ítu

ceb

par de vistazos al pedazo de cebolla a un costado de mi plato. Entretanto, observé la determinació

intento. Sus manos se cruzaron a la altura de sus hombros, detrás de mí. El sonido eufór

rnos, me hacían sentir dem

? -volví a

en seco. Este hombre era más intimidante de lo que pensé

onio Walker era mejor

respiración. Le había dolido lo q

bas de de

a habitación. Para este punto, mis tacos de birr

co. Además, estoy más que segura d

a nada de eso de

mayor tiempo posible y rematar mi golpe

u nuca para luego mirar perdidamente

engando de

respondí c

esidente, te v

rvé de

es a ser presidente de Go Spa

estás ta

ing

da en su

ntenerte como el candidato potencial para ser su sucesor. En cambio, no has sido capaz de

olvió a encarar-. ¿Qu

fruncieron p

rte del mundo, pero ¿y usted? ¿Podrá vivir viendo cómo el hombre que le come e

o? -repitió mis palabra

no lo has

cón en la cara al verlo

, señorita James. Si está insinuando que mi prometida y él ti

é prof

nía de hermoso l

bebida-. Ahora bien, ¿se va a comer esa cebolla o no? ¡Dice que An

nos con detenimiento al comprender que yo tenía la razón. Ambos fueron criados

a trabajar maña

tenía nada

cebollas, así que saqué mi móvil p

rsela y dejarla a un costado de donde se encontraba en pie. Elijah sacudió salvajemente sus h

r profundo y luego

erla viajar a la comisura de sus labios. No quería hacerlo, se le notaba, p

lo disfrutaba demasiado. Sus ojos se cristalizaron de un instante a otro, quizá por el ácid

a -sus

¡Elijah se tallaba los ojos porque le ardían! Apreté la mandíb

-gritó ent

orón y cómet

locar mi cámara sobre su cara. Todo su rostro estaba rojizo por el ardor que, al masticar, le producía el bulbo de la planta. Mi

nción de vomitar-. Trágatelo, s

ba con e

ecía? ¡Por su

a que detuviera esto, pero no tenía intenciones de hacerlo. Fui humillada ante su pres

, lo escuc

gunas de las meseras corrieron hacia él para ayudarlo a respirar, mientras

juego hoy

l sudor y la humedad de su rostro-. Cuando creí que no era

í tener el poder absoluto de la compañía de su familia? ¡Elijah Walker no

ro a primera ho

to a mí todo lo que me había comido. Ella lo sa

i teléfono. Estaba más que segura de que esta era la primera vez que alguien le d

erra», diría mi ma

e mi pobre alma. Mis manos apretaron las paredes de azulejos a mi alrededor al sentir aquel

morir,

de Go Space. Si no, tendría que ver el mundo arder luego de la humillación que le hice pasar ay

ia... Los amab

ébil para siquiera dar un paso. Bajé las escaleras que daban a mi sala y me arrastré, en teoría

e mi casa hacia la compañía Walker. Mis manos colocaron la tarjeta de acceso en la

ora. ¡Ayuda, m

de lo pálida que me veía. Una de las asistentes me dejó una bandeja con dos cafés sobre mi escritorio y me dio la ord

ició

, hablo de cagarme»- delante de aquello

Después de medio segundo, logré entrar. El presidente de la empresa te

lla y dame un heredero -es

uy pronto para cas

aray,

cuando ambos me m

está tan avanzada. Toma. -Elijah abrió los ojos al ver el papel que su padre le había entregado-. Esta clínica es muy buena. Ahora está

nte si crees

aron al verlos le

-entonó el hombre iracundo-. ¡Es ahora, u olvídate de mi

s, papá. Es imposible que

n golpeó

cesitamos el apoyo de su fa

enc

longado se inst

a, págale lo necesari

na pequeña mesa de centro. Mi jefe caminaba tan rápido que me era casi imposible seguirle el paso. Cua

in decir nada por

e hoy -declaró mientras yo

aso par

S

dónde

los deseos

mordí el labio inferior al darme

ida para poder recibir lo que me corresponde? Esto es

oz que usó f

rame -

mandíbula

prometida en la misma silla en la que te vi sentado ayer»-. Mi padre me está presionando para darle un he

osa de ch

irada juzgad

que darle todo a mi hermano menor, la fortuna que fue acumulada por

de tu bisabuelo, crear todo esto para nada, ¿cierto? -La

tiendes alg

sobre los ap

gar que conocía perfectamente-. No puede ser

Su padre lo envió al

a vez volvió