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ja y la miro con molestia. Las personas de las mesas contiguas nos observan a la expectativa, como si es

espectáculo y parece no darse cuenta de ello, me pongo de pie y tomo la charola de la mesa y camino hacia l

es mi madre para estar detrás de mí todo el día vigilando qué hago y qué dejo de hacer -pongo la bandeja sobre la mesa y tomo asiento, ni siquiera me molesto en invitarla a

a arruinar la merienda. Mojo unas cuantas papas fritas con la sal

no sé qué hacer para arreglar lo que he estropeado -sus ojos se l

nes que tengamos. ¿Te diste cuenta de lo que hacías allí dentro? -digo, señalando el local y ella niega-. El ridículo

e para que la novia de mamá venga a buscarme. Hoy el clima es perfecto en Los Ángeles y por esa razón, mamá, su

mirándome a los ojos con un poco de arrepentimiento que no sé de dónde sale este porque ella nunca se arrepiente de sus acciones así sean malas-. Estoy viéndome con algui

is ojos picar y los cierro, no quiero que vea como me están afectando sus palabras, confiaba en Aiza hasta el punto en que podí

no? -Pregunto, dolido-. Y tienes razón, no merecía que me traicionaras cuando yo tenía toda mi confi

usta otro chico desde hace dos meses atrás y decidí empezar a salir con él a escondidas, porque esperaba que cuando llegara el momento y te dijera lo que suc

, está loca si piensa que iba a aceptar a alguien más en nuestra relación o

e reír, llorar, gritar, no lo sé, o que me golpeen porque no termino de asimilar que la chica con la que estuve de novio un año me haya engañado y me proponga semejante locura-. No, claramente no lo estás p

... -dice apenas me levanto y me

co, camino con lentitud hacia el auto de la novia de mamá que se acaba de estacionar y ella me

a. La coloca dentro del portavasos y pone en marcha nuev

miraba como cachorrito abandona

s, soy un cornudo -contesto con sinceridad, ella ha sido parte de mi familia desde hace ocho años, así que no encuentro excusa alguna para mentirle-. Me siento mal, Anna, muy mal. No s

a ver películas y comer helado? -so

o distraerme y digerir la noticia -musito, divertido. Meto la mano

rando y si no quieres que se ponga impaciente por la demora, tengo que dejar de manejar como una abuelita -es cierto lo que dic

zo para hacerme sentir un poco mejor, aprecio el gesto, pero lo único que quiero es estar solo, así que ¿cómo le cancelo una sali

por más agotado físicamente que esté. Desde que nos fuimos del pueblo hace seis años, viene con más frecuencia a visitarnos, supongo, que, como yo, sentía una gran aversió

rece la cajita de pañuelos desechables que carga consigo a todos lados y le agr

a pandemia mundial de Covid-19, el 2022 no ha sido tan caótico como el año pasado y el antepasado. No han

con calma y sin complicaciones. Sin embargo, este año fue diferente, cambió totalmente y no quedaron rastros de la

nte fue

e a alguien sus tonterías. Nunca me he caracterizado por tener mucha paciencia, ese es mi talón de Aquiles. No juz

ellos, simplemente estaba desti

Anna ríe, siempre me han gustado mucho las vistas que proporcio

o por todo lo que ves -musita Anna con alegría y sonrío-. Eres igual a Marie, por más que vean

de comparación, simplemente es demasiado buena para este

ra que me golpeara si le hacía daño a tu madre y cada vez que nos vemos, me lo recuerda -sonrío y observo como Anna también lo hace, supongo que le es grato recordar todo aquello-. Mason, Steven y tú,

es preciado para nosotros y es lo que debería hacer cada persona

o quisiera, había visto en la televisión tantos casos de violencia doméstica, que me aterraba que terminase en manos de alguien así. Lo mismo sucedió con papá y más porque su pareja tiene l

fuesen el centro de su universo. Pongo la caja de las papas junto a mis pies y busco una posición cómoda en mi

susto, despertar a alguien a gritos mientras duerme es peligroso, puede causarle un infarto. Anna ríe y sale del auto, con lentitud

por mí y nos abrazamos durante minutos, solo p

apenas nos separamos-. No sé por qué no nos

a caminar hacia el restaurante en el que tenemos

fixiarte con mi sobreprotección -dice con sinceridad y nos toma a Anna y a mí d

iar, esta semana que viene será bastante relaja

co el móvil, lo desbloqueo y abro WhatsApp, en el grupo que tengo con mis amigos hay un montón de mensajes y

sin pagar tu cuenta y

jar el dinero y pedirme que

ido y conti

ue me merezco que lo

ue terminamos? Así podría comenzar a salir co

e eso, pero es lo mejor, así na

iza: "P

bloqueo su número y elimino. No h

A pesar de tener cincuenta y seis, no aparenta la edad que tiene, luce como una treintañera-. No aceptaré u

dre es todo para mí y haría lo que sea para hacerla feliz, así sea ir a beber a un bar-. Pero antes, ¿podr

stra reservación y un mesero nos lleva hacia un apartado privado, mientras nos explica el origen de

ro de mi hermano con una sonrisa enorme. Mamá corre hacia él, lo abraza y le hace un montón de preguntas, Ma

gunto a Anna en el oído-. Me

a lo suficientemente bajo como para que mi progenitora n

e ellos, ya veo porqué mi hermano se tomó la molestia de pagar más dinero por un lugar en el que podamos estar solos. El mes

emos y saludemos como es debido, mientras ella toma asiento y mira la carta, la nov

hermanito? -Le pr

bromas después que cumplí diecinueve y alcancé una estatura superior a la suya y bueno, acciden

he querido saber que se siente jugar en un estadio de béisbol con miles

la orilla de la playa, el montón de personas caminar sobre la arena y darle vida al lugar.

que la jugada que hiciste no salió como ellos deseaban -susurra y pasa sus manos en su cabello-. Es estresante que al llegar a casa y quieras distraerte revisando un poco tu

rdad, ¿tú manager q

e equipo, no tienen compasión con nadie -se voltea y mira hacia el comedor donde se encuentran nuestros padres con sus respectivas parejas-. Ellos no son malas pe

a estupidez, siempre he admirado a mi hermano por su forma de pensar y lo buena persona que es, por no perder su

o y mi ejemp

herman

egunta y saca un cigarrillo, lo lleva a su boca y enciende-. Es muy raro que no est

me estuvo viendo la cara de imbécil dos meses -c

iste

r la cuenta -rio y Mason se ahoga con el humo por la risa, aunque no deja reír y le sale humo por la nariz y boca-. Me

r de haber cerrado la puerta francesa, mamá y los demás esc

to o una casa, la deja sola en la mesa y se va sin pagar nada, dejando que ella se haga cargo de la cuenta -sonrío y niego con la cabeza,

o y mi hermano asiente-. Sí, me quedaré, mamá quiere

á súper ebrios, ustedes lo que hacen es oler de lejitos una gota de alcohol y enloquecen -ríe a carcaj

con burla y camino hacia la puerta francesa y me detengo-. ¿Qué m

pero nunca japonesa. En cambio, mi hermano sí y cada vez que prue

deliciosos, no te arrepentirás -murmura y camina hacia donde estoy-. Pe

damos a nuestro padre y a Frank