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Aria, una mujer cuya vida perfecta como madre, esposa y exitosa doctora que construyó junto a su esposo Edric, cambia de repente cuando comienza a sospechar que él vive una relación extramatrimonial.
Esa noche estaba decidida a enfrentar a Edric, vería cara a cara a Derin. El martirio que la atormentaba estaba por terminar. Los señores Gonul no tenían idea de que la invitación a cenar que le habían propuesto a Edric y a su esposa Asya seria solo el comienzo de verdades frías para su familia.
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- Nos alegra que estén aquí - habla el señor Serkan , mientras estamos sentados en el gran comedor de su magnifica casa, disfrutando de la invitación que nos hizo su esposa.
- Si, es verdad - responde haciéndole compañía la señora Lydia. - son la familia ideal. Al terminar la frase, Derin, la hija de los señores Gonul suelta una pequeña risa.
- ¿Te parece gracioso, Derin? - le pregunto ganándome las miradas de todos en la mesa. - Asya - me reprende Edric con un tono de advertencia.
- Perdón, estoy de los nervios, últimamente no los controlo mucho- digo irónicamente mientras bebo un poco de vino.
- ¿Qué le pasa, problemas en el trabajo? - me pregunta la señora Lydia, queriendo profundizar en la actitud que acaba de ocurrir contra su única hija.
- No, mi marido me engaña, es por eso - apenas las palabras salen de mi boca, Edric voltea a verme y los señores Gonul toman una postura incómoda sin saber que decir. Sigo comiendo despreocupadamente, notando el nerviosismo que empieza a tener Derin.
- Disculpen, creo que deberíamos irnos - Edric se levanta de la mesa e intenta agarrarme del brazo. Me suelto de su agarre y lo empujo haciendo que se siente de nuevo y continuo.
- Hace dos años que se acuesta con otra mujer, o más bien con una jovencita. Esa chica es su hija - anuncio mientras volteo a mirar a Derin.
- Se está pasando - Derin por fin se anuncia con tono molesto mirándome a la cara.
- ¿Qué acaba de decir? - me pregunta el señor Serkan sin poder creerlo.
- Ocurrió cuando usted invirtió en el nuevo proyecto de mi marido - como no hace mohín para detenerme, decido continuar - Claro, como iba a imaginar que un hombre casado y con un hijo se acostaría con su hija-. En ese momento Derin sin poder creer que se lo estuviera contando a su padre se levanta de la mesa.
- ¡Fuera de mi casa, ahora mismo! - demanda el señor Serkan rojo de la ira por lo que acaba de escuchar. - Tengo una noticia más - le anuncio a los señores Gonul antes de irme, Derin en ese momento para su caminar y se voltea.
- Su hija esta embarazada de mi marido - les notifico con una sonrisa, aunque estuviera muy furiosa y decepcionada en ese momento.
- ¡Cállate, cállate! - Derin por su parte procede a pegarme por detrás y Edric que no se había pronunciado se levanta rápidamente a agarrarla. El señor Serkan al ver el comportamiento de su hija se levanta de la mesa.
- Que aprovechen - me levanto y arreglo mi cabello dispuesta a salir de esa casa sin bajar la cabeza, demostrándoles sobre todo a Edric y a Derin que no lograron pisotearme. Salgo de esa casa dejando a Edric atrás enfrentando a los señores Gonul para que les de una explicación.
Se dice que la ira de una mujer traicionada es peor que el infierno. Lo he visto en mí misma. Yo creía en él con todo mi corazón, hasta hace unas pocas semanas creía que éramos la familia perfecta. Él me amaría hasta que la muerte nos separase, creía que pasaríamos toda nuestra vida juntos en nuestra casa.
El hombre perfecto, el marido perfecto, creía que de verdad eras un padre perfecto. Era la mujer más feliz del mundo, contigo tenia todo aquello que había soñado. ¿Qué mas podía pedirle a la vida? Ahora que tenia paz en mi corazón y en mi hogar, ¿Qué podía necesitar? Tenía a mis seres queridos junto a mi, que más podía pedir.
Solía dejarte notas en tus libros, siempre decían lo mismo "Te amo". Cuando leíste una noche un libro mientras estábamos sentados los dos frente a la chimenea dijiste, seremos una familia muy feliz, ya lo veras mi amor. Todas las familias felices se parecen unas a otras pero cada familia infeliz lo es a su manera. Así es, éramos una familia feliz con nuestro hijo. Éramos felices hasta que destruiste nuestro matrimonio y con ello la felicidad de los tres.
Después de reflexionar sobre su existencia como Samantha, se percató de su papel insignificante dentro de una historia, siendo simplemente un personaje destinado a dejar una marca trágica en la infancia del despiadado duque, Stephano Brown. Este desafortunado antagonista estaba destinado a perderlo todo antes de sumergirse por completo en la oscuridad, siendo afectado por su madre, padrastro y la guerra ¿Podrá una sirvienta de humilde posición alterar de alguna manera su destino cruel y el de Stephano?
Secretos, mentiras, una traición, complicidad entre amigos pero sobre todo, una segunda oportunidad para el amor.
Durante siete años, Jillian estaba enamorada de Bryan con pasión inquebrantable, pero él permaneció distante, con sus emociones herméticamente selladas. Descorazonada, ella se marchó al extranjero tras graduarse de la universidad. Tres años después, Jillian, ahora una abogada de éxito, se sentó provocativamente en el regazo del hombre. Con una sonrisa juguetona, le espetó: "¿Qué te pasa, Bryan? ¿Eres impotente?". Bryan ya no podía contenerse. Con un rápido movimiento, la tomó en brazos y la arrojó sobre la cama. A la mañana siguiente, cuando él se despertó, Jillian esbozó una sonrisa traviesa. "Solo es una aventura, ¿de acuerdo?".
Paola Fischer vive un matrimonio aparentemente feliz hasta el día en que, al regresar a casa, encuentra a su esposo, Lucas Hotman, en la cama con su secretaria, Rose Evans. La traición la deja destrozada, y, sin saber cómo enfrentar el dolor, se marcha de su hogar. Esa noche, en un bar, conoce a un enigmático desconocido que le ofrece una compañía inesperada. Buscando escapar de su desilusión, Paola se entrega a una noche de pasión con él, dejando que el dolor de su traición se diluya en la intimidad. Al día siguiente, trata de seguir adelante, pero pronto se enfrenta a una sorpresa que cambia el curso de su vida: está embarazada, y el padre no es Lucas, sino aquel hombre al que apenas conoció.
Después de que Ellie recuperara su verdadera identidad, se encontró en un inesperado matrimonio con el Sr. Thorpe, un hombre lisiado que era despreciado por todos. Su exnovio infiel aguardaba su arrepentimiento, mientras los demás la miraban con sorna. Sin embargo, para Ellie, su aclamado bar no era más que un proyecto secundario. Su vasta colección de joyas parecía trivial. Los mejores diseñadores estaban a su disposición. Poseía autos de lujo, grandes mansiones e incluso islas privadas. Tenía el poder de ganar prestigiosos premios y vengarse de su infiel ex y de la amante descarada de este. No obstante, para los extraños, su vida parecía aburrida, ensombrecida por la discapacidad de su marido. Un día, el Sr. Thorpe se levantó de su silla de ruedas, incapaz de mantener la fachada por más tiempo. "Ya no puedo seguir fingiendo. Mi mujer es demasiado extraordinaria", declaró. Ellie, con las manos en la cintura y los dientes apretados, se enfrentó a él: "¿Y el divorcio que prometiste?". Tocándole suavemente el vientre ligeramente abultado, el Sr. Thorpe respondió en voz baja: "¡En tus sueños!".
Rena se acostó con Waylen una noche cuando estaba borracha. Y como ella necesitaba su ayuda mientras él se sentía atraído por su belleza juvenil, lo que se suponía que sería una aventura de una noche se convirtió en algo más. Todo iba bien hasta que Rena descubrió que el corazón de Waylen pertenecía a otra mujer. Cuando esa mujer regresó, dejó de volver a casa, dejándola sola por muchas noches. Finalmente, un día, la pobre chica recibió un cheque y unas palabras de despedida. Para sorpresa de Waylen, Rena solo sonrió y dijo: "Fue divertido mientras estuvimos juntos, Waylen. Pero espero que no nos volvamos a ver nunca más. Que tengas una buena vida". Sin embargo, por voluntad del destino, los dos se volvieron a encontrar. Al ver que Rena tenía a otro hombre a su lado, los ojos de Waylen ardieron de celos y gritó: "¿Cómo diablos lograste seguir adelante? ¡Pensé que solo me amabas a mí!". "¡Es pasado!", Rena se burló, "hay demasiados hombres en este mundo, Waylen. Además, tú fuiste quien pidió la ruptura. Ahora, si quieres salir conmigo, tendrás que hacer cola". Al día siguiente, Rena recibió un anillo de diamantes y un mensaje del banco de que alguien había transferido miles de millones a su cuenta. Waylen apareció, se arrodilló frente a ella y dijo: "¿Puedo saltarme la fila, Rena? Todavía te quiero".
Lucia Meller es mi vida, me enseño amar, me enseñó a adorarla, me mostró el mundo de forma diferente, le di todo lo que la vida me ofrecía, y se ha ido; se llevó mi vida, mi amor, dejándome el corazón y el alma hecha pedazos. Ahora me duele respirar, me duele amar, me duele la vida. La quiero, jamás podré volver amar a alguien como la ame a ella; la quiero de vuelta, la quiero conmigo, a mi lado donde pertenece; pero por más que la busco no la encuentro, es como si la vida me la hubiera arrebatado y eso me duele, ella me enseñó que se puede matar a un hombre, aunque se conserve la vida, sin embargo, me canse, no puedo llorar por alguien que no me quiere amar y aunque duele, hoy después de casi dos años le digo adiós a mi sirena; después de todo soy Gabriel Ziegermman. Un año desde que me aparte de Gabriel y mi vida dio un giro de ciento ochenta grados, amar a ese hombre es lo mejor que me ha pasado en la vida, a él le debo el hecho que hoy esté viva y tener a mi lado a mi mayor tesoro, él me enseñó que lo que se desea con el alma se obtiene, pero también me enseñó que amar duele, que su amor duele, a él le debo el dolor más grande, porque dejo de amarme, no fui suficiente para él, me enseñó que su madre, su exnovia y su destino no están conmigo, y aun así lo quiero de vuelta, sé que sus prioridades cambiaron; yo solo pedía una verdad sin embargo él prefirió engañarme y dejarme.Lo quiero olvidar y lo quiero conmigo, aunque no se lo merezca, pero como hago si amar ese hombre es mi arte. Ahora estoy de vuelta y lo único que quiero es tenerlo a kilómetros de distancia, porque me enseñó que yo también tengo derecho a cambiar mis prioridades. Novela registrada N ISBN 978-958-49-7259-0 Está prohibida su adaptación o distribución sin autorización de su autor. Todos los derechos reservados all rights reserved
Mi familia era pobre y tenía que trabajar medio tiempo todos los días solo para pagar las cuentas y estudiar en la universidad. Fue entonces cuando la conocí, la chica bonita de mi clase con la que todos los chicos soñaban salir. Era muy consciente de que ella era demasiado buena para mí. De todos modos, reuniendo todo mi coraje, le dije que me había enamorado de ella. Para mi sorpresa, accedió a ser mi novia. Me dijo, con la sonrisa más bonita que he visto en mi vida, que quería que el primer regalo que le diera fuera el último iPhone de gama alta. Un mes después, mi arduo trabajo finalmente valió la pena. Pude comprar lo que ella quisiera. Sin embargo, la pillé en el vestuario besando al capitán del equipo de baloncesto. Incluso se burló despiadadamente de mis defectos. Para colmo, el tipo con el que me engañó me dio un puñetazo en la cara. La desesperación se apoderó de mí, pero no pude hacer nada más que tirarme en el suelo y dejar que pisotearan mi orgullo. Cuando nadie lo esperaba, mi padre me llamó de repente y mi vida cambió. Resulta que soy el hijo de un multimillonario.