/0/11163/coverbig.jpg?v=cd139b9580a41b357ae402a923cbcf19)
Leana se lanza decidida una noche para conocer al hombre que tanto le gustaba, Polo, pero la experiencia no sale como ella se lo esperaba y sale corriendo espantada del lugar. Cuatro años más tarde a punto de graduarse, el destino le regala una oportunidad más cruzando sus caminos nuevamente solo para descubrir que él es el CEO de la gran empresa en la que ella siempre soñó trabajar y en la que comenzará su pasantía. Traumada por lo vivido con su madre, Leana se decide firmemente a no amar a ningún hombre pero ¿podrá lograrlo cuando su jefe saque su lado más pervertido? ¿Podrá una estudiante salir con uno de los CEOs más importantes de la ciudad? ¿Qué pasará cuando él quiera robar su inocencia? No todo es tan hermoso como parece y todos tienen secretos...
- ¡Eres un cerdo! -fue lo primero que le dijo Leana en cuanto vio a Joan besándose en ese baño con aquella chica- ¡¿Quién te crees que soy?! Un juguete con el que entretenerte a tu antojo ¿Pensaste que nunca me iba a enterar de esto? –las lágrimas comenzaron a agruparse en sus ojos, no lo podía evitar, ¡tenía tanto coraje! -Eres un cínico y un mentiroso, si andas haciendo lo que te da la gana para qué tanta insistencia en conocerme, ¿qué soy? ¿una apuesta estúpida con tus amigos a ver si logras sonsacar a la tonta que se pasa el tiempo estudiando? Pues para que te vayas enterando, no soy ningu
na tonta y tú eres un gilipollas, asco me das
- Leana, por favor, esto tiene una explicación –por alguna razón ella notó en su rostro una mezcla de arrepentimiento, vergüenza y algo de dolor, pero no, debía ser parte de su actuación para que le siguiera creyendo su cuento y poder continuar con su estúpido juego.
No podía creer que después que lo había atrapado "in fraganti" todavía tuviera el descaro de darle un típico "esto no es lo que parece" como excusa, en ese momento ya las lágrimas caían por sus mejillas, se seguía riendo de ella, no lo podía creer, esa idea solo la encolerizó más y le atinó una bofetada para luego decirle:
- No me busques, no quiero verte más en mi vida, no te cruces conmigo en un pasillo, en una fiesta, en algún aula, haz como si yo no existiera porque no respondo por mí. ¡Ahhhh! Y haz las pruebas para unirte al club de teatro, la actuación se te da genial, imbécil.
Giró su espalda y se fue, se sintió tan orgullosa de sí misma, pudo reunir valor para decirle todo lo que quería, lo que se merecía, no se dejó socavar por ese capullo. Eso sí, estaba fatal, era la primera vez que Leana se entregaba así a un chico, la primera vez que se permitía disfrutar un poco solo para terminar en desgracia. Solo quería estar sola en su cuarto y llorar descontroladamente sin que nadie la viera.
Esa era la primera vez que Leana faltaba a clases había tenido un trayecto espectacular en su carrera y estaba en su último año, nunca pensó que un chico iba a ser la razón de una ausencia.
Quizás por eso su madre nunca cedió al romanticismo con algún hombre, quizás su padre la dañó de una manera irreparable y para protegerse se armó de esa coraza tan fría. A lo mejor no era tan mala como Leana pensaba, solo que la vida no fue justa con ella.
La siguiente semana fue catastrófica, se sentía desganada, decepcionada y, le había dejado bien claro a Víctor que no quería que tuviera ningún tipo de contacto con ella, pero de alguna manera esperaba que tratara de disculparse, ella merecía una explicación. É había sido el insistente, la buscó miles de veces para salir con ella, en un inicio ella no quería ni hablarle.
Joan había sido el que había metido la pata, era su deber buscarla de nuevo, fue muy fácil hacerlo cuando todo eran mariposas y arcoíris, pero ahora que la situación era difícil él se acobardaba, no era capaz de ofrecer unas disculpas. A pesar de eso, él no aparecía por ningún lado, nadie sabía nada de él y Leana tampoco le quería preguntar Sara, su mejor amiga, no quería que pensara que le seguía interesando.
Lo único que la animaba un poco era el curso que comenzaba justo ese día como parte de la carrera, la universidad había contratado a un empresario con mucha experiencia en márquetin y ventas de libro, algo muy necesario para Leana ya que tenía pensado abrir mi propio negocio en un futuro, una editorial así que, a pesar de todo, se sentía más animada, la literatura y el estudio fue el refugio que encontró para mantenerse distraída y no pensar en lo que había sucedido.
Esa mañana se arregló un poco mejor, su cara tenía buena pinta según ella, no tenía ni idea de lo hermosa que era, alisó su cabello, se puse mis jeans preferidos y un top rojo de tirantes cruzados en la espalda de modo que la mitad de esta quedaba al descubierto, un par de converse y estaba lista.
- Hoy te noto mejor semblante –le comentó Sara de camino al seminario, ella había tratado no preguntarle mucho del tema de Joan en la semana pasada para no meter el dedo en la galla.
- Sí, estoy más animada, tengo muchos deseos de comenzar el curso de ventas y márquetin de libros, siento que me va a ser imprescindible para mi desempeño laboral, además, recuerda que nos informaron que según nuestras calificaciones el encargado de dar el discurso hoy elegiría a algún estudiante para una pasantía.
- Uyyy como está la profesional –dijo sin evitar que se le escapara una risita.
- Como está la chistocita hoy –le respondió Leana sonriendo también.
- ¿Sabes? Me alegro verte un poco más contenta, aunque sea por algo de estudio –rió Sara nuevamente- el semblante triste no te pega para nada –y le dio un abrazo antes de entrar al aula.
Y vaya que Sara tenía razón, hasta la misma Leana se sentía con unas vibras diferentes, no quería convertirse en una de esas mujeres que se deprimen y se quedan en casa todo el día con el pijama puesto y comiendo chocolate debido a un hombre, no, eso sí no se lo iba a permitir jamás. Ya había tenido una semana para asimilar lo que había pasado y llorar todo lo que había querido, eso era suficiente, era hora de brillar de nuevo.
- ¿Quién será el famoso empresario que tanto revuelo han armado? –le preguntó Sara -se habían pasado toda la semana anterior recordándoles a los estudiantes ese día, promocionándolo y diciendo que era una oportunidad única que el señor empresario le había ofrecido de buena voluntad a la universidad ya que iba a ofrecer el curso de modo gratuito y por voluntad propia.
- No sé –le respondió Leana encogiéndose de hombros- supongo que lo averiguaremos ahora.
Todavía faltaban cinco minutos para que comenzara el seminario y todos a su alrededor estaban tan intrigados como ellas, para cualquier lado que miraran, se escuchaba una conversación sobre lo mismo y haciendo la pregunta del millón ¿quién será?
Las luces se opacaron y el proyector se iluminó en la parte de al frente del anfiteatro, Leana se sentaba desde siempre en la primera fila, así que tenía la mejor vista del salón. En la pantalla comenzó a reproducirse un video, una promoción de todo el trabajo que se tenía que hacer para lograr que un libro se convirtiera en best-seller, las propagandas, los panfletos, el trabajo de varios editores todo de mano de la gran empresa Stewar´s Inc, súper reconocida por la cantidad de campos en la que se desarrolla desde hace años y sobre todo, la cantidad de obras benéficas que ha organizado.
Leana la conocía, hacía unos meses había solicitado una pasantía ahí para sus prácticas de ese semestre, así que estaba más que emocionada al darse cuenta que la empresa estaba ahí, más posibilidades tenía entonces de que la aceptaran, solo tenía que estar a la altura.
Cuando el video acabó, salió desde detrás de la pantalla un hombre, no se le podía ver el rostro debido a que el foco del proyector todavía estaba prendido, pero era alguien muy alto de pecho ancho, fuerte, eso se notaba hasta por encima del traje negro que llevaba puesto que lo hacía ver extremadamente elegante, su porte era algo increíble. Se apagó el reflector y Leana no pudo creer lo que sus ojos estaban viendo, o, mejor dicho, a quien sus ojos estaban viendo.
En ese instante se quedó congelada, su corazón no podía latir más rápido, de lo contrario le daría un infarto. Era él, era el chico por el que iba a ese parque de su ciudad todos los viernes hace casi cinco años atrás ¡Era él!...
Rebecca Martin es la asistenta del joven CEO, Liam Edwards, uno de los más prometedores millonarios de Chicago. Para Rebecca, lidiar con su jefe arrogante, creído y desesperadamente apuesto, no es una tarea fácil. Harta de todo, decide renunciar a su trabajo justo el día en el que una de las ex de su jefe, Margot, se aparece en la oficina con su supuesta hija, la pequeña Maya quién rápidamente estrecha lazos con Rebecca. La pequeña impedirá que la asistente renuncie logrando que su padre y ella comiencen a acercarse cada vez más, pero las cosas no serán nada fáciles, Margot hará todo lo posible por arruinar la vida de ambos. ¿Logrará Rebecca descubrir el amor verdadero? ¿Podrá Maya afianzar su relación con Liam? ¿Qué estará Margot dispuesta a hacer para acabar con su ex? ¿Podrá el magnate más arrogante de Chicago dejar su pasado atrás?
Esta historia es la secuela de "La madre del hijo del CEO despiadado". En un inicio se narró cómo los caminos de Ángela y Archer se cruzaron una noche de lujuria, noche en la cual concibieron un bebé para luego nunca volver a verse hasta que ella supo la noticia y él no creyó su palabra. Ángela prometió vengarse y lo hizo justo en el cumpleaños de Archer, exponiéndolo frente a camara de televisión y medios de comunicación. Esta segunda parte también estará movida por el sentimiento de venganza pero, esta vez hay un cambio de roles, será Archer quién la buscará y quien querrá acabar con Ángela a la misma vez que se convierte en un excelente padre. ¿Podrá hacerlo? ¿Será capaz de destruir a la mujer que ama con locura, a la madre de su hijo? Descúbrelo en esta última parte.
Desde que tiene conciencia, Ana Reegan ha querido formar una hermosa familia pero sus planes no han salido como los esperaba. Los 30 ya se acercan y ella siente, cada vez más, la presión personal y social de convertirse en madre. La forma de hacerlo la tenía muy clara, hasta que, el día de su cumpleaños, en un bar, decide contarle a Alejandro Miller, su mejor amigo, todo lo que ha sentido por él desde el día en que se conocieron. ¿Aceptará Alejandro su propuesta? ¿Será él todo lo que ella esperaba o resultará que nunca llegó a conocerlo bien? ¿Podrá Ana cumplir su mayor sueño?.
Ángela es una chica introvertida la cual decide una noche irse de fiesta con su mejor amiga a un club, lo que no sabía es que esa noche conocería a Archer Spencer, el millonario que cambiaría su vida para siempre en una noche de lujuria. Luego de tres meses, ella descubre que está embarazada y grande es su sorpresa cuando se entera de que Archer no se hará responsable por el bebé viéndose obligada a ldesentendidouchar por sus propios recursos, pero, el destino tan inesperado como suele ser, la lleva un año y medio después a trabajar en la empresa de Archer sin ella saberlo. ¿Qué pasará? ¿La reconocerá Archer? ¿Asumirá él la responsabilidad de padre o se hará el ?
La vida de Paola cambia de la noche a la mañana cuando una compañera de su facultad le propone fingir ser la pareja de un millonario dueño de unas de las corporaciones más famosas del país, ella se ve obligada a aceptar dicha oferta a partir de un asalto a su padre en el que dicho millonario estuvo relacionado. Las ansias de investigar más sobre ello, la llevarán, sin darse cuenta, a que sus sentimientos por él salgan a flote. Una simple chica estudiante se convertirá en alguien conocida por todos de la noche a la mañana debido a una farsa. ¿Podrá con todo eso? ¿Será capaz de dejar los sentimientos a un lado? ¿Será este millonario el responsable de que su padre haya sido perseguido y disparado?
Nerea Jones es una chica acabada de graduar de la universidad que sale al mundo dispuesta a abrirse camino en el mundo empresarial, pero, esto no es tan fácil como ella lo cree. Su situación económica hace que se vea obligada a aceptar trabajar de niñera para uno de los CEOS más importantes, temidos y guapos de Seattle, Alex Black. Su vida se entrelazará con la de él conviviendo en la misma casa. Ella no tiene idea de que le tocará vivir un infierno a manos de este chico prepotente y egoísta cuando los sentimientos comiencen a tocar la puerta de su corazón. Ser profesional no va resultar tan sencillo como ella se espera.
Eda Calloway y Christopher Davenport, se han unido en matrimonio por acuerdos familiares, claro que ninguno de los involucrados alberga sentimientos hacía el otro, es más Christopher siempre estuvo enamorado de su primer amor, Patricia Grenville, pero el amor no era más fuerte que los Imperios y los intereses familiares, aquello obliga a Christopher a tomar distancia de su gran amor. Patricia viaja a los Estados Unidos mientras que los Davenport cortan todo lazo y toda conexión de los enamorados, es así que Christopher empieza a sumergirse cada vez más en el mundo Empresarial hasta coronarse como uno de Empresarios más influyentes de Inglaterra, Escocia entre otros Países, hasta que sus familiares encuentran la candidata perfecta para su esposa.Eda Calloway, es el epítome de la dulzura y la fragilidad, una joven que irradia pureza y encanto con cada paso que da. Su inocencia, reflejada en su mirada clara y su disposición amable, es lo que la hace destacar en un mundo lleno de ambición y máscaras. Como heredera de la prestigiosa familia Calloway, Eda combina elegancia natural con una humildad que desarma incluso al más frío de los corazones.Los Davenport la han elegido como esposa del Gran CEO, Christopher Davenport, no solo por sus impecables conexiones familiares, sino porque Eda posee un aura especial, capaz de atravesar las murallas que Christopher ha construido a lo largo de los años. Su dulzura contrasta con el carácter frío y calculador del CEO, convirtiéndola en la pieza que equilibra y complementa su personalidad.Para la poderosa familia Davenport, Eda representa no solo una alianza estratégica entre dos linajes prominentes, sino también una esperanza de que su calor y bondad puedan suavizar el alma endurecida de Christopher, despertando en él emociones que ha mantenido enterradas durante años. Su capacidad de ver lo mejor en los demás y su inquebrantable optimismo la convierten en una figura única, destinada a marcar una diferencia en la vida del gran Davenport.
A veces el amor aparece de la manera más inesperada y en la forma de la persona menos pensada. Para Daniel, la vida a sus 40 años es una rutina entre sus tres hijos y su cargo de CEO de la empresa familiar. El fallecimiento de su esposa lo deja inmerso en la tristeza; creando, con el correr de los años, una coraza fría a su alrededor. Deanna tiene una vida normal, trabaja medio tiempo y estudia en la Universidad de Artes porque quiere lograr su sueño: cantar en la ópera. Solo le falta un año para terminar su carrera cuando su amigo Harry le pide ayuda desesperado. Una antigua regla familiar le impide casarse con su novia, la cual está embarazada. Para hacerlo, Daniel, su hermano, debe casarse primero. Para ayudarlo con su problema Daniel y Deanna acceden a fingir una relación y un matrimonio. Son tan opuestos que la atracción es inevitable. Él encuentra en ella la calidez que faltaba en su vida y Deanna el amor luego de una ruptura desastrosa. Finalmente, Daniel puede volver a tener una familia. Pero hay muchos intereses ocultos que buscan separarlos y alejarlos. El viaje es difícil, deben enfrentarse no solo a terceros que les complicaran las cosas, sino también a sus propios miedos e inseguridades. No es sencillo equilibrar 15 años de diferencia. Pero el corazón tiene razones que la misma razón nunca entenderá.
El día de su aniversario de boda, la amante de Joshua drogó a Alicia, que acabó en la cama de un desconocido. En una noche, Alicia perdió su inocencia, mientras la amante de Joshua llevaba a su hijo en el vientre. Desconsolada y humillada, Alicia pidió el divorcio, pero Joshua lo consideró una rabieta más. Cuando finalmente se separaron, ella se convirtió en una artista de renombre, admirada por todos. Consumido por el remordimiento, Joshua se acercó a su puerta con la esperanza de reconciliarse, solo para encontrarla en brazos de un poderoso magnate. "Saluda a tu cuñada", dijo este.
-Nuestro amor nos llevará a terminar como Romeo y Julieta. - ¿Juntos? - ¡No! Muertos. -Tú siempre tan romántica. -Y tú, tan estúpido. -Ya hablo doña perfecta. -Aunque te cueste reconocerlo, así que no pienso seguir perdiendo mi tiempo contigo. Me retiro antes de que se me pegue lo malo, con permiso joven Sanz. -Hasta nunca B-R-U-J-A fea. Espero que choques en tu escoba voladora y te destroces el rostro para no volverte a ver la cara de mustia amargada que tienes. -Qué tus buenos deseos se te multipliquen insecto -grito la chica al salir corriendo de la casa para tratar de llegar lo más pronto a la parada y alcanzar el último autobús que la llevaría de regreso a la Universidad de Barcelona, donde estudiaba. Esto era tan solo una pequeña pelea a la que se tenía que enfrentar cada vez que se encontraban en la residencia de la familia Sanz o donde coincidieran, en donde había sido contratada como niñera del menor de los hijos de la familia. - ¿Podrás algún día dejar tranquila a "Mi Vale"? Sigue por ese camino y me voy a asegurar que papá te quite todas las tarjetas, congelé todas tus cuentas y de pasada te ponga a trabajar para que dejes de estar molestando a mi chica. - ¡Mocoso! Nadie pregunto tu opinión, ¡Cuidado y abres la boca o me desquitaré contigo! Deberías de estar de mi lado y no de un espantapájaros como ese que no es parte de tu familia y a duras penas conoces. -Mira, quien habla, el chico más estúpido que puede existir en toda la ciudad, si no fuera por tu cara bonita, nadie se fijaría en ti. Te aseguro que en esa cabeza no hay ni gota de masa encefálica de la cual puedas presumir como ella. - ¡Basta! Lárgate a tú cuarto o voy a acabar contigo en menos de un segundo. - ¡Huy! Ya se enojó el niño bonito. Te estaré vigilando, no vuelvas a molestar a Vale. Si ella se marcha por tu culpa, me aseguraré de cumplir todo lo que te he dicho y sabes que no bromeo HER-MA-NI-TO. ¿Quién se atrevía a desafiarlo de esa manera? ¡Claro!, otro Sanz, uno que por lo menos conocía el amor y respeto a las personas sin importar su clase social o personalidad. Para este chico todas las personas eran iguales, hasta que demostraran lo contrario.
Después de tres años de matrimonio hermético, Eliana nunca había visto a su enigmático esposo hasta que le entregaron los papeles del divorcio y se enteró de que su supuesto esposo estaba cortejando a otra mujer sin importarle cuánto le costara. Ella volvió a la realidad y decidió divorciarse. A partir de entonces, Eliana dio a conocer sus diversos personajes: estimada doctora, legendaria agente secreta, hacker reconocida, célebre diseñadora, experta piloto de carreras y distinguida científica. A medida que se conocieron sus diversos talentos, su exesposo fue consumido por el remordimiento. Desesperado, suplicó: "¡Eliana, dame otra oportunidad! Todas mis propiedades, incluso mi vida, son tuyas".
Stella Richard se casó con Rene Kingston en lugar de su hermana Sophia por algunas razones. Pero desde el principio, ella sabe que su matrimonio era solo un contrato por tiempo límite y una vez que se cumplió el tiempo, ella tenía que irse. Para RK, este matrimonio fue solo una carga, pero para ella fue un regalo de Dios. Porque RK era el hombre al que había amado toda su juventud... Entonces, mientras tanto de su matrimonio, Stella hizo todo lo posible para que este matrimonio funcionara. Pero el día que descubrió que estaba embarazada, su esposo le dio el papel de divorcio y le dijo... "No quiero a este niño. No olvides abortar". Estas palabras salen de su boca, como una bomba para Stella, y cambiaron su vida... Ella firmó su nombre en el papel de divorcio y salió de la casa... Porque ella no quiere estar con un hombre tan frío... Seis años después... RK compró la empresa en la que trabajaba Stella. Pero Stella hizo todo lo posible por no tener nada que ver con él... Porque ella tenía un hijo y no quería que él se enterara de él... Pero un día, cuando Stella recogió a su hijo de la escuela, él la vio... RK, "¿Cómo te atreves a tener un hijo con otro hombre?" Stella, "No creo que tenga nada que ver contigo". RK estaba a punto de decir más cuando su mirada se posó en el niño a su lado... Su rostro se veía igual que cuando era joven...