/0/13322/coverbig.jpg?v=ebf85b28d52d522bcc797a2946c9d165)
En un viaje cargado de emociones, la ambición se enfrenta a la venganza mientras los lazos familiares son puestos a prueba. En un mundo de secretos, traiciones y pasiones intensas, se busca el trono y se forja un reino. Para nuestro protagonista, conquistar y proteger a su destinada reina se convierte en su único deber en medio de esta épica lucha por el poder y el futuro.
Paris 19/11/1970
Veo en los ojos de Aria, una chispa de emoción. Mis manos, como con vida propia comienzan a recorrer cada palmo de su delicado cuerpo, notando su suavidad, incluso sobre su ropa. El suave perfume de su piel nubla mis sentidos.
-Me siento afortunada de tenerte a mi lado- musita quedo, mientras se queda mirando mis labios a medida que me voy acercando a su tierna y carnosa boca. Su sabor, cálido, dulce, me fascina, mientras intensifico nuestro beso.
Mis manos suben y bajan por su espalda lentamente, por momentos apretando su cuerpo contra mí. Voy subiendo una de mis manos hasta posarla en su suave mejilla, y con mi pulgar mimo su piel cerca de sus labios mientras la beso. Mi otra mano viaja por el costado de la cadera hasta posicionarla allí, presionado. Muero por apretar sus caderas contra las mías, por sentir su calor.
La atracción entre ambos es innegable, cada mirada, gesto, caricia, está cargada de un magnetismo irresistible.
El insistente sonido del teléfono comienza a incrustarse en mi cabeza junto con el dolor. Abro los ojos y por la ventana observo que aún no es de día. Otra vez soñando con ella. Un dolor sordo en mi pecho empeora el de mi cabeza. Casi dos años y no la puedo sacar de mi sistema. Presiono con fuerza la frente con mis manos. El maldito timbre no para. Quién mierdas llama a esta hora.
Maldigo no haber desconectado la campanilla de ese maldito aparato. La necesidad de seguir durmiendo luego de semanas de infernal trabajo pesa sobre mí. Cuando comienza a sonar otra vez decido levantarme para decirle unas cuantas cosas al que sea que interrumpió mi descanso.
-¡Diga!- Gruño de muy mal humor.
-Soy yo. Quería darle el feliz cumpleaños a mi nieto. - Carraspeo Basil -Pero parece mal momento. -
-Abuelo, buenas noches, estaba durmiendo. - Le respondí masajeando mis mejillas sin rasurar. - ¿Y por qué me llamas para saludar si cenaremos juntos esta noche? Me resultó extraña la llamada, cuando habíamos hablado hacia unas horas para ponernos de acuerdo.
-Tenía pensado ir a festejarlo con ustedes, pero se me ha presentado un imprevisto y no podré viajar esta vez. Feliz Cumpleaños, te amo- se escucha extraño, como si estuviera preocupado, o como si me estuviera ocultando algo, y percibo ruidos de fondo, ¿alguien llorando?
- ¿Qué está pasando? ¿Dónde estás?-, pregunto, atento a los sonidos que llegan a través del teléfono.
-Estoy bien, no te preocupes. Andreas te llamará luego porque tiene una sorpresa para ti, mi regalo de cumpleaños-, responde, interrumpido por murmullos que no logro interpretar. -Te tengo que dejar, - habla apresurado, -pásalo bien, nos vemos pronto-. Y corta. ¡Me ha cortado!
Miro el reloj, son las 6:30 am. Me desperté tan cansado que pensé que no hacía mucho me había acostado. Sé que no podré volver a dormir, así que decido alistarme para ir a la oficina.
La llamada de Basil me dejó desconcertado. La cancelación de nuestros planes y sus respuestas evasivas me preocupaban, aunque no comprendía completamente la gravedad de la situación.
Visto rápidamente y me dirijo a la oficina. Mientras camino, mi mente divaga entre los asuntos del trabajo y la incertidumbre sobre lo que está sucediendo con mi abuelo. Juraría que escuché llantos y voces de fondo durante la llamada.
Al llegar a la oficina, me encuentro con el edificio prácticamente vacío. El personal de seguridad y el de limpieza son los únicos presentes, las luces artificiales no lograban ganarle a la oscuridad que provenía de fuera. El día estaba sombrío y helado como mi interior. Nada me llenaba, ni el éxito presente ni el que sabía estaba por venir. Todo lo que teníamos proyectado ha salido mejor de lo que esperaban, El abuelo, Andreas y Markos.
El silencio era abrumado, en el último piso, en ese ambiente en penumbras, el leve golpeteo en mi pecho era lo único que podía percibir, mientras avanzaba hacia el corredor. Al llegar al sector de recepción con gran sorpresa veo un movimiento que sale del cubículo de mi secretaria, pero no era ella.
-Xanthia- dije un tanto desconcertado. Aunque no debería haberme sorprendido, ese golpeteo en mi pecho es el aviso de su llegada. -No esperaba encontrarte luego de tanto tiempo y tan lejos de Grecia. -
Ella me mira con ojos serios y profundos, y su presencia un tanto fantasmagórica, en este lugar inusual me deja en tensión.
-Thanos-, dice con solemnidad, -los enemigos están en movimiento nuevamente. Hay un gran tesoro oculto, algo muy valioso para ti, que debe permanecer así por ahora, hasta que sea seguro sacarlo de su sitio-.
Sus palabras resonaron en mi mente, intentando descifrar la advertencia. Mi corazón se acelera de anticipación, ante la mención de los enemigos, a tal punto que lo del tesoro queda en segundo plano, pero Xanthia parece tranquila, como si supiera más de lo que está diciendo.
- ¿Qué más puedes decirme, Xanthia?-, pregunto, deseando desesperadamente más información pero consciente de que no hay forma de apresurarla.
Ella me mira con una expresión enigmática antes de responder. -Las cosas se ven oscuras en este momento, pero recuerda que incluso en la más profunda oscuridad, siempre hay una luz que guía el camino-.
Ella asiente con solemnidad antes de desaparecer en la penumbra, dejándome con más interrogantes que antes. A medida que me encamino hacia mi despacho, mi mente está llena de pensamientos turbulentos, me siento prisionero y a ciegas lejos de Atenas.
Sus palabras me dejan reflexionando mientras continúo caminando hacia mi despacho. El edificio parece más silencioso que nunca, y el mensaje críptico de Xanthia solo sirve para aumentar mi inquietud y mi voluntad de descubrir la verdad detrás de sus palabras.
Estaba tan inmerso en mi trabajo, que no había notado el paso del tiempo, hasta que luego de un toque en la puerta entra mi secretaria con un café. -Buenos Días Señor Zephyr. Su abogado está en recepción para verlo. - Dice dejando el café en mi escritorio. -También le traigo los documentos que me pidió. ¿Necesita algo?- La veo sorprendido. Es una muchacha extraña, siempre nerviosa y sonrojada, es eficiente pero me molesta tenerla cerca.
-Haz entrar a Andreas, y no necesito nada, puedes retirarte. - La veo marcharse y me pongo de pie para acercarme a la puerta. Veo venir a Andreas y su expresión es seria. No sé si estoy para más sorpresas, pero esa expresión no augura nada bueno.
-Andreas, has viajado bastante para verme. Imagino que no vienes sólo a saludar. -
-Feliz cumpleaños pequeño. No, no he venido solo a saludar. - Una vez sentados en los sillones de la oficina, vemos como la secretaria deja los cafés y se retira. Andreas saca unos sobres que deja sobre la mesita entre nosotros. Tomo uno para ver el contenido.
-Como verás, esto no estaba previsto, pero Markos ha quedado muy impresionado por lo que han logrado y el cree que ya no puede hacer más por ustedes. Hemos hablado con tu abuelo y están oficialmente al mando de todo. - Señala los sobres. -No puedo quedarme para verlos a todos reunidos ya que tengo que resolver algunos asuntos con los abogados de aquí, así que tú se los darás esta noche cuando los veas.- Se pone de pie. Parece apurado. -Me ha gustado verte tan bien. Has crecido mucho. Viajarán este fin de semana a Grecia, ya Rafael fue notificado. Nos vemos la semana entrante. - Y se marchó. Me quedé allí mirando los sobres.
Con un gesto reflexivo, tomé los sobres y los guardé en mi saco. Sabía que debía compartir esta información con mis amigos, por lo que fui hacia la sala de juntas, consciente de que había llegado el momento de tomar las riendas de nuestro destino y enfrentar los desafíos que se avecinaban.
Al salir de mi despacho me detengo en el escritorio de recepción. -Cita a todos en la sala de reuniones, que dejen todo lo que estaban haciendo, allí los espero. -
El destino nos había lanzado un desafío, una nueva luz comenzaba a brillar en el horizonte, iluminando el camino hacia un futuro lleno de posibilidades y promesas. Por fin habíamos conseguido la libertad. Sin embargo, en lo más profundo de mi ser, resonaba el recuerdo del evento violento que sacudió nuestras vidas, del secuestro de nuestras mujeres, de Rafael herido. Aunque nuestros enemigos desaparecieron luego, una sombra de inquietud se cernía sobre nosotros, recordándonos que el peligro acechaba, esperando su oportunidad para volver a atacar.
Kaelyn dedicó tres años a cuidar de su esposo tras un terrible accidente. Pero una vez recuperado del todo, él la dejó de lado y trajo a su primer amor del extranjero. Devastada, Kaelyn decidió divorciarse mientras la gente se burlaba de ella por haber sido desechada. Después se reinventó, convirtiéndose en una cotizada doctora, una campeona de carreras de auto y una diseñadora arquitectónica de fama internacional. Incluso entonces, los traidores se burlaban con desdén, creyendo que ningún hombre iba a aceptar a Kaelyn. Pero entonces el tío de su exesposo, un poderoso caudillo militar, regresó con su ejército para pedir la mano de Kaelyn en matrimonio.
Valentina, una mujer hermosa y exitosa, tiene un encuentro amoroso con un hombre misterioso en una noche de pasión y romance. Sin embargo, al amanecer, el hombre desaparece sin dejar rastro, y Valentina se queda con más preguntas que respuestas. Un mes después, Valentina recibe la noticia que cambia su vida para siempre: está embarazada. Sintiéndose avergonzada y confundida, Valentina decide viajar a otra ciudad para empezar de nuevo y evitar el escándalo. Años después, Valentina regresa a la capital para pasar las Navidades con su abuela. Mientras explora la ciudad, se encuentra con la boutique más famosa de la ciudad, propiedad de la esposa de un poderoso magnate. Al entrar en la tienda, Valentina se sorprende al ver la reacción de la señora al ver a su hijo. Martina se queda atónita al ver el parecido entre el niño y su esposo, el magnate Gabriel. Furiosa y celosa, decide enfrentar a su esposo y exigirle una explicación. Gabriel, sin embargo, sigue declarándose inocente y fiel a su esposa. Los hijos de la pareja, Benjamín y Jazmín, tratan de calmar la situación y pedir una explicación a su padre. Sin embargo, Gabriel sigue negando cualquier relación con Valentina o su hijo. Mientras tanto, Valentina se siente confundida y asustada por la reacción de Martina. Aún así, continúa con su vida. Pero todo se complica cuando frente a ella aparece toda la familia Milano, reclamando y acusándola como la amante de Gabriel. Furiosa decide revelar el único recuerdo que tiene de aquel hombre con el cual se acostó y producto de eso nació su hermoso hijo, Valerio. ¿Qué pasó realmente aquella noche? ¿Es Gabriel el padre de su hijo? La verdad es más complicada de lo que parece, y Valentina deberá enfrentar sus miedos y dudas para descubrirla.
Kimberly Holden volvió a su vida anterior. Antes, ella fue defraudada por su esposo infiel, acusada falsamente por una mujer vil y acosada por su familia política, ¡lo que llevó a su familia a la bancarrota y ella misma se volvió loca! Al final, embarazada de nueve meses, murió en un accidente de auto, mientras que los culpables se hicieron ricos y llevaban una vida feliz. Ante la segunda oportunidad que le regaló el destino, Kimberly estaba decidida a vengarse. ¡Que todos sus enemigos se vayan al infierno! Ella se deshizo del hombre infiel y su amante, reconstruyó la gloria de su propia familia sin ayuda de nadie, llevando a la familia Holden a la cima del mundo de negocios. Sin embargo, no esperaba que el hombre frío e inalcanzable de su vida anterior tomó la iniciativa para cortejarla: "Kimberly , no tuve la oportunidad en tu primer matrimonio, el segundo siempre será mi turno, ¿verdad?".
Eliana cayó en la trampa que le tendieron su mejor amiga y su prometido teniendo relaciones sexuales con un chapero en el club y quedó embarazada de él. Cinco años después de haber dado a luz a mellizos, regresó a la ciudad y trabajó para el Grupo Moran, donde conoció al CEO, Maurice. Maurice era un hombre sobresaliente de negocios que hacía bien su trabajo. Pero para mantener un bajo perfil, vivió una doble vida. Además de Maurice, también jugaba el papel de Preston. El destino volvió a reunirlos a los dos y los envolvió en una emocionante historia de amor. Todo se volvió más complicado cuando Eliana se enfrentó a Preston, el hombre con el que se había acostado antes, una vez más. Ahora que estaba siendo perseguida por dos hombres, ¿cómo podría elegir? ¿Cuándo descubriría Eliana el secreto de la identidad de Maurice? ¿Cuándo iba a saber Maurice que ya tenía dos hijos propios? ¿Cómo enfrentaría Eliana a este hombre cuando un día la verdad saliera a la luz? Ven y descúbrelo.
Después de tres años de matrimonio sin amor, la traición de Neil hirió profundamente a Katelyn. Ella no perdió tiempo y rápidamente se deshizo de ese canalla. Tras el divorcio, se dedicó a su carrera profesional. Alcanzó la fama como diseñadora, doctora y hacker brillante, y se convirtió en un icono venerado. Neil, consciente de su grave error, intentó en vano reconquistarla, solo para presenciar su magnífica boda con otro. Mientras sus votos se retransmitían en la mayor valla publicitaria del mundo, Vincent deslizó un anillo en el dedo de Katelyn y declaró: "Katelyn es ahora mi esposa, un tesoro de valor incalculable. Que todos los que la codicien tengan cuidado".
Yelena descubrió que no era la hija biológica de sus padres. Después de darse cuenta de que intentaban venderla por conseguir una inversión, la enviaron a su lugar de nacimiento. Allí descubrió que en realidad era la heredera de una familia opulenta. Su verdadera familia la colmó de amor y adoración. Ante la envidia de su supuesta hermana, Yelena superó todas las adversidades y se vengó, al tiempo que demostraba su talento. Pronto llamó la atención del soltero más codiciado de la ciudad. Él acorraló a Yelena y la inmovilizó contra la pared. "Es hora de revelar tu verdadera identidad, querida".