/0/15336/coverbig.jpg?v=ff5453dd9c1dfd753a26e6691f19332e)
En el mundo de los lobos las almas son guiadas por dos dioses; la luna y el sol, padre y madre de cada lobo. Cada uno tiene una alma y se comparte cuando conocemos a nuestra pareja, es como un hilo que no nos permite estar separados, un hilo que nunca se puede romper, una atadura de amor inquebrantable donde dos almas se vuelven una sola. Pero yo... no quiero una mitad, quiero ser libre de las ataduras del amor y de todo sentimiento que implique una debilidad. Durante siglos las manadas han creído que la clave para ser más fuertes es conocer su pareja pero en mi caso no lo veo así, el amor es debilidad, los sentimientos son debilidades por lo tanto yo crearé un nuevo imperio y desafiaré a los mismos dioses, manadas y reinos temblarán ante mi poder y demostraré que no necesitas atarte al amor para ser invencible. Y, aunque la amo con locura prefiero que nuestros destinos no se unan, se que estoy desafiando las reglas del bosque y de la manada RAKSHA pero yo nací para crear mis propias reglas. Soy VAEL hijo del sol, yo nunca me oculto solo cambio de dirección.
Me despierto agitada con la mano en mi pecho
-¡aahhhh!- estoy empapada de sudor, trato de recobrar la respiración, pero se me hace tan difícil. Mi camiseta la podía exprimir de tanto sudor nocturno, mi cabello está hecho un desastre, las trenzas se habían deshecho, me miró al espejo, el cabello rojo es abundante, así que es pesado y está en mi cara.
Pataleo, cansada y sin fuerzas, entró al baño de mala gana, abro la ducha, pero antes voy al lavamanos. Me miro en el espejo, mis ojos están al borde del llanto, tengo ojeras y me veo horrible y aunque trato de impedirlo las lágrimas no las puedo evitar, me sostengo del lavamanos, sorbo mi nariz y dejo de llorar de la nada
-¿de qué te vale llorar? No hará que esta maldita pesadilla desaparezca- me hablaba mi reflejo, creo que solo era producto de mi imaginación y de mi cerebro cansado. La realidad es que estaba cansada de la situación, he estado teniendo la misma pesadilla noche tras noche y ya no sé qué hacer, no tengo ningún recuerdo, solo sé que tengo una pesadilla y aunque uso medicamentos para poder evitarlas, últimamente ya no están funcionando.
En mí se mantienen ojeras profundas las cuales cubro con maquillaje, tengo el cerebro cansado y la mirada apagada me veo cansada y sobre todo llego tarde a los entrenamientos por la cual termino sancionada. Tomo un cepillo y peino, mi cabello veo unas tijeras y lo corto un poco. Sin fuerzas voy a la ducha cierro la puerta de cristal y el agua caliente me quema, pero es lo que necesito diariamente para relajarme. Tallo mi cuerpo suavemente dejando que el agua remoje todo mi cabello, pero cuando abro los ojos veo una figura frente a mí, no logro verla bien, las paredes de cristal de la regadera están cubiertas de vapor, pero alguien dibujó una carita feliz así que abro la puerta pensando que era mi hermano y no hay nadie. Salgo de la regadera para confirmar, pero solo logro resbalar y darme un golpe en el ojo, grito suavemente mientras lo cubro con mi mano, voy al espejo y me miro un moretón, se va formando, tengo piel tan blanca que pareciera como si fuera volverme transparente así que las ojeras y los moretones se me notan mucho, debido a mis entrenamientos fuertes vivo lleno de ellos. -lo que me faltaba- espeto Estoy cansada, no duermo bien hace años, sin contar los problemas que tengo fuera de esta habitación, pero esa historia la contaré más tarde. Al cabo de un rato trato de tapar el moretón, lo logro y me cambio para ir al lugar que menos quiero hoy, entrenar, no quiero juntarme con él bastante, tengo con soportar mi vida diaria.
Dicen que cuando eres un lobo la vida puede ser más fácil, pero yo no soy un lobo soy la hija de una ninfa y un beta. La puerta es tocada mientras yo estoy tratando de acomodar mi trasero en unos pantalones cómodos para entrenar, pero creo que he subido de peso, mamá dice que tengo una figura esbelta y atlética -¡YA VOY!- grito por la insistencia y con cuidado abro la puerta para que no se me vean los pechos, pues aún no me coloco la camiseta así que trato de no abrir mucho, saco un poco la cabeza
-¿sí?-
-¡hola prima!- Empujo la puerta para cerrar rápido, pero la detiene con su ante brazo, entra y me empuja a la cama bruscamente trato de taparme y correr al baño para encerrarme, pero me atrapa por la cintura camina conmigo a la puerta y cierra con seguro, me lleva de vuelta a la cama y se abalanza sobre mí subiendo mis brazos hasta mi cabeza con una mano y con la otra pone un dedo en mis labios y niega haciendo sonido de silencio.
Se lame los labios y me mira con lujuria, con su pierna abre mis piernas ejerciendo fuerza y su mano se desliza desde mis senos hasta mi vagina donde me acaricia. Y aunque trato de disimular el gemido, él se da cuenta y lo disfruta haciéndolo más fuerte hasta verme retorcerme, disfruta hacerme la vida imposible, recarga su cabeza en mi pecho -prima se te va a explotar el corazón- Dice con sarcasmo y risa usando un ridículo tono de voz. Trato de moverme, pero no puedo me molesta tanto que quiero gritar, pero sé que no me conviene y no es la primera vez que viene a mi habitación y me trata así. -para por favor déjame en pa... ¡Ahhh!- Gimo sin contenerme cuando succiona mi pecho izquierdo. Vuelve a introducirme los dedos haciendo que haga silencio de repente y abra la boca mientras mi vientre se contrae, quisiera asesinarlo, pero es todo lo contrario estoy enamorada y simplemente lo disfruto aunque me haga la dura y quiera negarme. Cuando estoy a punto de correrme después que logra su cometido se detiene provocándome un dolor horrible en mi parte inferior, suelta mis manos y se aleja de mí, se huele los dedos y después lo mete en su boca, me levanto estoy furiosa y me quedo viéndolo sin entenderlo -¿por qué me ves con esa cara? Tú fuiste quien me pidió que parara, te hice caso, sabes que siempre te obedezco- Se ríe y lamé sus dientes, sabía perfectamente lo que hacía, molestarme hasta hacerme llorar. -quiero que te largues de aquí donde no vea tu maldita cara aléjate de mí, solo me haces la vida imposible, te odio-
-bla, bla-bla-bla, ¿me odias en serio?- Da un paso adelante y yo me tiro hacia atrás cayendo al piso y trato de correr a la puerta, pero su mano se envuelve en mi largo cabello jalándome hacia él y me pega de su pecho por la espada, muerde el lóbulo de mi oreja apretando mi pecho izquierdo me voltea quedando frente al espejo y agarra mi cuello sin lastimarme
-mírate, mira como te hago gozar ¿en serio me odias? Sabes que me amas tanto como yo a ti-
La rabia entró mi y al mismo tiempo un leve temblor, no sé cómo lo hice, pero junté fuerzas y pude darle un golpe tan fuerte que logre alejarme de él -TÚ NO AMAS A NADIE, eres una bestia salvaje que solo quiere saciar sus caprichos egoístas a cambio de pisotear a los que realmente te quieren y, en cambio, pagas con maltratos o con tu actitud rebelde sin razón, déjame o recházame no lo sé, pero ya déjame en paz no quiero seguir este juego, puedes buscar la mujer que quieras y yo hacer mi vida con algu...-
Me interrumpió lanzándome un beso al aire dio pasos hacia atrás y se sentó en la ventana, me señala con su dedo y su rostro cambia -eres mía para siempre Lass, no importa cuanto supliques jamás serás para otro porque cuando otro intente robar lo que es mío te enviaré su cabeza de regalo en una cajita feliz con una sonrisa como la que dibuje en la regadera- Me mira con una sonrisa de espanto y se lanza hacia atrás me asusto y corro hacia la ventana estábamos en un cuarto piso al mirar hacia abajo estaba de pies me saluda agitando la mano y me señaló que me iba a esperar no quería ir con él me lancé sobre la cama negando y me removí de la rabia pateando todo -maldito infeliz! ¿Fuiste tú quien estaba en mi baño como lo haces? ¿Cómo logras hacer cosas que nadie más puede hacer?-
Antes de irme, termino lo que él no quiso terminar, pues no soportaba la sensación que sentía, así que bajo mi pantalón y me toco mientras pienso en él hasta gemir con la almohada en mi cara. Vael era extraño, causaba miedo, no lo podía negar, hacía cosas que no podía entender, pero que solo yo sabía.
Valeria santo; es una abogada ética, profesional con valores morales y principios de honestidad, pero su mundo cambió cuando conoció a Alessio Di Carlo. Un mafioso que se esconde bajo la máscara de empresario. Negocios ilícitos y una serie de crímenes acompañan a Alessio Di Carlo, quien se enamora perdidamente de la firmeza y honestidad de Valeria. ¿Dejará su vida profesional con tal de sumergirse en una historia de amor y pasión prohibida? ¿Ella podrá soportar perderlo todo por amor? ¿Él dejaría todo atrás por amor a ella?
Segundo libro, continuación de: Bajo el posesivo alfa. ¿Que pasará cuando Akira y Arturo tengan que enfrentar las adversidades de la vida y darse cuanta que tan diferentes son? ¿Podrán enfrentar el mal que los acecha nuevamente?
Un hombre rico, una madre vanidosa que hará todo por conseguir lo que quiere, una ex mentirosa y un padre que guarda un oscuro secreto. Como siempre fui a dejarla en su casa luego de una cena de negocios, un negocio que solo sabíamos ella y yo. La tensión entre ambos era más que obvia, pero ninguno de los dos se dignaba a aceptarlo, esto era un negocio y quedamos en que los sentimientos no iban incluidos en dicho trato, pero...
Lascivia. Lujuria y Deseo Las vacaciones acabaron y Rachel debe volver a su puesto como teniente en el ejército de la FEMF, encontrándose con que la central de Londres no es lo mismo. Llegó un nuevo coronel, soberbio y con una belleza que no parece humana. Hombre que no tiene ojos sino dagas de acero que la ponen entre la espada y la pared al sentirse tentada por su superior. Ella sabe que no es sano, bueno, ni correcto sencillamente porque quien incita deseos impuros es el mejor amigo de su novio; Bratt Lewis. Christopher Morgan no es solo el coronel, verdugo y dictador del ejército más importante del mundo, tambien es el terror de la mafia italiana y a futuro el arma que dañara al que predica ser su hermano. Él tenía claro a lo que iba, pero Rachel despertó tentaciones sexuales regidas por aquel pecado desconocido llamado lascivia, demostrando que en cuestiones de pasión no hay amigos, alianzas ni compromisos. Él esta casado y ella sueña con lo mismo, pero la tentación desencadenará entre ellos un torbellino de pasiones, lujurias y deseos que solo viven aquellos que se hacen llamar amantes. "Sus actitudes son las de un desalmado sin sentimientos, pero su físico... Joder, su físico me humedece las bragas." Mafias, ejércitos secretos, infieles, adicciones y engaños. ¿Complicado? No, complicado es convivir con la tentación hecha hombre.
Se rumoreaba que Fernanda, recién vuelta con su familia, no era más que una violenta pueblerina. Pero Fernanda se limitaba a esbozar una sonrisa despreciativa. Otro rumor sugería que Cristian, normalmente racional, había perdido el juicio, locamente enamorado de Fernanda. Esto la frustró. Podía tolerar los cotilleos sobre sí misma, ¡pero calumniar a su amado era pasarse de la raya! Poco a poco, a medida que salían a la luz las múltiples identidades de Fernanda como célebre diseñadora, experta jugadora, reconocida pintora y exitosa magnate de los negocios, todos se daban cuenta de que eran ellos quienes habían sido engañados.
Madisyn se quedó de piedra al descubrir que no era hija biológica de sus padres. Luego la verdadera hija de esa familia le tendió una trampa, haciendo que la echaran de casa y se convirtiera en el hazmerreír de todos. Creyendo que era hija de campesinos, Madisyn se sorprendió al descubrir que su verdadero padre era el hombre más rico de la ciudad y que sus hermanos eran figuras de renombre en sus respectivos campos. Todos la colmaron de amor, solo para enterarse de que Madisyn tenía un próspero negocio propio. "¡Deja de molestarme!", dijo su exnovio. "Mi corazón solo pertenece a Jenna". "¿Quién te crees que eres? ¿Mi mujer siente algo por ti?", reclamó un misterioso magnate.
Mi familia era pobre y tenía que trabajar medio tiempo todos los días solo para pagar las cuentas y estudiar en la universidad. Fue entonces cuando la conocí, la chica bonita de mi clase con la que todos los chicos soñaban salir. Era muy consciente de que ella era demasiado buena para mí. De todos modos, reuniendo todo mi coraje, le dije que me había enamorado de ella. Para mi sorpresa, accedió a ser mi novia. Me dijo, con la sonrisa más bonita que he visto en mi vida, que quería que el primer regalo que le diera fuera el último iPhone de gama alta. Un mes después, mi arduo trabajo finalmente valió la pena. Pude comprar lo que ella quisiera. Sin embargo, la pillé en el vestuario besando al capitán del equipo de baloncesto. Incluso se burló despiadadamente de mis defectos. Para colmo, el tipo con el que me engañó me dio un puñetazo en la cara. La desesperación se apoderó de mí, pero no pude hacer nada más que tirarme en el suelo y dejar que pisotearan mi orgullo. Cuando nadie lo esperaba, mi padre me llamó de repente y mi vida cambió. Resulta que soy el hijo de un multimillonario.
Amar y ser amada es lo que toda mujer sueña. Sin embargo, lo único que Debbie quería era el divorcio. Llevaba tres años casada con Carlos, un joven multimillonario a quien ni siquiera había visto la cara. Cuando por fin decidió poner fin a su irónico matrimonio e ir en busca de la felicidad verdadera, apareció su supuesto marido y le pidió que lo intentaran de nuevo. A partir de entonces, Carlos se sentía increíblemente atraído por el espíritu libre y salvaje de Debbie y se enamoró de ella. Él comenzaba a mimarla. Poco a poco, lo que había entre ellos se iba a convirtiéndose en una atracción irrefrenable. Esto es una extraordinaria historia de amor donde descubrirá que, a veces, el amor no está muy lejos de cada uno de nosotros.
Stella Richard se casó con Rene Kingston en lugar de su hermana Sophia por algunas razones. Pero desde el principio, ella sabe que su matrimonio era solo un contrato por tiempo límite y una vez que se cumplió el tiempo, ella tenía que irse. Para RK, este matrimonio fue solo una carga, pero para ella fue un regalo de Dios. Porque RK era el hombre al que había amado toda su juventud... Entonces, mientras tanto de su matrimonio, Stella hizo todo lo posible para que este matrimonio funcionara. Pero el día que descubrió que estaba embarazada, su esposo le dio el papel de divorcio y le dijo... "No quiero a este niño. No olvides abortar". Estas palabras salen de su boca, como una bomba para Stella, y cambiaron su vida... Ella firmó su nombre en el papel de divorcio y salió de la casa... Porque ella no quiere estar con un hombre tan frío... Seis años después... RK compró la empresa en la que trabajaba Stella. Pero Stella hizo todo lo posible por no tener nada que ver con él... Porque ella tenía un hijo y no quería que él se enterara de él... Pero un día, cuando Stella recogió a su hijo de la escuela, él la vio... RK, "¿Cómo te atreves a tener un hijo con otro hombre?" Stella, "No creo que tenga nada que ver contigo". RK estaba a punto de decir más cuando su mirada se posó en el niño a su lado... Su rostro se veía igual que cuando era joven...