tigiosa. Descubro que son líderes en los utensilios fabricados en material de cuero y caucho de tipo biodegradables. A

ra conseguir un buen lugar; sin embargo, que hable cuatro idiomas incluido el español debe ser un gran ítem

a, y supongo que antes encajaba bien en ella, cuando todo parecía ir

abl

s citas al psicólogo que garantizan que tenga todo lo anterior. Mi padre no pudo quitármelas, pero ya no seguirá pagando nada de ello desde que dije que iba a independizarme y conseguir un trabajo

erme cambiado de ciudad, creo que por eso no había encontrado nada hasta ahora. Tomo aire y me apresuro a ingresar por la entrada de la entrada principal del Skywall. Dentro, todo

disponible de asistente de gerencia. La mujer de mediana edad me mira de arriba abajo y parece dudosa. Me pregunto si hay algo mal con mi aparienc

ara la gerencia? ―pregunta l

i mejor

ncia luego del mes de revisión ―respondo y ella me mira con la boca entreabie

es solo que

es e

corregirlo ―explica la mujer, después de ello y todavía no muy convencida me da la autor

digo que no puedo perder esta oportunidad, es real. No puedo. Ya no soy la chic

esto de la señora Sullivan y ella me daría indicaciones, pero no tengo que hacerlo, creo que es quien me espera con mi currículo

ls? ―pregunta

hace

ede algo? ―contes

ran problema ―dice con

me a

que no me da

nes el puesto, estás cua

que me sofoco ante lo que podría ser una negativa. Miro a mi alrededor con mucha expectación por

adultas. No sé qué pensar de ello, no obstante, hay lugares donde los cargos requieren mucha experien

cue

os porque se queda muda, y es cuando veo que todos se ponen en pie haciend

in embargo, su caminar es apurado y la mirada ceñuda e intransigente. Dos trabajadores caminan a su la

quien trabajaré. Todavía está soltero, es lo que dice en el portal de una revista de negocios que investigué, para saber quién era el que dirig

e la cabeza que todos son como Adrian Bellford. Por andar recordando esas cosas no me fijo que se ha detenido frente a mí, y lo de int

iera mirarme, aunque estoy casi en su frente. La mujer parece que rezara con agonía por

a la mujer. A mí me enerva porqu

a Wills ―contesta

e con este

e lúgubre y hasta tenso. Me da la impres

sé por qué, pero me enoja que arras

blema ha

a que se escogió para remp

i claras instrucciones ―dice el

, s

o gritarle cual es el maldito problema con eso―. Y no m

difunta Rosseane para estar en su cargo es el de la señorita Allegra

Rosseane está muerta,

n notas que encontré de él en la internet. Es estricto y reservado, tanto que no s

ó de que iba a morir y debía dele

el puesto. Lo que me hace pensar que esa Rosseane se as

maldita broma y

o se

! ―masculla e

enorme cartel de neón se dignaría a mirarme, ni aun así lo hace, sigue con su mirada furibunda puesta sobre la pobre

ta que por fin se digna a mirarme, y ahora cuando conecto con su mirada furibunda, no diré que es cien por ciento atra

grandes zancadas hasta la oficina del f

go de ello es como si el ambiente transmuta

pasa a e

como si la hubieran regañado. Es

ipo? ¿Cuál es su proble

gredido la regla más importante para las mujeres que quieran tra

acer bromas ―le reprende la muj

rque apenas y este es mi primer día? ―pregunt

e ha jugado una buena broma al escogerte ―responde el hombre y la verdad