/0/7319/coverbig.jpg?v=394b08b56a54964cf9ac738b3997662a)
¿Qué pasa cuándo tu corazón le pertenece a otro y eres obligada a casarte con un extraño? Eso mismo le sucedió a Ellie cuando su padre le mostró a Sandro, su nuevo esposo. Y ahora ¿qué sería de su vida? ¿por qué ella? Pero, aun más ¿por qué él?
Era un día de esos que prometían ser inolvidables para Ellie, había conocido a Josías; un chico hermoso y detallista que robó su corazón con tan solo una sonrisa. Ese día saldrían por unos helados y después al cine, era fin de semana y Ellie no tenía que trabajar o estudiar.
Se arregló hasta quedar perfecta, maquilló su rostro, colocó un vestido ajustado a la cintura con una falda a la rodilla y amplia de falda. Modeló mirándose en el espejo y aquel resultado le gustó, tocaba su cabello y acercaba su rostro al espejo asegurándose que todo estuviese bien para el encuentro.
Se despidió de su padre, notó que algo no estaba bien, sin embargo, no prestó interés en qué le sucedía, era hora de marcharse; afuera de la casa estaba Josías vestido muy elegante, la saludó cariñosamente y se marcharon a su primera cita después de semanas de hablar por mensajes,
Al mismo tiempo, pero en otro continente, estaba Sandro, con una maleta en su hombro a punto de abordar el avión, y la ilusión de regresar a casa después de algunos años fuera del país, no recorvaba qué se sentía el calor de los brazos de su madre o cómo era el olor del perfume de su padre
Llevaba consigo lo que en su apartamento había quedado, pues, dos días atrás lo había dejado ya sin cosa alguna que fuera de su pertenencia. Registró su maleta y tomó asiento en la sala de espera hasta que fue hora de abordar el avión. Poco más de doce horas después estaba en los brazos de su madre y su padre, tomaron asiento en el gran sofá y allí charlaron de todo; sin Sandro imaginar lo que al siguiente día se le avecinaba.
Dannia y Bruno se conocieron en una convención de médicos, su amor fue a primera vista, pero es en el día de su boda que descubre una cruel verdad, ha sido engañada por él y su asistente Laila. Alejandro al escuchar que Bruno se casa con una de sus empleadas decide asistir a la boda con la intensión de contar la verdad, pues él era el novio de Laila hasta que descubrió que una vez más Bruno se había inmiscuido en su vida como lo fue desde niños.
Lenny era el hombre más rico de la capital. Estaba casado, pero su matrimonio no tenía amor. Accidentalmente tuvo una aventura de una noche con una extraña, por lo que decidió divorciarse de su esposa y buscar a la chica con la que se acostó. Juró casarse con ella. Meses después del divorcio, descubrió que su esposa estaba embarazada de siete meses. ¿La mujer lo engañó? Scarlet estaba buscando a su esposo, pero, por error, los dos pasaron una noche apasionada. Sin saber qué hacer, se escapó presa del pánico, pero luego descubrió que estaba embarazada. Justo cuando estaba lista para explicar lo que le había sucedido a su esposo, este le pidió el divorcio. ¿Descubriría Lenny que la extraña chica con la que se había acostado era en realidad su esposa? Más importante aún, ¿su matrimonio sin amor mejoraría o empeoraría?
"Tú necesitas una novia y yo un novio. ¿Por qué no nos casamos?". Abandonados ambos en el altar, Elyse decidió casarse con el desconocido discapacitado del local de al lado. Compadecida de su estado, la chica prometió mimarlo una vez casados, pero no sabía que en realidad era un poderoso magnate. Jayden pensaba que Elyse se había casado con él solo por su dinero, por eso planeaba divorciarse cuando ya no le fuera útil. Sin embargo, tras convertirse en su marido, él se enfrentó a un nuevo dilema: "Ella sigue pidiéndome el divorcio, ¡pero yo no quiero! ¿Qué debo hacer?".
El marido de Vivianna se casó con ella por su herencia, y después de quitarle todo lo que tenía, la mandó a la cama de un acompañante y le tomó fotos. La amenazó con divorciarse con esas fotos y la obligó a salir de su casa sin un centavo. Dejó su país de origen en desgracia. Cuatro años más tarde, regresó a casa como Jefa de Diseño de Joyas y tuvo un hijo de tres años. Su niño genio le dijo después de bajarse del avión: "¡Conseguiré que el hombre más rico del mundo sea mi papá y te respalde!" Ella lo tomó como una broma, pero dos días después, su asistente le dijo que el hombre más poderoso del mundo se había robado a su hijo y la invitó a cenar. Al encontrarse, ese hombre sostuvo a su hijito y le dijo dominantemente: "Es mi hijo!".
A pesar de ser hija ilegítima, Lena tenía un parecido asombroso con la señorita de la familia Evans. Ante sus amenazas, se vio obligada a ocupar el lugar de su media hermana y casarse con Dylan. Como acto de rebeldía, Lena sedujo a Dylan noche tras noche, hasta tenerlo completamente atrapado. Aprovechando su afecto, se propuso socavar la familia Evans. Con el tiempo, Dylan empezó a notar algo extraño en su amada esposa...
Tras una noche apasionada, Verena dejó algo de dinero y quiso marcharse, pero fue retenida por su acompañante: "¿No te toca a ti hacerme feliz?". Verena, siempre disfrazada de fea, se acostó con el tío de su prometido, Darren, para escapar de su compromiso con su infiel prometido. Darren gozaba de respeto y admiración, todos creía que era frío y temible. Corría el rumor de que lo habían visto besando a una dama contra la pared, pero muchos no lo creyeron. Después de todo, ¿quién podría conquistar el corazón de Darren? Entonces, sorprendentemente, Darren fue sorprendido agachándose para ayudar a Verena con sus zapatos, ¡todo para conseguir un beso de ella!
Después de tres años de matrimonio hermético, Eliana nunca había visto a su enigmático esposo hasta que le entregaron los papeles del divorcio y se enteró de que su supuesto esposo estaba cortejando a otra mujer sin importarle cuánto le costara. Ella volvió a la realidad y decidió divorciarse. A partir de entonces, Eliana dio a conocer sus diversos personajes: estimada doctora, legendaria agente secreta, hacker reconocida, célebre diseñadora, experta piloto de carreras y distinguida científica. A medida que se conocieron sus diversos talentos, su exesposo fue consumido por el remordimiento. Desesperado, suplicó: "¡Eliana, dame otra oportunidad! Todas mis propiedades, incluso mi vida, son tuyas".