Enséñame a amar

nse

s, era como un temblor de nerviosismo que no podía explicar, me ocurría desde que inició el semestr

n examen en mi vida desde que inicié el instituto. Esto podía entorpecer mi promedio y estaba

tranqui

rmida, les había explicado a todos mis amigos de clase, e incluso varios se fijaron de mí en el examen y de h

los pasados 2 exámenes y ha

a el m

a de culo donde mantenía su ceño fruncido y siempre explicaba física como si odiara estar encerrado en un salón de clases, nunca hablaba con nosotros más de

er

la respiración y cerré los ojos, todo estaba jodidamente mal, lo mínimo para aprobar era un 6, y solo qu

cía jodidamen

estaba bien menos el resultado. Había estudiado, ¿Cómo era

me media vuelta para ir a mi asiento, c

iscu

er en un tormentoso silencio. Apreté mis la

u ceño estaba fruncido, su rostro comúnmente e

er

realmente alto, se había quitado los lentes y sus ojos verdes estaban fijos en mí casi traspasándome como dard

-dije alzando la barbilla

urlándome en su cara

o sonrió, pero no con una sonrisa simpática y humorística, fue una sonrisa perversa e

al puente de su nariz antes de colocarse sus lentes, todos estaban anonadado

as manos detrás de

ego debajo del agua, los inteligente

a mitad de la clase tampoco lo hizo, p

ente él se volteó hacia mí y tuve que resistirme a la idea de caer de espal

a Monserrat, se considera. -Replicó, pude ver una ligera satisfacció

a sancionado y humillado frente a todo el salón hace apenas unos segundos atrás... lo peor de todo e

de

él, lo único que q