/0/8117/coverbig.jpg?v=53311deea6f44d913b2a143d876b3597)
Sobrevivir es la palabra favorita de Cassie, una recién graduada de psicología que ha pasado por muchas dificultades para sacar adelante su carrera y su vida en general. Con un esposo muerto que le ha dejado muchas deudas detrás de un pasado turbulento, necesita aceptar una propuesta extraña pero rentable para poder salir a flote y no ir a parar a la cárcel. Teniendo que buscar una alternativa acude a una entrevista para un extraño trabajo que ofrece un misterioso empresario y la sorpresa al verlo, es desgarradora. Para Thiago,cuyo nombre ahora es Marcos y quién no recuerda que alguna vez se llamó de esa otra forma, es un impacto fulminante al verla, y a pesar de su fría manera de ser, decide darle el peculiar trabajo, no sin antes intentar recordar de dónde le resulta tan familiar la chica y un tatuaje idéntico al suyo que ella lleva en una mano. Entiende que algo se esconde detrás de sus ojos y aunque lucha con todas sus fuerzas para recordarla, no lo consigue... no puede. Entonces decide conocerla. Ellos tienen una historia antigua que ella no olvida y él no recuerda... ¿Cómo se manejan los sentimientos en medio de tantos secretos? Conoce la historia de Marcos y Cassie, donde el amor es intenso, el dolor latente y la pasión arrebatadora.
Es una noche de lluvia. Una noche de esas en las que solo te apetece acurrucarte bajo el edredón, poner una película romántica y lloriquear cuando los protagonistas se besan al final y suena una música dulce que indica que serán felices para siempre mientras comen las perdices que te encantaría comer a tí, si tuvieras a alguien que te hiciera sentir especial y única, como a la prota de la peli.
Pues no.
En mi noche no hay nada de eso.
Ni estoy bajo el edredón, ni hay peli, ni besos ni perdices. Simplemente estoy yo, esperando a que mi cliente llegue y se haga las putas fotos para poder irme a casa a dormir sola, sin nadie que me haga sentir absolutamente nada porque a nadie en mi vida.
Soy abogada, bastante famosa divorciando gente de mucho dinero y esto de hacer fotos lo hago para descompresionar del estrés que me genera mi trabajo.
Hace unos años me dedico a esto.
Tengo un estudio en un loft en las afueras de la ciudad y muy de vez en cuando tomo algún cliente para salirme de mi agotador día a día.
La fotografía es una válvula de escape perfecta pero resulta, que el maldito cliente se retrasa y me estoy estresando.
-¡Hola!
Siento que llaman a mi espalda mientras me estoy preparando un gin tónic porque la impaciencia me está devorando.
Me giro y le veo.
¡Joder!
El tío mide como mil metros de altura, tiene los ojos más verdes que alguna vez he visto y la sonrisa desgarradora más hermosa que alguien puede esbozar.
-¡Eh...!¡Sí, adelante!
Ni siquiera le pregunto cómo ha entrado porque es evidente que me dejé la puerta abierta. Soy una insensata.
Se acerca a mí y me entrego a la belleza de este hombre.
Ofrezco una mano que toma presto y me sorprende dejando un beso en ella.
Llevo el pelo largo, negro y rozando sus hombros en bucles que le hacen ver salvaje.
-Perdona la tardanza -balbucea y me alejo un paso atrás -. Es que vine en moto y con esta lluvia, imposible apurarse.
-Tranquilo -consigo decir luego de carraspear y suelto la bebida de vuelta a la barra de mi bar -, entiendo.
¡Mentira! Lo único que entiendo es que está buenísimo y debe pensar que soy estúpida. No puedo dejar de mirarlo.
Me doy la vuelta y tropiezo con sus brazos que me aguantan por la cintura para que no caiga al suelo al tropezar con un cable de mis lámparas.
Tengo todo listo y solamente faltaba el cliente pero uf, el cliente está como un queso y cuesta concentrarse.
-Ups -murmura y sube un poco sus manos por las curvas de mi cuerpo hasta dejarlas a los lados de mis pechos, justo debajo de mis axilas y la sensación es inigualable -. Casi te caes.
-Lo siento -recupero la razón y me separo de él, pero me retiene.
-¿Seguro estás bien?
¡Pues no!
Estoy fatal, cachonda y haciendo el imbécil frente a un tío bueno que me de be estar catalogando como una lerda.
-Sí -miento descaradamente -.¿Empezamos?
Necesito hacer las fotos para poder irme a mi casa a darme una ducha congelada a ver si recupero la temperatura normal de mi cuerpo que ahora lucha contra la combustión espontánea.
-Vale -consiente dándonos un poco de espacio a los dos -. Voy a desnudarme.
¡Sí!... Olvidé contarles que hago desnudos artísticos.
Se da la vuelta y con un pie presionando el talón del otro se saca loa zapatos y los calcetines detrás.
Yo acomodo mi cámara y Dios, que calor siento.
Me saco la chaqueta y me quedo solo con la camiseta blanca que llevaba debajo y los shorts a cuadros. Siempre trabajo sin zapatos.
Bebo nuevamente de mi vaso y entonces sucede...
-¿Puedo...?
Sus palabras son sucedidas por sus brazos a mi alrededor enjaulándome contra la barra y me quedo quieta.
Su aliento en mi cuello eriza mi vello y cierro los ojos cuando le siento completamente pegado a mi espalda y ni siquiera me preocupa que pueda ser un violador o un psicópata. A mí este tío que me haga lo que quiera. Nunca sería un castigo.
Cuando traga el contenido que quedaba en mi vaso, lo deja sobre la barra y yo yo sigo sin moverme.
-Delicioso -pronuncia con voz grave.
-¡Gracias!
Contesto y no tengo ni idea de por qué lo hago.
-¡Mírame! -lanza su orden en mi oído y me tiembla el abdómen.
No sé por qué este hombre me provoca tanto bochorno. Es muy intenso.
No muevo. Solo se mueven mis párpados que bajan para cerrar mis ojos y me siento reclamada. Nada más.
-¡Mi-ra-me!
¡Dios, que sensación me produce en todo el cuerpo la orden que me da!
Luego de ese momento, los dos sabemos que todo cambia y cada uno toma su rol nuevamente...
Sus manos toman el borde de mi camiseta y poco a poco la va levantando. Obedezco en todos los pasos y cuando la tiene cerca de salir, la deja contra mis muñecas y con su altura y lo cerca que está una de mis lámparas, amarra mis manos en alto y me permito dejarle hacer.
-Hasta que no obedezcas serás como una dádiva. ¡Muchas gracias!
Muerde el lóbulo de mi oreja y baja sus manos lentamente por mis brazos mientras me incita a abrir las piernas con uno de sus tobillos.
Llega a mis pezones y se detiene ahí, rodeando las aureolas con sus dedos indices y me dejo caer hacia abajo colgando completamente del agarre de mis muñecas.
Besa toda la extensión de mi cuello mientras gime bajito sobre mi piel y deja pequeñas mordidas en todos lados que visita y mi cuerpo entero se convierte en llamas.
Chupa mi nuca y los pechos son suyos para seguir amasando como guste.
Está desnudo, detrás de mí, caliente como yo y siento su prueba contra mis nalgas.
-Voy a follarte muy lento, Cassie, te va a encantar.
Aprieta mis pezones una última vez y pierdo la cabeza en un grito de placer que le regalo y le lleva a pasar su lengua sobre ellos, ambos de manera alternativa y le tengo delante magullando mi sexo con una mano hambrienta sobre el jean.
Estoy encadenada y ansiosa.
Cierro los ojos para no verlo porque sé que si lo hago, todo acabará. No quiero eso
Ya no.
Le siento soltar los botones que me mantienen vestida de cintura para abajo y es entonces que sé que no hay vuelta atrás.
En cuestión de nada, soy despojada de todo y quedo desnuda, con mis ojos cerrados.
-¡Mírame! -repite y es su manera de confirmar que quiero esto.
Qué sensación tan extraña. Que delicia y que tortura.
Que mágico poder.
Niego y él sonríe sobre mis labios y aparto mi boca para que no me bese.
-Buena chica -dice dándose ppr permitido a entrar en mí.
Dos dedos se deslizan entre mi humedad y sabe, así como yo, que estoy vulnerable y entregada a él.
Hace unos círculos sobre mi clítoris y termina deslizando los mismos dedos dentro de mí y me retuerzo sobre mi posición.
Gimo y el gruñe sabiendo que quiero proseguir.
Escucho en medio de sus dedos creando música entre mis piernas con mis fluidos, el sonido del preservativos al rasgarse y su boca vuelve a mis pechos.
-¡Te amo, nena! -es un susurro muy bajito en mi oído y luego me regala una mordida.
Intento no oír lo que dice y sigo conectando con su cuerpo simplemente tentando al mío.
Cuando estoy a punto, se retira y baja las manos a mis muslos, cuela sus dedos por detrás de ellos y me levanta cargando mi peso en sus palmas y me empala de una sola estocada.
-¡Joderrr!
Los dos decimos la misma palabra y mis ojos se mantienen cerrados. No puedo abrirlos. No quiero verlo. Sabe que no puedo hacerlo.
Se retira, quedando en la entrada de mí sexo y recuesta la frente sudada en mi hombro para tomarse el mismo minuto que necesito yo, porque sabe demasiado bien tenerle dentro y podría explotar ahora mismo si se moviera. Sé y siento que él también.
Mis piernas se aprietan a su alrededor y entonces mi cuerpo le aprieta por dentro y grita empezando a moverse como demente dentro de mí.
Una, dos, tres y no puedo saber cuantas veces más, entra y sale, entra y sale y la velocidad es tan brutal que me falta nada para dejarme ir.
-Dios, amo esto. Eres maravillosa.
No digo más que jadeos. No puedo.
Siento como caen mis manos del techo y soy cargada completamente por él que me pone sobre el suelo, espera a que mis piernas se sostengan sin temblar y me da la vuelta, me dobla sobre una banqueta y poniendo mis manos en el borde de la barra de mi bar, me abre las nalgas con sus manos y vuelve a entrar en mí sin parar en el ritmo sobrehumano que impone.
-¡Ah, Cassie, joder!
Muerdo mis labios en cada empujón que me regala y la sensación de tenerle dentro resbalando por las paredes de mi vagina es una maravilla que nunca podré volver a sentir sino le tengo a él para dármela.
Suelta mis nalgas y le aprietan la polla cuando sube las manos a mis hombros, se aferra a ellos para profundizar en la penetración y cada empellón hace que mis pies se levanten del suelo.
Sé que ya tiene que acabar, no queda nada. El tiempo se agota y estoy segura que ya estamos al final.
Es entonces como siento, que me mete una mano entre las piernas y el muy maldito me aprieta solo un poco el botón latente y me corro como una novata al mismo tiempo que él. Los dos sabemos que yo no puedo hacerlo, pero también sabemos que él hace que sea imposible evitarlo. Y en el justo momento en el que dicen...
-¡Corten!¡ Ha valido!
Esa es nuestra señal para separarnos y Thiago se niega.
Cuando el director de la peli, el mismo con el que estoy casada se me acerca, mi compañero de reparto sigue dentro de mí en un intento de reclamo al que no tiene derecho alguno.
-Estuviste fantástica, nena -me besa los labios, incluso con Thiago dando un golpe dentro de mí con su polla y gimo en la boca de mi marido.
-Venga chicos. Tomen una ducha y en una hora grabamos la segunda toma.
Salgo de allí casi corriendo antes de que se de cuenta que me he corrido en pleno rodaje y cuando entro a las duchas, sé que está detrás de mí.
Me doy la vuelta, y Thiago dice con pesar y sabedor como yo, de lo que eso significa...
-¡Mírame!
Y entonces sí, lo hago. Le miro. Le miro y me pierdo en esos ojos que tanto amo, en esa boca me consume en medio de la clandestinidad y dejo caer una lágrima al recordar que su hijo crece dentro de mí y no podemos estar juntos. Mi vida es complicada y la suya...la suya es todavía más difícil.
Así que sí, como ya había dicho, mi noche de lluvia no es normal como lo sería para cualquier persona, en mi caso, todo lo mencionado ha sido parte del guión de una peli porno. Salvo el hecho de que Thiago y yo, somos más que compañeros de reparto bajo los ojos de la pasión.
Baxter y Naiara son los hijos de cuatro amigos que aunque se tratan como una gran familia, mantienen a sus hijos alejados uno del otro hace mucho tiempo. Ellos guardan un gran secreto que les obliga a mantener las distancias entre los chicos y ellas, sus madres..., ellas ignoran que si sus hijos se llegaran a enamorar podrían volver a abrir una caja de Pandora hace años cerrada. Los secretos, los miedos y los misterios vienen de vuelta cuando Baxter secuestra a Naiara, la hace su mujer ante los ojos de la mafia más poderosa del momento y a escondidas de sus padres se apropia de ella. Naiara no le perdona por robarse su vida, acabar con el amor que un día soñó; pero la pasión es más fuerte que ambos y pronto los dos sabrán el error que han cometido y la herencia que les espera, rodeados de un ya legendario odio. La apasionante saga continúa y de ambos lados se ajustarán cuentas pendientes, y... fantasmas del pasado volverán en la nueva entrega del universo de la mafia rusa.
Cuando Emma Thorne es obligada a casarse con un conocido Duque, jamás pensó que estaría siendo entregada a un verdadero demonio. Un suceso inesperado la pone en libertad y huye tan lejos como puede pero el destino y la sombra de su esposo siempre la perseguirán. ¿Habrá ido lo suficientemente lejos de él como ella cree o estará precisamente entrando en la madriguera de la bestia? Y él, ¿será aquello que aseguran que es? Cuando la vida de ambos se encuentre en una nueva encrucijada, las llamas de una gran pasión cobrarán vida entre engaños y misterios de un pasado tormentoso.
Alfred es un peligroso vizconde que guarda en su historia un enorme secreto y una oscura pasión. Los constantes ataques al rey de Mónaco le obligan a recurrir al misterioso y enigmático noble para poner en sus manos la vida de su hija menor, una inocente princesa en peligro. El vizconde acepta proteger a la dama bajo ciertas condiciones que hacen que viva a su lado unas oscuras y macabras normas que la llevaran por un camino nunca antes transitado por ella. En medio de un intenso deseo y una peligrosa atracción entre ambos, ella vivirá con él día y noche, poniendo al límite su paciencia sin imaginar cuantos secretos, intrigas y enredos les acecharán. Un hombre peligrosamente oscuro dominado por los encantos de una princesa tierna y completamente inocente. Una pasión arriesgada en medio de grandes descubrimientos que los llevarán a ambos a ponerse al límite de sus deseos.
En medio de dos caminos completamente diferentes, se conectan la vida de ambos. Cuando el guapo Ezio decide subirse a uno de sus cruceros de lujo con sus amigos para tomar unos días de descanso, no imagina que toda su vida se volverá un auténtico desafío al conocer a la guapa, Mell. Él no tiene idea de quien es la chica que ocupa sus noches tanto dormido como despierto mientras que ella...ella es una superviviente de la vida y trae detrás un mundo turbio que la persigue. Cuando el deseo pueda con ambos y los dos sucumban a las ganas de entregarse al otro, la verdad saldrá a la luz en pequeñas y peligrosas dosis. ¿Quién es verdaderamente Mell? ¿Por qué se ha refugiado en aquel crucero de forma tan imprevista? ¿Podrá el señor griego seguir protegiendo a una fugitiva de la mafia? Secretos... Pasiones... Peligros. Todo un mundo perverso se encuentra detrás de estos dos apasionados protagonistas que nos harán temblar con cada capítulo de sus emocionantes vidas. ¿Será que triunfará el amor después de tanto que está por venir...? Señor Griego: Una novela explosiva y excitante.
En un mundo oscuro lleno de traición y dolor se refugia Sila, una mujer hermosa e inocente marcada por los jefes de la mafia. Samuel Carter tiene un fetiche que la lleva hasta él sin imaginar que juntos encontrarán la razón de sus vidas para pelear contra todo y todos por estar juntos. Él no puede ver en medio de la oscuridad en la que vive hasta que llega ella con su luz iluminando todo y ella encuentra en el poderoso mafioso, una salida de pasión, protección y poder que los llevará por un turbulento camino. Una historia de la dimensión. Llena de secretos, traiciones, erotismo y amor. Un romance tan oscuro como la vida misma de ambos apasionados personajes. La historia de amor más intensa después de Amaia y Aidan.
Con el corazón roto y una enorme traición por parte de la mafia rusa, Nikky ha dejado todo y a todos los que ama para irse lejos con su hijo. Unas extrañas fotos junto a mensajes ocultos entre pistas extrañas le hacen volver a su vida anterior con toda la intención de vengar la muerte de su marido. Los rusos no están listos para tener a la dama de la mafia más grande del país de regreso y ella..., ella crea nexos con peligrosos hombres que sumados a los que ya la desean la traen de vuelta a donde pertenece. En medio de un enorme retorno ocurre la Resurrección Rusa. ¿Estarán todos listos para saber lo que eso significa? Cuando la explosiva rubia pisa la ciudad hasta el mismísimo presidente del gobierno teme la represalia de la mujer más importante de la mafia. Ella no es cualquier enemigo pero y él...¿Quién es él y que quiere de ella? El dueño de culpable de esas pistas hará que la catedral del placer renazca de sus cenizas y el peligro sea más grande. Secretos...Viejas pasiones...Nuevos amores y mucho más en esta explosiva secuela fuera de serie. Ni siquiera la muerte puede acabar con un gran amor.
"Tú no perteneces aquí. Lárgate". Hanna, la hija legítima de Wheeler, regresó sólo para ser expulsada por su familia. Su prometido la engañaba con la hija impostora, sus hermanos la despreciaban y su padre la ignoraba. Entonces, se cruzó con Chris, el formidable líder de la familia Willis y tío de su prometido. "Hagamos como si nunca hubiera pasado", dijo ella. Sin embargo, a pesar de la esperanza de Hanna de separarse, Chris insistió en que fuera responsable. Él amenazó con revelar los verdaderos talentos de Hanna como doctora sobresaliente, guionista brillante y cerebro de un famoso estudio de diseño, obligándola a casarse. Una vez le pidieron a Chris que protegiera a alguien. El destino los reunió en circunstancias delicadas. Él había planeado mantener su promesa y proporcionar un refugio seguro, sólo para descubrir que Hanna estaba lejos de ser la delicada mujer que parecía. Era ingeniosa y astuta...
Zen Luo, un joven y prodigioso patrón del clan Luo, perdió todo lo que apreciaba durante una pelea interna de la familia provocada por la codicia. Y después de eso fue esclavizado, pero al mismo tiempo, los impulsos de la venganza se calentaron a fuego lento. Nació una leyenda cuando, gracias al trabajo duro y la determinación, se convirtió en un arma poderosa. ¿Finalmente tendría éxito en vengar a su padre? ¿Llegaría al destino de la inmortalidad? ¿Qué pasaría con los que tratan de matarlo? ¡Lea esta historia y descúbralo!
"Estaremos casados por sólo un mes. Después de eso, nos divorciaremos de inmediato". A pesar de que su bisabuelo había arreglado su matrimonio antes de nacimiento, él no creía que una mujer tan informal y movida como ella merecía ser su esposa. Poco sabían en aquel entonces que estaban destinados a estar juntos. Hiram, el CEO joven y apuesto que nunca sintió atracción por ninguna mujer, y Rachel, la belleza que de alguna manera traía mala suerte a todos los hombres con los que salía, se casaron, contra todo pronóstico. ¿Qué será de su vida de matrinomio?
Amar y ser amada es lo que toda mujer sueña. Sin embargo, lo único que Debbie quería era el divorcio. Llevaba tres años casada con Carlos, un joven multimillonario a quien ni siquiera había visto la cara. Cuando por fin decidió poner fin a su irónico matrimonio e ir en busca de la felicidad verdadera, apareció su supuesto marido y le pidió que lo intentaran de nuevo. A partir de entonces, Carlos se sentía increíblemente atraído por el espíritu libre y salvaje de Debbie y se enamoró de ella. Él comenzaba a mimarla. Poco a poco, lo que había entre ellos se iba a convirtiéndose en una atracción irrefrenable. Esto es una extraordinaria historia de amor donde descubrirá que, a veces, el amor no está muy lejos de cada uno de nosotros.
Madison siempre había creído que se casaría con Colten. Pasó su juventud admirándolo, soñando con su futura vida juntos. Pero Colten siempre le fue indiferente, y cuando la abandonó en el momento en que más lo necesitaba, por fin se dio cuenta de que él nunca la había amado. Con la determinación de empezar de nueno y sed de venganza, Madison se marchó. Tenía por delante un sinfín de posibilidades, pero Colten ya no formaba parte de su vida. El hombre, por su parte, corrió a buscarla presa del pánico al darse cuenta de ello. "Madison, por favor, vuelve conmigo. Te lo daré todo". Sin embargo, fue su poderoso tío quien abrió la puerta y le dijo: "Ella es mi mujer ahora".
Lucía Balstone pensó que había elegido al hombre adecuado para pasar el resto de su vida, pero fue él quien acabó con su vida. Su matrimonio de diez años parecía una broma cuando su esposo la apuñaló con una daga. Afortunadamente, Dios nunca está ciego ante las lágrimas de las personas. Lucía tuvo una segunda oportunidad. Ella renació a la edad de 22 años, antes de que sucedieran todas las cosas terribles. ¡Esta vez, estaba decidida a vengarse y dejar que aquellos que la lastimaron pagaran! Hizo una lista elaborada de sus objetivos, y lo primero en su lista era casarse con el peor enemigo de su exmarido, ¡Alonso Callen!