ítu

a caf

del señor Walker se abrieron con tanta exageración que presentí que en cualquier momento iba a explotar. Ambos dirigimos nues

el manzano de tus padres en Michigan y luego las dejaba en las canastas del producido, y solía insultarnos cada vez que le pe

a una de mis declaraciones. El castaño llevó sus dedos índice y pulgar hacia el puente de su nariz para, acto seguido, solt

mbargo, Elijah me señaló con su

iba a llamar a Recursos Humanos p

pedida en mi primer día como asistente de presidencia. Tenía que hacer algo ahora mismo. Debía pensar en algo que

sin parar de mi boca como solía hacerlo cada vez que estaba nerviosa-. No lo conozco, aunque tengo que admitir que sí tiene cara de culo. Es más, me dijeron que era demasiado

detrás de él como alma que lleva el diablo. Un paso de Elijah Walker era como tres m

n rapidez por la falta de aire en mi cuerpo. Mi peinado ahora e

ñor

s. -Observó su teléfono-. Llévame a mi apartament

os Ángeles. De repente, alguien aplaudió sobre mi

s esperand

quién está lla

años en la c

rder el tiempo y ábreme la puerta de mi

la puerta? -pregunté i

é crees q

algo. -Tiré sus

rió los labios

-Me aniquiló

é hacia un

es increíbleme

yudarte a ir al baño?

erd

con vel

ras re-tra-sa-do. -Las últimas palabras las arrastré tanto que casi me escupí al ver las facciones de su ca

ué

or. Estaba a nada de

tra

ugó la car

s desp

rlo cuando me subí a su coche. No iba a perm

de hacer eso

-. ¡Por supuesto que sí p

e pato con mis labi

contrató -at

yo soy

dolieron c

po me hacían darme cuenta de que su padre lo mimó toda la vida. Hasta ahora, Elijah Walker no tuvo que mover ni un solo músculo para obtener todo lo que quiso. Era solo un

os y es

padre. -Me reí y

residente, pu

sidente, y si él me contrató, t

sole

¿a tu casa o a la mía? Es que ya es h

uce hacia mi apa

qué Carlotta se lo

o pone

qu

A

¿A quién le import

e volvía demasiado pesado, así que prefería tomármelo con calma. Observé la hora en

y mirada al frente. No

uras te obligaban a trasportarte a la playa o a ir a esos resorts lujosos en donde podías pasar un d

ra, ya que lo menos que deseaba era arruinar mi curríc

uevos inversionistas de la India -declaró, y miró su iPad-. También en

rendió

-Empujé con mi p

dijo-. Mi chef acaba de cancelar. Tú, bicho -mis manos apretaron el

camioneta blanca se me atravesó al frente, así que necesitaba pasa

ida italiana para mi prom

y a hac

tud, es una orden

ocinera! -respondí sin quitar

culo! Si no vas a cocinar, en

tu empresa,

te y parte llenaro

acabas d

fé de él, hasta que mi ma

hacia e

me tienes que gritar? -

a, mira hacia el

que sentí fue u

ento seis mil dólares, y lo peor er

que me m

tuve que c