e de ne

S MA

pasado tan extraño y rápido

s decir, estábamos todavía en un periodo de adaptación donde me acostumbraba a su orden extremo; no le gustaba nada sucio (lo que me obligaba a limpiar más de lo que lo hacía antes) y él siempre dejaba

de ada

tener una erección, la primera vez nos pareció extraño pero la segunda vez, ya supimos que algo andaba mal, así que cuando le tocó visita médica aprovechamos de preguntarle eso al doctor, y nos di

que en mi vida pasada fui una ninfómana para que a

íamos reuniones donde él también estaba presente y a toda costa lo evitaba, ni siquiera hacia contacto visual, lo cual era t

e ambos cometimos errores y que nadie debía saber lo que había ocurrido con Tim, solo era m

CO

tar ordenado, y con buenas propuestas para futuras inversiones antes de que viajáramos a

ecretaria asomándose a l

nte a la secretaria por la cintura, mi secretaria; la seño

o guiñándole un ojo─, por favor, déjanos solos, lo

ierda me hacía h

ción, como si me pidiera permiso de

rta al salir ─

ta a sus espaldas y dejando al idi

que verle la cara

lté─ No estoy para

s amargado de lo norma

é─. Si no vas a hablarme de algo de la empresa, lárgat

er para molestarme, si fuera por mí hace muchísimo tiempo que lo hubiera echado a patadas de aquí, pero mi padre lo

bonita ─comentó como si no le pe

un lapicero y comenzando a anotar cosas en mi agenda

e? ─silbó entre dientes─, no me importaría que

oficina si nos vas a hablar

nas torneadas, su buen abdomen, su rostro, su todo de ella

mi lapicero con ganas de clavárselo en el cuello─, y

, entonces la muy niña

me sacó una sonrisa interna,

cé una ceja─, y si me miraba el culo es porque puedo te

más de una vez él se acostó con mis conquistas y yo en venganza me acosté con una de sus novias con la que tenía más tiempo y supuestamen

ía mer

e la folle ─dijo con desdén y esa

antuve mi rostro sereno

─dije y forcé una sonrisa─, me gus

rmitas, evidentemente todos lo sabían, pero

sante ─refutó─, y de igual form

que él siempre me dejaba cada vez que hablamos. El muy hijo de perra notó la tensió

que vale

e veía de frente, todo un hipócrita pero conservaba su trabajo porque lo hacía bien y eso no se podía negar. Abrí el correo y me informaba que Edwin (uno de los trabajadores de esa área) estaba de vac

ponía que viajaríamos la semana siguiente y todo nuestr

os falt

ba, en una semana no íbamos a lograr que un nuevo lograra estar al tanto de cómo funcionaba todo y era un riesgo que

nu

bía estado involucrada con Deluca que era el jefe, ella sabía cómo se

e Lázaro me había dicho que me veía cuando no la veía. De igual forma me había preparado para ignorarla por lo que me hizo, pero que ella me ignorara primero me sac

estaba volviendo loco pero debía dejar de ser tan

vamente y le e

Rafael

moti C

enuncia d

ías que cubra al que s

moti

te de SPM AN

n lo que hacía, y siendo sincero, saber que viajaría con ella me daba ci

S MA

, me sentía muy cansada porque a Cesar le dio dolor en la pierna y tuve que inyectarle un medicamento, pero duró en hacer efecto y no

omodo por su yeso acomodarse o hacerlo bien... sabía que eran excusas de su parte, porque yo realmente quería intentarlo, pero no lo iba a obligar, a veces realmente pensaba que yo siempre lo quería violar o era una loca que solo p

patética y

en una importante llamada telefónica, a la vez que tecleaba en su computadora, cuando notó mi presencia me entregó unos papeles que me imaginaba eran para pasar

señor Deluca cuando finalizó su llamad

ios

y ahora todo el mundo lo sabía. Joder. Sentí como mis manos se enfriaron y casi olv

ala p

me iba a sal

s en la silla y colocando sus m

olton quiere que vayas con él a Francia

yo vay

Qu

a, esto era muchísimo

ue fuera como traductora ofi

podía hablar, sentía

lo de voz, siempre había sido mi s

erdad me hubiera

sonrisa─, se supone que te lo hará sabe

, sí e

ocionada, de repente fruncí el c

que rotarán cada semana en un parte diferente de Europa, prá

la mala

para nada una mala noticia, de hecho m

puede abrir las puertas a trabajos en distintas partes del mundo, estoy segur

ta Mi

n otro país, más en toda Europa, sentía como todas las oportunidades se abrían frente a mí, n

ue que lo

otros países

esto era importante para mí, era por lo que había estudiado todos estos años; idiomas, querí

, solo iba creando en mi mente un plan para decirle a Cesar lo de

ron y sentí que quedé pasmada al

Cu

er

jamente. No tenía escapatoria, si me iba parecería infantil y si me entraba corría el riesgo de desmay

ita

y forcé mis pies a

otón de planta baja, las puertas se cerraron y la presencia de Tim a mis espaldas se sentía cada vez más fuerte y pesad

la, eres profesional,

ue nada, a lo me

o bajo y casi pude sentir su alien

ese raro deseo que solo él era capaz de causarme con

tema de conversación, miré la luz que iluminaba los pisos que íbamos descendiendo

─d

─dijo c

acias por semejante cosa que hizo por mí, debía enfrentarlo

ábamos más cerca de lo que creí o su cuerpo en

ición su increíble y estúpida belleza me hizo recordar el por qué me le abalancé encima la primera

estás pens

n abstinencia y estar fr

vadiendo mi espacio personal, sin embargo no llegaba a tocarme, sen

ando ─comentó─, ¿ac

do d

r querer abala

e que su mero acercamiento me desestabil

gunta─, fue más de lo que esperaba ¿Cuán

tenía favoritismo, su rostro era tan pe

ada ─dijo─, ahora ¿vas a decirme

ero no pondría objeción porque re

nrojaron aún más pero intent

pagarte y no quería que me cobraras ─admití a m

spuesta, no pare

e pasó esa noche no

decir... solo tenía que fingir d

he? ─evité su mirada─

é el ascensor no

etenida─, ¿entonces sufres d

ndida, no entendía por qué a

rbilla para enfrentarlo y dije con

o sentía tan cerca que tuve que dar otro paso atrás, pero mi espalda chocó con

ncia masculina nublándome todos los sentidos, alcé la cabeza para poder mirar su rostro, él tenía esa m

podía calmar mi sed, mi mente se nubló mientras sentía como todo mi cuerp

gún pensamie

ara, el deseo crecía dentro de mí a cada segundo. Cerré los ojos y solo entreabrí mi

a burlona cuando dio un paso atrás dejándo

de

de nada Tim se acomodó lejos de mí, calmado, relajado, como si nada hubiese pasado y ahí estaba yo, com

dic

y dejó ver a las personas que esperaban subir, yo acom

ar, pero no podía creer más aún que él se hubiera

te moleste ─dijo s

r reaccionar así, dejándome llevar por mis deseos. Llegamos al estacionamiento y él

o me pareces repulsivo y feo, ni siquiera

inocho porque feo y repulsivo era tod

zando las palmas de sus manos co

ras, señor

h

e hacia su auto dejándome más confundida de lo que estaba, creí que esto n

ente no quería

entendía y no

en serio crees que r

hecha todo un remolino porque no podía e

CO

e perra de Lázaro recostado de su auto, sus brazos cruzados sobre su pecho y aunque tenía l

uponía que debía

nfadada cuando se montó al suyo, obviamente ella no me veía por mis vidrios polarizados, pero me entretenía haberla dejado

arme otra vez que la hiciera suya, quería verla así, su cuerpo con esa falda me hacía recordar lo húmeda que estaba esa noc

por hacerla caer de deseo por mí y quit