Layla llevaba una vida normal en Copenhague, Dinamarca. En la fiesta de cumpleaños de su hermano Tony, conoce a Leo. Con este encuentro, la leyenda comenzó a tomar su curso. Ella creía desde pequeña en los elfos y los trolls, pero ¿vampiros y hombres lobo? Casi que imposible. Una poderosa leyenda y un amor por quien menos se lo espera, llevará a Layla a dejar atrás su pasado en Dinamarca y empezar de nuevo en la Patagonia, Argentina. Ella oculta hábilmente que su gran amor pertenece a un hombre lobo. Tras un último viaje a Dinamarca, su vida vuelve a cambiar. Es secuestrada a un mundo en el que su alma amenaza con perderse. Casi pierde la cabeza, olvida el tiempo y el espacio. No se sabe si su antiguo amor por el hombre lobo sigue existiendo. ¿Podrá salvarse su alma?
El tiempo que pasé en Ginebra fue un tiempo muy emocionante y del que aprendí lo impensable.
Tuve mucha suerte de mudarme a una comunidad mixta de pisos compartidos. Allí estaba Franco, el chico de Lucerna que estaba haciendo un viaje de estudios de idiomas. Luego estaba Mina, que también vino de Copenhague, así como yo, para un curso de idiomas. Era el tipo de chica que siempre la veías de buen humor y que traía a casa un novio nuevo "casi" cada mes. Siempre estaba sonriendo y nunca se dejaba abatir, aunque las circunstancias fueran adversas. El idioma no era realmente un problema para ella, se le daba muy bien.
Luego estaba Timmy Richardson, también de Copenhague. Se formó como periodista en una buena revista de Ginebra. También hizo su formación ahí para mejorar sus conocimientos de idiomas. ¡El periodismo era realmente lo suyo! Cuando quería saber algo, podía acorralarte tan hábilmente con sus preguntas que no te dabas cuenta de lo que le decías, y cuando lo hacías, ya era demasiado tarde. Le habías desembuchado todo, todito. Todos sabíamos que el mundo estaba abierto para él después del entrenamiento, si así lo quisiera.
Timmy y yo éramos "casi" inseparables. Hubo un tiempo en el que le hubiera gustado tenerme como novia, pero realmente no me di cuenta, el despiste mío es de niveles insospechados. Estaba ocupada con Alejandro en ese momento.
Alejandro, alto, hombros anchos, pelo negro y ojos azul acero y, por desgracia, sólo existía él para mí como compañero en la cama. Pero el amor es ciego y por eso me atormenté durante un tiempo con el apuesto latino. No era realmente tan especial en la intimidad. Incluso allí estaba, ¿cómo debería describirlo?... como una tabla de tieso y rígido, es probablemente la mejor manera de decirlo. Todo en él era metódico y cuadrado. En algún momento, esta historia también llegaría a su fin. ¡Hurra!
Cuando llegó el momento de tomar conciencia de mi Timmy, ya era demasiado tarde. Así que, seguimos siendo buenos amigos, de esos amigos que sabes que estarán pase lo que pase de por vida. Cuando había un problema, nos ayudábamos mutuamente. Éramos uña y carne, por así decirlo.
Timmy es de estatura media, tiene ojos marrones, pelo rubio y una figura atlética. Una para morder por todos lados. Quería una verdadera relación apasionada con todos los detalles, me confesó. En realidad, era el hombre con el que había que casarse, que también quería formar una familia más adelante. En fin, el novio ideal. Ése con el que seguramente cualquier suegra estaría sumamente encantada.
Pero también era lo suficientemente realista como para saber que tenía que tener una carrera primero para poder concentrarse en una familia después. Siempre decía: -Primero la carrera, luego el dinero y el tiempo para la familia llegarán solos.
Yo, antes de comprometerme, quiero viajar un poco, vivir y conocer, ¡no es que le esté huyendo al matrimonio! Según descubrí, los padres de Timmy se habían divorciado por esa misma razón, por no vivir a tope y aparte de los suegros, eso me demostró una vez más, la suerte que tuve con mis padres.
No obstante, Timmy tampoco estuvo soltero por mucho tiempo. ¡Al menos no tanto como para dejar de disfrutar y vivir antes a lo grande! Pero tal vez la adecuada no estaba todavía allí.
He tenido mi tanda de relaciones, pero la "definitiva" tampoco estuvo nunca ahí. Incluso Alan, con sus hermosos labios carnosos, su pelo rubio semilargo y sus ojos azules y, en realidad, el yerno perfecto, que incluso tuvo un compromiso de seis meses conmigo, no llegó a ser nada de lo que pensaba. ¡Qué historia! Porque un día en una discoteca, en Copenhague, "conocimos" juntos al inteligente Richard.
Pensé que era el típico simpático buscavidas con mucho fuego en el trasero. Sólo un chico hispano-italiano. Sus ojos eran increíbles, un marrón tan bonito, casi caramelo, con largas pestañas. Todas las mujeres estaban celosas de sus pestañas. Fue aceptado tan rápidamente en nuestro círculo de amigos, así como también casi en cuestión de nada, resultó ser el gran, gran amor de mi perfecto Alan.
Sí, qué puedo decir, me decepcionó. No obstante, fuera lo correcto o no, había hecho otro amigo. Quizás fue gracias a mi colorida educación que lo acepté así. O el simple hecho de que, las señales de Alan siempre habían estado allí antes y yo, no quise admitirlas. Porque cuando pasaba por delante de mí en calzoncillos y movía el trasero de esa manera, prácticamente siempre ponía los ojos en blanco. Me molestaba mucho esa forma de caminar; ¡mezclada con un poco de marcha masculina y swing femenino!
Además, tenía a Timmy para atraparme cuando las cosas no iban bien y me estrellaba contra el suelo a toda velocidad. A veces me preguntaba si él también era gay. Pero no resultó así.
Un día decidimos ir a la Expo de Automóviles de Ginebra, pero ya estábamos viviendo de nuevo en Copenhague. Planeamos pasar la noche allí y rememoramos nuestro tiempo de aprendizaje. Aquella noche, ambos debimos beber demasiado y él quedó tan prendado de mi... como siempre dice, bien proporcionado cuerpo (y yo de él en mi merecido estupor de borrachera) que acabamos juntos en la cama. Recuerdo que todo en él era suave. Sus besos, sus labios. Realmente, te puedes fundir total y fácilmente con él.
-Estar contigo es algo tan... tan... ¿diferente? -balbuceaba mientras él me besaba el cuello de una forma muy tierna.
-Eres una mujer maravillosa Lay, me encanta este momento que paso a tu lado, aunque no sé si es debido o no. -repetía Timmy
Su tacto también era suave y delicado. Se sintió muy agradable, como si fuera lo más natural del mundo meterse en la cama con un colega tan rápidamente. Fue una noche sumamente hermosa. Una gran sorpresa para mí. Pero bueno, eso fue todo.
Después de esta bellísima experiencia, los dos estábamos un poco cohibidos, y el viaje en coche de vuelta a Copenhague fue muy tranquilo. No pude conseguir hablar nada ese día. Tenía miedo de perder a mi amigo, no sabía qué pensar. Por la noche, decidí ir a casa con él. Vaya, me sentí bastante mareada y con dolor en el estómago. En realidad, me daba un poco de vergüenza volver a hablar de lo que había pasado.
Se podría haber descrito como una aventura de una noche y olvidarse de ella. Pero la amistad se resentiría, y yo no quería eso. Timmy era demasiado importante para mí para hacer eso.
Así que fui y llamé a la puerta. Por supuesto, me invitó a entrar y mantuvimos una larga conversación. Una buena y esclarecedora conversación. Y tuve la suerte que mi Timmy sentía lo mismo que yo. Ambos sabíamos que no nos queríamos como deberíamos para llegar a ser una pareja.
Así que nos tomamos esa noche como algo muy especial y continuamos siendo los mejores amigos el uno para el otro. Nos despedimos con un abrazo y me soltó un "Cariño, te quiero", yo sonreí y respondí: -Sí, yo también te quiero.
De todos modos, los dos estábamos solos, así que no le debíamos dar cuentas a nadie, pero fue bueno aclararlo después de todo.
De hecho, luego de esta experiencia estábamos aún más unidos que antes. Nos unió aún más, por así decirlo. Definitivamente no teníamos grandes secretos entre nosotros. Nos queríamos a nuestra manera. De vuelta a Copenhague, me quedé a vivir allí, una de las ciudades más bonitas de Europa.
Sarah era una niña dulce, extrovertida y muy feliz, sin embargo por las noches, extrañas pesadillas le arrebataban el sueño, causándole angustia y temor. Lo que todos creían que solo eran malos sueños, en realidad, eran visiones que le mostraban a la pequeña, su desconcertante e inesperado futuro. Una noche de tormenta cuando retornaba de vacaciones con su familia, un trágico accidente, les arrebató la vida a los padres, siendo adoptada junto con su hermano Ian, por una manada de lobos, haciéndole recordar a la pequeña, aquellas visiones que tenía. Se esperaba que al transcurrir el tiempo cuando Lyam Black, el primogénito del Rey Alpha, cumpliera la mayoría de edad, contrajera matrimonio con Sarah y así, cumplir la profecía, sin embargo, los planes de este, se ven truncados cuando la joven es secuestrada por una manada enemiga, los cuales, tiempo después dan muerte al viejo Rey. A raíz de la desaparición del Alpha, Lyam tuvo que liderar la manada desde muy niño, y de la misma forma, debía hallar inmediatamente a su Luna, pues, todos corrían un peligro inminente, pero solo se llevaba grandes desilusiones que lo arrastraron a ser un Rey incrédulo y despiadado. Aún así, en el fondo de su corazón, tenía viva la esperanza de hallar a esa mate que tanto ansiaba, no solo para liderar su reino y salvar a su gremio, sino para cumplir el último deseo de su padre: "Unirse eternamente a su Luna". Un Reino y un Rey, no son nada sin su Reina... ¿Cuál será el destino del Rey Alpha y su manada? ¿Encontrará en Sarah a la luna que tanto ansía su corazón? ¿Cuántas pruebas tendrá que pasar para llegar a ella? Una historia desbordante de romanticismo, fantasía, y emoción que te llevará a descubrirla, y a vivirla en carne propia.
La historia gira en torno al amor de los protagonistas, dos Alfas guerreros, que además de ser gemelos idénticos, ambos son sumamente altivos y dominantes; y una joven Omega virgen, Freya, a punto de entrar en su período de celo. Los tres se conocen en circunstancias muy adversas y desfavorables para que surja la amistad y mucho menos el amor. Al contrario, lo que hay en el corazón de la hermosa Omega, quien vio con sus propios ojos como los suyos eran masacrados sin piedad por los soberbios Alfas, es puro rencor y odio. Sin embargo, tras varios sucesos, algunos forzados, otros no, nace un sentimiento muy fuerte que bien podría o abrir el camino hacia el amor verdadero o encender la llama del odio más vengativo. ¿Cuál de los dos gemelos Alfas será el dueño absoluto del corazón de Freya? ¿Seguirán siendo tan unidos como siempre o su pasión por ella los cegarán al punto del enfrentamiento?
Con sentimientos encontrados, Kilye Andersen acude encubierta al casting de la nueva temporada de "La supermodelo" para investigar el caso de una chica desaparecida entre bastidores; evento ocurrido un año atrás y del que aún, no se sabía qué había pasado pasado exactamente allí. Antes de que se de cuenta, tropieza con un turbulento torbellino de glamour, ambición y negocios turbios. Cuando, para colmo, se enamora y tiene que pasar de una mentira a otra, su vida parece desmoronarse por completo.
Rena se acostó con Waylen una noche cuando estaba borracha. Y como ella necesitaba su ayuda mientras él se sentía atraído por su belleza juvenil, lo que se suponía que sería una aventura de una noche se convirtió en algo más. Todo iba bien hasta que Rena descubrió que el corazón de Waylen pertenecía a otra mujer. Cuando esa mujer regresó, dejó de volver a casa, dejándola sola por muchas noches. Finalmente, un día, la pobre chica recibió un cheque y unas palabras de despedida. Para sorpresa de Waylen, Rena solo sonrió y dijo: "Fue divertido mientras estuvimos juntos, Waylen. Pero espero que no nos volvamos a ver nunca más. Que tengas una buena vida". Sin embargo, por voluntad del destino, los dos se volvieron a encontrar. Al ver que Rena tenía a otro hombre a su lado, los ojos de Waylen ardieron de celos y gritó: "¿Cómo diablos lograste seguir adelante? ¡Pensé que solo me amabas a mí!". "¡Es pasado!", Rena se burló, "hay demasiados hombres en este mundo, Waylen. Además, tú fuiste quien pidió la ruptura. Ahora, si quieres salir conmigo, tendrás que hacer cola". Al día siguiente, Rena recibió un anillo de diamantes y un mensaje del banco de que alguien había transferido miles de millones a su cuenta. Waylen apareció, se arrodilló frente a ella y dijo: "¿Puedo saltarme la fila, Rena? Todavía te quiero".
En el continente de Lothlann, el talento en artes marciales era el elemento más importante para ganarse el respeto de los cultivadores. Darren Chu, un chico mediocre en artes marciales, era un perdedor en la vista de los demás. Pero todo cambió cuando una bola de fuego cayó del cielo y lo golpeó en la cabeza. El chico sobrevivió ganando a la muerte. Empoderado con la capacidad de asimilar el talento de otras criaturas, ahora lo que Darren buscaba era superarse y vengarse de aquellos que habían abusado de su familia. "Un día se arrodillarán frente a mí", juró el futuro guerrero de las artes marciales.
Hace dos años, Nina se casó con un hombre que nunca había conocido. Ella no sabía su nombre ni su edad; no sabía nada sobre este hombre con la que estaba casada. Su matrimonio no era más que un contrato con condiciones, y una de las cláusulas era que no debía acostarse con otro hombre. Nina perdió su virginidad con un extraño cuando llamó a la puerta equivocada una noche. Con la compensación que tuvo que pagar, decidió redactar un acuerdo de divorcio por su cuenta. Cuando finalmente se encontró con su esposo para entregarle los papeles, ¡se sorprendió al descubrir que su esposo no era otro que el hombre con el que lo había "engañado"!
Fue un gran día para Camilla. Estaba ansiosa por casarse con su guapo esposo. Desafortunadamente, él nunca apareció durante toda la ceremonia. Se convirtió en el hazmerreír de todos los invitados. En un ataque de rabia, salió con un extraño en su noche de bodas. Se suponía que iba a ser una aventura de una noche. Pero para su sorpresa, el hombre se negó a superarla. La persiguió incesantemente como si le hubiera robado el corazón esa noche. Camilla no sabía qué hacer. ¿Debería darle una oportunidad? ¿O simplemente mantenerse alejada de los hombres?
¿Entregarlo todo por amor y luego sufrir por ello? Parece un tema bastante trillado, pero en realidad es la más pura de las realidades. Los errores, en su mayoría, salen caros; el karma siempre llega en el momento menos esperado. Un día estás en la cima y al otro, en lo más bajo de las profundidades. Larissa, una joven trabajadora y dedicada, se enamora del heredero de la familia para la que trabaja, Logan Walker. Ambos inician una intensa relación a pesar de la oposición de su familia. Sin embargo, un malentendido con el mejor amigo de Larissa lleva a Logan a alejarse de ella e iniciar una relación con otra mujer. Larissa, devastada, continúa trabajando en la mansión, ocultando un sorpresivo embarazo de Logan. Finalmente, no soporta más verlo con otra mujer y decide escapar y ocultarse de todos. ¿Vale la pena todo lo que se sufre por amor? ¿Abandonarlo todo y dejarlo por nuestra propia paz mental es siempre la decisión correcta? El dolor que causa dejar todo lo que conoces, lo que amaste y lo que viviste por un error que trajo consigo una nueva persona en la vida de tu amado, te destruye poco a poco. Entonces, ¿por qué esperamos el tiempo menos indicado para marcharnos e intentar reconstruir nuestras vidas? Es bien sabido que el pasado siempre nos alcanza. Así esté bien oculto, llega para volver todo patas arriba, para llenarlo de nuevo de dolor, desamor y amargos momentos que se quisieran olvidar. Ella lo sabía, pero no tuvo más opción que volver y encararlo. ¿Él? Después de seis años, se dará cuenta de que el pasado no puede ser borrado tan fácilmente y que la vida siempre da sorpresas que no se pueden ocultar..., convirtiéndose en algo indeleble.
Él es el director del hospital más grande de Shine Empire. Ella es la hija del director del hospital Chengyang. Cuando el frío, despiadado y orgulloso Álvaro Gu se tope con la traviesa, simpática e impulsiva Ángela Si. ¿Qué química saldrá entre ellos?