuando de manera tan extraña? ¿Por qué su padre la odiaba? ¿Y quién estaba tratando de dañar su reputación en el ejército que ella había trabajado tan duro para construir? ¿Y por qué sigues leyendo la sinopsis? ¿Por qué no abres el libro y descúbrelo tú mismo?
"Estaremos casados por sólo un mes. Después de eso, nos divorciaremos de inmediato". A pesar de que su bisabuelo había arreglado su matrimonio antes de nacimiento, él no creía que una mujer tan informal y movida como ella merecía ser su esposa. Poco sabían en aquel entonces que estaban destinados a estar juntos. Hiram, el CEO joven y apuesto que nunca sintió atracción por ninguna mujer, y Rachel, la belleza que de alguna manera traía mala suerte a todos los hombres con los que salía, se casaron, contra todo pronóstico. ¿Qué será de su vida de matrinomio?
Clarissa Chapman, un día, al entregar preservativos a una habitación de hotel, descubrió que su cliente era su... ¿prometido? ¡Atrapó a su prometido y media hermana en la cama! ¡Solo entonces Clarissa se dio cuenta de que su novio de seis años la había engañado! ¿Qué es más ridículo? Su padre dijo que era porque ella no era atractiva y su hermana lo merecía más. Dejó a su prometido idiota, ¡se encontró con su Sr. Correcto en una aventura de una noche! Espera... ¿por qué este hombre se veía exactamente parecido al CEO multimillonario - Anderson Jordan en la televisión? Anderson era de muchas cosas, guapo, considerado y leal. Nunca imaginó que un apuesto como Anderson se enamoraría de ella, hasta ese día... Su familia de pesadilla la encontró, tratando de arrastrarla al pasado miserable... otra vez...
Melissa podía tolerar ser engañada y humillada; pero si la acusaban de algo injustamente, sería una historia diferente. A los ojos de su esposo, tres años de matrimonio eran menos importantes que una simple lágrima de su amante Arielle. Y finalmente, él la abandonó sin piedad en un día lluvioso. Cinco años después, Melissa reapareció con sus adorables gemelos; esta vez, se convertió en una médica de fama mundial. Fue entonces cuando su exmarido, Everett, le pidió que ayudara a Arielle... "Abuelo, si quieres hablar con mamá, primero tienes que pasar una prueba". El hijo pequeño de Melissa, Merrick, levantó con orgullo la barbilla. "¿Abuelo?". Everett se preguntó si parecía tan viejo. "Papá, sí eres muy viejo... ", dijo Lindsey, la hermana gemela de Merrick con un puchero.
Mateo Lester, un magnate de 47 años, es un hombre implacable en los negocios y exigente en su entorno. Durante un viaje a Brasil, vive un efímero romance con una mujer. Josabet, una joven aeromoza de 30 años. se traslada a Nueva York al ser contratada por una empresa para un puesto en las aerolíneas de la empresa Lester. Cuando Josabet es presentada ante Mateo como la nueva aeromoza de su jet privado. Ambos se reconocen de inmediato, pero Josabet fingir no hacerlo y todo por un secreto que oculta. Todo cambia en la celebración del aniversario de la empresa, donde Josabet decide llevar a su hijo, dispuesta a enfrentar las consecuencias. La abuela de Mateo, al verlo, queda impactada por su increíble parecido con los difuntos padres de Mateo. La duda queda sembrada y, a partir de ese momento, Mateo comienza a investigar el pasado de Josabet, descubriendo secretos que podrían cambiar su vida para siempre. Sin embargo, una amenaza inesperada surge cuando Natalie, la exnovia de Mateo, una mujer manipuladora y obsesionada con él, descubre la existencia de josabet y su hijo. Consumida por los celos, decide hacerles la vida imposible, dispuesta a cualquier cosa para sacarlos de su camino.
Durante siete años, Jillian estaba enamorada de Bryan con pasión inquebrantable, pero él permaneció distante, con sus emociones herméticamente selladas. Descorazonada, ella se marchó al extranjero tras graduarse de la universidad. Tres años después, Jillian, ahora una abogada de éxito, se sentó provocativamente en el regazo del hombre. Con una sonrisa juguetona, le espetó: "¿Qué te pasa, Bryan? ¿Eres impotente?". Bryan ya no podía contenerse. Con un rápido movimiento, la tomó en brazos y la arrojó sobre la cama. A la mañana siguiente, cuando él se despertó, Jillian esbozó una sonrisa traviesa. "Solo es una aventura, ¿de acuerdo?".